El presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, Diosdado Cabello, desestimó un reporte de prensa que aseguró que está siendo investigado por Estados Unidos bajo sospechas de integrar una red de narcotráfico junto con otros funcionarios del Gobierno, y desafió a sus acusadores a presentar pruebas
Reuters
Cabello, el hombre más poderoso del oficialismo después del presidente Nicolás Maduro, estaría bajo la lupa por presunto tráfico de cocaína y lavado de dinero, según publicó el diario estadounidense Wall Street Journal.
Durante una sesión de la Asamblea, Cabello, flanqueado por legisladores oficialistas, dijo que era víctima de una campaña contra el Gobierno pero no aludió directamente al reporte.
[quote_center]“Los que me están acusando hoy de narcotráfico presenten una sola prueba, una solita”, dijo Cabello.[/quote_center]
Más temprano, los principales líderes de la oposición venezolana habían instado al Gobierno de Maduro a investigar los reportes del diario.
“Son denuncias graves en las que se presume que nuestro país sirve de puente para el narcotráfico», dijo el líder de la oposición Henrique Capriles durante un acto público. «Ellos se la pasan diciendo que controlan este delito (…) Puro cuento”.
Por su posición geográfica a orillas del Caribe, Venezuela se ha convertido en un punto de exportación de una parte de la droga colombiana destinada a Europa y Estados Unidos, el mayor consumidor de estupefacientes del mundo, según especialistas.
Muchos expertos creen que los traficantes han logrado corromper a las fuerzas castrenses, pero el gobierno niega que sus fuerzas armadas hayan sido seducidas por los cárteles, aunque reconoce que hay “manzanas podridas”.