razonnet
El país quiere paz, sosiego, vivir solidaria y productivamente. Estamos agobiados por tantos dislates, insensateces y conductas criminales de parte y parte
Manuel Isidro Molina
La mayoría inconforme y maltratada de venezolanos y venezolanas tendrá hoy la oportunidad de manifestarse decisivamente ante las elecciones convocadas para una Asamblea Nacional Constituyente (ANC) por el presidente Nicolás Maduro con bases comiciales fraudulentas, unidireccionalmente y en forma inconsulta. Simultáneamente, tendremos la oportunidad de enterrar la irresponsable política de quienes han arrastrado a la Mesa de Unidad Democrática (MUD) por el camino de la violencia destructiva y asesina, sin precedentes.
Todo el pueblo venezolano participará este domingo 30 de julio en y en torno a las elecciones de los miembros de la ANC, una minoría a favor de la convocatoria del gobierno/PSUV y la inmensa mayoría en contra de sus pretensiones fraudulentas: los casi 20 millones de electores y electoras participaremos, sin excepción, de las tres formas posible: 1. Voto a favor de los candidatos del gobierno/PSUV; 2. Abstención; y 3. Voto nulo.
Si, como es previsible, la suma de abstenciones y votos nulos resulta superior a los votos obtenidos por el oficialismo, los derrotados serán el presidente Nicolás Maduro -convocante según el artículo 348 constitucional- y el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) y los grupos de “chiripero del siglo XXI”.
En esa eventualidad, también la dirigencia extremista que ha secuestrado a la MUD sufrirá una derrota política definitiva, que la desnudará ante la historia por su irresponsabilidad política, económica y social al haber sometido insensatamente al país a una espiral de violencia fratricida, destrucción y afectación grave de la sociedad venezolana. Durante 114 días generaron hechos tan graves como la quema de personas vivas –asesinatos de odio sin precedentes en nuestra historia-, asesinatos de transeúntes, asesinatos de guardias nacionales y policías; obstrucción de vías públicas, obturación de la vida económica y social, incendio y destrucción de servicios públicos y empresas privadas, saqueos de centros de almacenamiento y expendio de alimentos, licores y bienes muebles, así como daños graves y quemas de vehículos particulares, transporte público y camiones de carga. Y algo insólito: un ecocidio –crimen ecológico masivo- con el corte miserable de miles de árboles sobre ciudades, carreteras y autopistas con el propósito de obstruir vías, generalmente a manos de muy pocas personas focalizadas en las “guarimbas”.
Esta solución de paz que implica la derrota del gobierno por sumatoria activa de la abstención y los votos nulos, también es un serio golpe a la política represiva del gobierno/PSUV, que definitivamente no quiso procesar cívicamente la reacción negativa mayoritaria, procurando un diálogo sincero y respetuoso con su contraparte bipartidista, a pesar del apoyo del papa Francisco, la Unasur y varios ex presidentes amigos, también rechazados por los irresponsables que secuestraron la MUD. Prefirió correr el riesgo de los excesos criminales de guardias nacionales y policías nacionales, quienes muchas veces se han visto superados por pobladas irascibles e incontenibles, y en otras han asesinado a jóvenes manifestantes y atropellado a comunidades enteras, hechos dolorosos y censurables como los cometidos por la oposición/MUD.
El país quiere paz, sosiego, vivir solidaria y productivamente. Estamos agobiados por tantos dislates, insensateces y conductas criminales de parte y parte, es decir de los dirigentes del cepo PSUV-MUD.
La violencia debe parar. El gobierno/PSUV debe comprender que no andamos en los tiempos de la “Comuna de París” (1871); su primitivismo político y visión autoritaria y militarista debe cesar, inmediatamente, igual que el pillaje civil y militar institucionalizado en la administración desde la era Chávez, agravado en la era Maduro.
La oposición/MUD debe mirarse en el espejo, examinarse, analizar el cúmulo garrafal de errores cometidos desde 2002 hasta hoy, por su vana pretensión de expulsar del gobierno violentamente a dos presidentes democráticamente electos empeñados en unas políticas –afortunadas unas, erradas otras- ajenas al dominio de los poderes fácticos tradicionales. Pero sobre todo, la MUD está irremediable obligada a nacionalizarse, a romper sus ataduras cipayas con poderes extranjeros imperialistas y oligárquicos que no calzan en las aspiraciones dignas del pueblo venezolano: Trump, Almagro, Uribe, Santos, Macri, Temer y muchos otros deben ser apartados con sus agendas intervencionistas inaceptables para un pueblo históricamente independentista, latinoamericanista, anticolonial y antiimperialista como el venezolano.
