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La instancia formada por la Contraloría General de la República, la Fiscalía General y la Defensoría se ha pronunciado a favor de la Asamblea Nacional Constituyenye, porque invita a un «debate propositivo» y «conduce a una salida electoral» a la crisis que atraviesa el país
Agencia EFE
El Consejo Moral Republicano considera «pertinente» la convocatoria a una Asamblea Constituyente, hecha el pasado 1 de mayo por el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro. Destaca que invita a un «debate propositivo» y «conduce a una salida electoral» a la crisis que atraviesa el país.
«La convocatoria a una Asamblea Nacional Constituyente garantiza la participación de todos los sectores de la sociedad, toda vez que se trata de una solución perfectamente constitucional a la crisis que vivimos», dijo el presidente del Consejo, Tarek William Saab.
El Consejo Moral Republicano, formado además por la Contraloría General de la República y el Ministerio Público, consideró que la convocatoria a una Asamblea Nacional Constituyente (ANC) está «prevista en el artículo 348» de la Constitución.
«Además, consideramos que resulta pertinente pues implica la convocatoria al debate propositivo y porque conduce a una salida electoral a esta coyuntura histórica que vivimos», añadió el funcionario, pese a que la Fiscal General de la República, Luisa Ortega Díaz, se manifestó en días anteriores con un comunicado en el que se mostró en desacuerdo con la iniciativa de reescribir la Carta Magna.
Según Saab, la Constitución, «como carta común a los venezolanos, también fue diseñada para modernizarse y adaptarse a los nuevos tiempos, como los actuales». Destacó que «en su articulado se encuentran previstos los mecanismos para su enmienda, su reforma o incluso para su total transformación».
Además de admitir que la república «atraviesa por una coyuntura excepcional«, el Consejo señaló como «innegable que la salida a esta situación se encuentra en la paz, el diálogo y el reencuentro entre las venezolanas y venezolanos».
También formuló un llamado «a la defensa de la soberanía nacional, a la independencia, a la no injerencia extranjera en los asuntos internos del país, a la tolerancia y al respeto entre iguales».
Y al insistir en el debate pacífico de las ideas como la vía para solventar las diferencias, ese poder indicó que la Constituyente es «una gran oportunidad que no debe ser desaprovechada por ningún sector del país».
