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La larga cadena de corrupción ha convertido a una cáfila ignara (civiles y militares), “pobres de solemnidad”, en auténticos potentados, en medio de la más grave crisis social y económica
Oscar Battaglini
Lo más parecido a las medidas que ha tomado el régimen madurista en contra de la corrupción que ha comenzado a desbordarlo, es la célebre imagen del ladrón que en una esquina cualquiera de la ciudad comienza a señalarles a los policías que lo persiguen, el lugar por donde el supuesto ladrón ha escapado al tiempo que grita: ¡al ladrón, al ladrón! Se trata de la conocida táctica de la huida hacia delante, que significa en este caso, ponerse el gobierno al frente de la denuncia de la corrupción desbordada y de intentar castigar de manera “ejemplarizante” a algunos de los burócratas del gobierno en ella incursos para, no sólo pretender lavarse la cara y aparecer ante la opinión pública como impoluto, sino lo más importante, ocultarla del escrutinio y la sanción pública; cosa que por lo demás no le resultará nada fácil dado lo extendido que está en el seno de la sociedad venezolana la certeza acerca de los latrocinios que desde un comienzo han caracterizado la gestión gubernamental chávezmadurista.
No hay más que ver lo que fue la conducta de Chávez, sobre todo en lo referente al manejo que hizo de las finanzas del Estado, y el papel que le asignó a los organismos encargados de la administración y control de esos cuantiosos recursos. El primer paso que Chávez da en esa dirección estuvo deliberadamente orientado a viciar, a corromper a esos organismos y a su funcionariado, a fin de convertirlos no sólo en cómplices de sus latrocinios, sino en instrumentos claves de su política depredadora. Estos son los casos del BCV y de Pdvsa, a los cuales se les modificó sus respectivas normativas para ponerlos al servicio de esa política depredadora.
Mediante la modificación de la Ley del BCV se le arrebató su autonomía y se le redujo significativamente el ingreso en dólares que Pdvsa debía poner a su disposición; recursos que, como se recordará fueron a parar al Fonden, organismo que supuestamente se creó para financiar la “política social” del gobierno, pero que en lo fundamental funcionó como la caja chica y como la base financiera del peculado y de todo tipo de negociados de la camarilla corrupta en el poder. He ahí la razón por la que hasta el día de hoy no se ha producido ni se conoce un informe-balance acerca del monto de los cuantiosos recursos depositados en él y el uso que se les dio. Cabe señalar que si bien el Fonden es un ejemplo emblemático de la corrupción y los desmanes cometidos por el Chávez-madurismo en esta materia, constituye apenas un eslabón más en la larga cadena de corrupción que ha convertido a una cáfila ignara de aventureros políticos (civiles y militares) y además “pobres de solemnidad”; gente de la más baja extracción muchos de ellos, en auténticos potentados, en medio de la más grave crisis social y económica en la historia del país, provocada por su pésima gestión de gobierno.
Entre cuyos hechos cabe destacar: 1- El saqueo que se ha hecho de las reservas internacionales, que de más de 30 mil millones de dólares, han quedado reducidas a algo más de 9 mil millones. 2- El plan Bolívar 2000 (porque además el nombre del Libertador ha servido para todo) por cuyo intermedio los militares que Chávez colocó al frente de su dirección y administración, se apropiaron delictivamente de más de 2 mil millones de bolívares. 3- Las negociaciones fraudulentas y antinacionales adelantadas con las transnacionales petroleras en la Faja petrolífera del Orinoco y con las transnacionales mineras en el Arco Minero del Orinoco. 4- El saqueo del Fondo Chino. 5- La compra de armas a Rusia. 6- Los negociados realizados a la sombra de la Corporación Venezolana de Guayana. 7- El otorgamiento de divisas preferenciales por Cadivi, organismo que se ha convertido en uno de los principales medios de súbito enriquecimiento para quienes están cerca del poder. 8.-Los negociados con la importación y distribución de alimentos, actividades ejecutadas a través de corporaciones como Casa, Mercal, Pdval, Clap, etc, entidades que han operado como un medio de enriquecimiento de militares y burócratas del Psuv. 9- Las cuentas bancarias de testaferros de Chávez en el exterior (Suiza, Madrid, Andorra, Panamá y paraísos fiscales del Caribe) cuya sorpresiva muerte convirtió a los militares, Alejandro Andrade, Carlos Luis Aguilera Borjas, Adrián Velásquez F., etc, en nuevos ricos. 10- las cuentas bancarias del entorno civil y militar de Maduro que han sido bloqueadas en los Estados Unidos y en Europa. 11- Los sobornos de Odebrecht, a altos funcionarios del régimen y (según declaró Eunando Acevedo, presidente a la sazón.
12- Los casos de Rafael Ramírez, Eulogio Delpino y Nelson Martínez, punta del iceberg y chivos expiatorios ocasionales, en los que el fiscal accidental se ha mostrado muy diligente, no obstante representar un lastre que se arroja al mar en un intento desesperado por mantener la nave a flote ante la inminencia del naufragio definitivo.
