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NELSON MEZERHANE, expresidente del Banco Federal: La persecución que se emprendió en mi contra fue por haber sido accionista y fundador de Globovisión.
Noel Gómez Herrera
El empresario Nelson Mezerhane Gosen, expresidente del Banco Federal, niega de manera enfática haberle vendido el paquete accionario que poseyó en Globovisión, ni a persona vinculada con el gobierno de Venezuela ni a nadie, con lo cual – sin nombrarlo de manera explícita- se refiere al actual propietario de la televisora, Raúl Gorrín, quien aparece señalado en una investigación adelantada por la Fiscalía del Circuito Sureste del estado de Florida, por su presunta participación en delitos de legitimación de capitales por más de dos mil millones de dólares, conjuntamente con el teniente Alejandro Andrade Cedeño, ex Tesorero Nacional y escolta del fallecido presidente Hugo Chávez Frías.
ACCIONES CONFISCADAS
En la carta réplica, enviada al director de “La Razón”, Pablo López Ulacio, Mezerhane aclara la información publicada en la sección “Carrusel”, en la edición del pasado domingo 1 de diciembre, en la que se incluía al referido empresario como uno de los accionistas que vendieron la planta al magnate madurista Raúl Gorrín, quien en realidad adquirió Globovisión, por compra que les hizo a Guillermo Zuloaga, Alberto Federico Ravell y sucesores de Luis Teófilo Núñez, en el año 2013.
“Resulta realmente increíble que mi nombre haya sido vinculado a la venta de las acciones de Globovisión y más lamentable lo es por tratarse de un periódico que circula en un país donde la operación se produjo y donde es un hecho notorio comunicacional que mis acciones en la televisora habían sido confiscadas por el gobierno de Hugo Chávez tres años antes [de producirse la venta]. Fue parte de la persecución que emprendió en mi contra, precisamente por haber sido accionistas y fundador de Globovisión, dice Mezerhane Gosen en su comunicación.
LA PERSECUCIÓN
Recuerda el actual editor del Diario Las Américas, con sede en Miami, Estados Unidos, que en diciembre de 2009 dio una entrevista en la que afirmó que individuos “vinculados al gobierno” habían difundido rumores que provocaron retiros de ahorros de bancos venezolanos. Dos días después, Chávez me denunció en un discurso televisado de hacer declaraciones “extremadamente serias e irresponsables” y dijo que le pediría a la fiscal general “que abriera una investigación formal”. En otro discurso televisado, varias días después Chávez dijo que “esos excesos no se pueden permitir” y afirmando que si me iba a meter en política le tendría que entregar el banco de mi propiedad (Banco Federal) y que si una estación de televisión cruzaba de nuevo la línea, no podía ni debía permanecer abierta.
“Seis meses más tarde el gobierno chavista se apoderó del grupo financiero de mi propiedad (Grupo Financiero Federal), así como de un sinnúmero de empresas, inmuebles, incluyendo mi casa y, por supuesto, mis acciones en Globovisión. Después de esa toma arbitraria, esto es, desde julio de 2010, no tuve control ni posición alguna en Globovisión, pues mi participación, debo repetirlo, me fue confiscada, es decir robada por el régimen chavista”, señala Mezerhane.
“Tres años más tarde, en 2013, los restantes accionistas de Globovisión decidieron vender su participación en la estación. Ninguna intervención tuve en esto y tampoco obtuve beneficio alguno. De hecho, inmediatamente mi abogado y amigo, Asdrúbal Aguiar, hizo la debida aclaratoria en la reunión de la Sociedad Interamericana de Prensa que se llevaba a cabo en ese momento”.
“Desde entonces nadie más que yo lamenta que la televisora que fundé y por la cual arriesgué y perdí el fruto del trabajo honesto de varias generaciones de mi familia, haya caído en las manos equivocadas, pero si ello fue así, no lo fue porque no haya hecho yo todo cuanto estuvo en mis manos para evitarlo. Es más, cuando en Venezuela se restablezca el Estado de Derecho, ejerceré todas las acciones necesarias para rescatar las acciones que me fueron arrebatadas y también aquellas que tenía el derecho preferente de adquirir”, afirma el empresario radicado actualmente en Miami.
“Lo dicho aquí no es un secreto por el contrario, ha sido reportado por las más prestigiosas publicaciones internacionales. Quiero confiar en que la publicación hecha por el semanario sea obra de un error y no de una intención malsana de falsear la verdad. La prontitud y vehemencia de la corrección que usted ordene se haga, tanto en la página web como en la edición impresa del periódico, será el mejor indicio al respecto”, dice Mezerhane en su réplica al editor López Ulacio y agrega finalmente: “En un país donde los medios de comunicación constituyen el último bastión de la libertad, la seriedad y el compromiso con la verdad, cobran especial significado. Espero que La Razón honre esa obligación”. Texto completo de la réplica de Nelson Mezerhane Gosen:
ZULOAGA, RAVELL Y LA SUCESIÓN NÚÑEZ LE VENDIERON A GORÍN
Nelson Mezerhane Gosen insiste en recordar que sus acciones en Globovisión fueron confiscadas por el régimen de Hugo Chávez en el año 2010 y aunque en su réplica a La Razón no los menciona, de manera evidente se refiere a Guillermo Zuloaga Núñez, a Alberto Federico Ravell Arreaza y a la sucesión de Luis Teófilo Núñez Arismendi, como los vendedores de la estación de TV a su hoy propietario, Raúl Gorrín Belisario, hecho ocurrido en el año 2013, en negociación encabezada por el banquero y asegurador Juan Domingo Cordero.
Como se sabe, el 8 de enero de 2019 el Departamento del Tesoro de los Estados Unidos sancionó a Gorrín de estar incurso en actos delictivos, medida que se extendió originalmente a su esposa María Alexandra Perdomo Rosales, su cuñado Gustavo Perdomo Perdomo y la esposa de este último Mayela Antonina Tarascio-Pérez y a sus empresas Globovisión y “La Vitalicia”, por el presunto lavado de de 2.400 millones de dólares, aunque la Oficina de Control de Activos (OFAC, por sus siglas en inglés) emitió una licencia que autoriza ciertas transacciones y actividades con Globovisión Tele CA y Globovisión Tele Corp, por un período de un año. En marzo de este año quedaron sin efecto las medidas contra las esposas de Gorrín y Perdomo.
NGH
