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Expertos advierten sobre el peligro de recetar antiinflamatorios no estoroideos, que pueden desarrollar hemorragias en caso de presencia de dengue.
El repunte de cuadros febriles ha encendido las alarmas. De acuerdo con el Boletín Epidemiológico 37, se reportaron 128.209 casos fiebre entre el 7 y el 13 de septiembre. “En este momento lo que estamos considerando es que todo proceso febril agudo se considere chikungunya hasta que se demuestre que es dengue”, indica Elia Sánchez, vicepresidenta de la Sociedad Venezolana de Infectología, tal como lo destaca un trabajo de la periodista María Emilia Jorge para El Nacional.
La medida se recomienda hasta que se descarte a través de exámenes de sangre si se trata de dengue, chikungunya o algún otro padecimiento.
El tratamiento debe ser exclusivamente a base de acetaminofén para controlar, sobre todo, la fiebre. “Lo ideal es manejarlo como un potencial dengue al medicar, porque hay medicinas que pueden desarrollar manifestaciones hemorrágicas”, apunta Moraima Hernández, jefa de la unidad de Infectología de la Maternidad Concepción Palacios.
El paracetamol es otra de las medicinas que puede tomar en caso de presentar fiebre. Así lo apunta el infectólogo Julio Castro, investigador del Instituto de Medicina Tropical, que afirma que “tiene los mismos componentes del acetaminofén, pero paracetamol es el nombre europeo”.
Los expertos recomiendan mantener hidratado al paciente, que tome mucha agua y lleve una dieta que pueda tolerar, basada en sopas y alimentos licuados. Los baños y compresas con agua fría también contribuyen al control de la temperatura.
La fiebre, el dolor y las erupciones son síntomas comunes entre el dengue y el chikungunya. La diferencia radica en que en última el dolor se concentra en las articulaciones (codos, rodillas, muñecas, tobillos) y en el dengue es general y muscular
Evitar los Aines
“Existe la posibilidad teórica de que el paciente tenga las dos patologías, porque las produce el mismo vector. Los dos virus están circulando actualmente, sobre todo en la zona central del país”, indicó la jefa de Infectología de la Maternidad Concepción Palacios. Ante ese supuesto y ante la dificultad de diferenciación clínica, la experta recomienda descartar el uso de antiinflamatorios no esteroideos (Aines), como el ibuprofeno, el diclofenac potásico y sódico, o la novalcina, que pueden fomentar el desarrollo de hemorragias.