Venezuela no se acaba este domingo 30J. Elevemos la mirada por encima de la mediocridad politiquera y las atrocidades cometidas por los bandos del cepo PSUV-MUD. A pesar de sus irresponsabilidades, inconsecuencias, traiciones, crímenes e insensateces, nuestra patria no sucumbirá: sabremos retomar el camino de la superación para reconstrucción nacional integradora. El próximo lunes 31, Venezuela comenzará a ser otra, camino a un desarrollo en paz, equilibrado, solidario y futurista.
EL CONFESIONARIO
LOD Y GF TIENEN “APOYO LOGÍSITICO de Eligio Cedeño, a través de su sobrino Julio Boscán”. ¿Cuánto? No sé… todavía.
EN UN “CANGREJO” se ha convertido el caso de las tierra de “Gavilán-La Chaqueta” en Barinas, que burócratas oficialistas estarían interesados en adjudicar a un contratista de PDVSA. Tanto el INTI como tribunales han establecido que se ha burlado la Ley de Tierras para desconocer los derechos de los campesinos, incluyendo familias indígenas.
MARCO TORRES salió del Banco de Venezuela “renunciado”. La entidad bancaria bandera del gobierno parece no estar tan bien como anunciaba su multimillonaria campaña publicitaria. ¿Quedará todo en secreto, como en los casos de Banfoandes, Banco Industrial de Venezuela y Banco Industria de Venezuela-Cuba?
AVANZA NUESTRA ALIANZA política alternativa: Unidad Política Popular 89 (UPP’89), Marea Socialista (MS), Movimiento Popular Alternativo (MPA) y el Movimiento Electoral del Pueblo Auténtico (MEP-A) acordamos actuar nacionalmente como fuerza social y política integrada en todas las regiones del país, con propósitos de convocatoria a un encuentro mayor de organizaciones sociales, políticas y culturales independientes y opuestas decididamente al cepo PSUV-MUD, que tanto daño le ha hecho y le está haciendo a Venezuela.
EN MATERIA DE CONTITUYENTE (ANC) decidimos convocar a la abstención pacífica contra el fraude de las bases comiciales impuestas por el gobierno/PSUV con su esquema represivo, y a la violencia irracional desatada por la oposición/MUD. Esta confrontación irresponsable deja ya un saldo doloroso de más de cien venezolanos y venezolanas asesinados, en su mayoría jóvenes, cuyo luto nacional pesa sobre los hombros de los dirigentes de la MUD y el PSUV, extremistas corresponsables de la crisis.
EL VOTO NULO queda como segunda opción, muy respetable, para todos aquellos compatriotas que se vean obligados a concurrir a los centros de votación por la inhumana presión coactiva del gobierno/PSUV bajo amenazas burocráticas y pecuniarias, que afectarían económica y laboralmente a las familias de centenares de miles de venezolanos y venezolanas dependientes de la administración públicas, sus políticas sociales y las empresas del Estado. Lo mismo vale para los miembros de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) y la Policía Nacional Bolivariana (PNB). Su desquite será el voto nulo, en secreto y sin riesgo de sufrir retaliaciones.
PARTICIPAREMOS IGUALMENTE en las elecciones de gobernadores y legisladores regionales programadas por el CNE para el 10 de diciembre de 2017, cuya inscripción preliminar correrá entre 8 y 12 de agosto próximo, Llevaremos candidatas y candidatos con vocación de servicio, sin “rabos de paja” por enriquecimiento ilícito o abuso de poder, ni vinculaciones con el cepo PSUV-MUD.
LA ALIANZA UPP’89, MS, MPA, MEP-A anunciará en la primera quincena de agosto, sus bases de compromiso ético, social y político por la reconstrucción moral de la República, las auditorías públicas ciudadanas sobre las 23 gobernaciones y sus respectivos consejos legislativos regionales, la defensa de los derechos sociales y políticos del pueblo, el diálogo nacional integrador en defensa de la paz, la independencia nacional, el civismo y la solidaridad, y la construcción desde estados y municipios de un proyecto político nacional trascendente, responsable históricamente, para la superación del lamentable estadio en que nos han entrampado los fracasados liderazgos del cepo PSUV-MUD.
@manuelisidro21 – @manuelisidroXXI
