La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) exhortará a los diarios de todo el continente americano a donar papel a los de Venezuela, tal y como han hecho los de Colombia, para ayudarlos a cubrir temporalmente su carencia de material sobre el que imprimir
EFE.- «Exhortaré a los diarios de todo el hemisferio, desde Canadá hasta Tierra de Fuego, a que sigan el ejemplo de Colombia y contribuyan a la posibilidad de que los diarios venezolanos puedan seguir existiendo», dijo a EFE Claudio Paolillo, presidente de la Comisión de la Libertad de Prensa de la SIP.
En una entrevista en Barbados, donde comenzó la reunión semestral de la SIP, Paolillo anunció que tiene previsto hacer este llamamiento público este sábado, durante la revisión del informe periódico sobre la situación de la libertad de prensa en Venezuela.
Paolillo instó a imitar así la decisión de la Asociación Colombiana de Editores de Diarios y Medios Informativos (Andiarios) de enviar 52 toneladas de papel periódico en calidad de préstamo a diarios colegas venezolanos.
La prensa venezolana tiene dificultades para comprar divisas e importar la materia prima de los rotativos por las restricciones impuestas por el Gobierno de Nicolás Maduro.
La iniciativa de Andiarios es un gesto «simbólico» porque equivale al papel necesario para tan sólo quince días de circulación, pero «interesante», según la SIP, porque pone al Gobierno de Venezuela en un aprieto, ya que si no deja llegar ese material «se cae la careta».
«Los camiones de momento aún están en la frontera», dijo en referencia a la carga detenida mientras las autoridades venezolanas verifican la mercancía en los aspectos sanitarios, documentación de importación y asignación de rutas, unos trámites que se podrían alargar hasta el lunes.
A comienzos de esta semana los camiones con el papel salieron de la ciudad colombiana de Cartagena hacia Venezuela para cubrir temporalmente las necesidades de los periódicos El Nacional, El Impulso y El Nuevo País.
El diario El Nuevo Día, de Puerto Rico, ya ha expresado su solidaridad con esta iniciativa y también ha anunciado que donará otras diez toneladas de papel.
Según la ONG Espacio Público, en Venezuela han dejado de publicarse 13 periódicos y otros 17 han tenido que reducir su extensión.
Para Paolillo, el apoyo de otros medios de la región supondría poner aún más a prueba al Gobierno de Venezuela para ver si continua con su estrategia de «restricciones directas a los periódicos».
Asfixia a la prensa
En cuanto a las radios, «cada vez que una trata de hacer algo independiente o saliéndose de la línea oficial, se recibe la llamada amenazante«.
«Sólo queda la prensa escrita para expresarse de forma libre y el Gobierno, en lugar de clausurar directamente, como hacían las dictaduras militares de derechas, ha optado por un mecanismo de censura sutil», acusó.
Para los dueños de los medios, los atrasos en la asignación de dólares representan un intento del Gobierno para «silenciar» a voces críticas, una posición compartida por la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) al tiempo que dirigentes oficialistas hablan de intento «chantaje político» con las denuncias de escasez de papel.