Organizaciones como Espacio Público, el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa y el Instituto Prensa y Sociedad han calificado con unanimidad al año 2014 como uno de los peores del periodismo venezolano.
“Este es el peor año en mucho tiempo, más agresiones que en tiempos electorales cuando sabemos que debido a la polarización los periodistas han quedado en medio de la confrontación. Cada agresión contra un trabajador de un medio es una agresión a la libertad de expresión“, dijo Marco Ruiz, secretario general del SNTP, consultado por El Nacional.
Los ataques contra la integridad física de los periodistas sólo son la cara más visible y extrema de una embestida total contra la libertad de prensa iniciada por Hugo Chávez y continuada por Nicolás Maduro. Lo que comenzó con la Ley Resorte (de Responsabilidad Social en Radio y Televisión), que establece sanciones a los periodistas que hagan denuncias contra funcionarios, siguió con el cierre de los medios opositores, como RCTV.
Nueva estrategia: La compra de medios
En 2013 apareció una nueva estrategia: la compra de cadenas de televisión críticas, como Globovisión, por empresarios afines al Gobierno.
“Si bien es propio de cualquier economía abierta la compra de un medio, esas negociaciones han estado caracterizadas por cambios en las líneas editoriales, como ocurrió en Globovisión, Últimas Noticias y varios diarios del interior”, señaló Marianela Balbi, directora del IPYS, tal como lo reseña la web La Patilla.
“Los medios comprados están rendidos a intereses político partidistas. Ha significado una enorme presión para los trabajadores y también se dio la pérdida de más de 200 puestos de trabajo“, dijo Ruiz.
Sin papel
En 2014, se pasó a una nueva instancia: negar los dólares que se necesitan para importar papel a algunos medios impresos. Uno de los casos más emblemáticos fue el del diario El Nacional, según lo relata también la web La Patilla.
En enero de este año el rotativo debió reducir la cantidad de páginas en un 40% (de 28 folios a 16). El periódico tomó esta medida para no consumir sus provisiones y, así, evitar el cierre técnico.
También redujo el tiraje de lunes a sábado, que estaba en unos 85.000 ejemplares, y decidió mantener la circulación de los domingos, que es 240.000 ejemplares.
Pero la medida también golpeó a otros periódicos, como El Impulso, que redujo de cuatro a un solo cuerpo. La misma suerte corrió El Correo del Caroní, que pasó de imprimir 32 páginas a 8; y El Oriental, del Estado Monagas (noreste).
De acuerdo con datos del IPYS, los otros diarios que tuvieron que reducir el número de sus páginas fueron: La Nación, de Táchira (centro), que pasó de imprimir 36 folios a 16; y La Noticia y La Prensa, de Barinas (norte), que redujeron de 28 a 20.
Según consigna El Tiempo, esta arremetida del Gobierno contra la prensa opositora podría terminar afectando a más de cien periódicos. De esa manera, quedarían sin empleo unas 30.000 personas.
Lo más grave es que cinco diarios detuvieron su circulación en el último año por la falta de papel. Entre ellos El Diario de Sucre, que tenía 27 años de existencia; Antorcha, de 59 años; El Sol de Maturín, de 43 años; El Guayanés, de 20 años; y Notidiario, de 28 años.
Procesos administrativos
También se han impuesto medidas administrativas o judiciales contra medios de comunicación y sus directivos, como en el caso de El Nacional y Tal Cual. Recientemente el director de Notitarde ha sido víctima de amenazas.
El 26 de junio el Ministerio Público designó a la fiscal séptima de Carabobo, Aracelis Pérez, para que inicie las investigaciones en respuesta a la denuncia realizada por el gobernador de Carabobo y coordinador nacional de Estrategia Política y Electoral del Psuv, Francisco Ameliach, contra el director del diario Notitarde, Laurentzi Odriozola, a quien acusa de estar implicado en presuntos planes de asesinato en su contra o de su familia, tal como lo señala El Nacional.
El sábado 7 de junio llegó a las instalaciones del diario El Nacional una citación del Ministerio Público para que el presidente editor Miguel Henrique Otero y su hija, Alejandra Otero, fueran a declarar en calidad de testigos ante el Sebin, por estar presuntamente vinculados a una conspiración para derrocar el Gobierno de Nicolás Maduro.
Asimismo, los tribunales admitieron el 6 de marzo pasado la demanda que Diosdado Cabello introdujo por difamación contra Carlos Genatios, el director del periódico Teodoro Petkoff y otros miembros de la directiva de Tal Cual, después de que en el artículo de opinión “Patria y Muerte”, publicado el 17 de enero pasado, se le atribuyera al presidente de la Asamblea Nacional la frase “Si no les gusta la inseguridad, váyanse”. Se aplicaron medidas cautelares a la junta directiva del medio y al articulista: prohibición de salir del país y presentación en tribunales cada ocho días.
Agresiones
Desde enero hasta el 15 de junio de 2014 se han registrado 366 violaciones a la libertad de expresión en Venezuela. La cifra representa un aumento de 27,5% en comparación con todo 2013, cuando hubo 287, de acuerdo con la ONG Espacio Público.
Carlos Correa, director ejecutivo de la asociación civil que tiene como fin la promoción y defensa de los derechos humanos, afirma que existe una política de hostigamiento hacia el gremio periodístico, así como lo pone de relieve la web de El Nacional.
A su juicio, hay un problema sistémico en el ejercicio de la profesión, porque en la política de Estado represiva confluyen varios factores.
Las violaciones a la libertad de expresión incluyen en primer lugar los casos de agresiones hacia los comunicadores sociales, con 78; las amenazas, con 68 y las intimidaciones, 65.
En lo que va de 2014 hay 45 casos de censura, 43 hostigamientos verbales, 28 ataques, 21 hostigamientos judiciales y 17 restricciones administrativas.
Un total de 307 reporteros, fotógrafos e infociudadanos fueron víctimas de estas violaciones, principalmente en febrero y marzo, por la represión de los cuerpos de seguridad y la actuación ilegal de los grupos civiles armados durante las manifestaciones. El ingeniero José Alejandro Márquez murió después de ser golpeado brutalmente por funcionarios de la Guardia Nacional el 19 de febrero en la noche, por realizar grabaciones en La Candelaria y practicar el periodismo ciudadano.
Acto de heroísmo
El presidente del Colegio Nacional de Periodistas, Tinedo Guía, considera que ejercer la profesión en Venezuela es un acto de heroísmo porque el Gobierno considera enemigos a quienes hacen su trabajo e intentan revelar la verdad, según lo destaca la web de El Nacional.
“Piensan que ocultando la verdad van a seguir teniendo la hegemonía comunicacional, pero eso no va a pasar gracias a las tecnologías modernas. Con Internet y un simple celular se puede demostrar que la mentira tiene patas cortas. Por ejemplo, se desnudaron los 15 años de corrupción en la carta de Jorge Giordani”, dijo.
Asegura que la ley del ejercicio es claro, cuando nombra a los periodistas custodios del sistema democrático: “El periodista es el perro guardián de la sociedad. Debemos luchar por todos los medios por un país libre, con un trabajo de calidad y respeto a la Constitución”.