De las fábricas de llantas apenas está operativa Firestone, cuya producción es mínima. Pirelli muy poco producen y Goodyear la tomó el gobierno y no ha empezado todavía a producir
Enrique Meléndez
Johny Magdaleno, presidente de Fetracarabobo, habla no sólo del cierre de miles de empresas, de lo que fue el parque industrial más grande de Venezuela, como lo constituyó el estado Carabobo, y el que iba desde la industria automotriz, pasando por la agroindustria, hasta la de los alimentos, sino que también considera que las pocas empresas que quedan, apenas operan a un 20 de su capacidad; por lo que se ha dado un fenómeno laboral, y es que las empresas han venido suspendiendo a un alto porcentaje de trabajadores, y quienes pasan a cobrar la mitad del sueldo.
¿En qué situación socioeconómica se encuentra hoy el trabajador de Carabobo?
-Después de haber sido la zona industrial, sobre todo, Valencia más grande de Venezuela, hoy está convertida en un cementerio de empresas. Después de haber tenido 5 mil industrias activas. Apenas quedan 1 mil 600 empresas, con un 20% de utilización de su capacidad operativa. Las automotrices desaparecieron: Ford Motor paralizada en su totalidad, lo mismo que la General Motor y la Chrysler
-De las caucheras apenas está operativa Firestone, y cuya producción de cauchos es mínima. Pirelli también está funcionando con una administración americana; pero tampoco se ven sus cauchos en el medio automotor. Muy poco producen. Goodyear la tomó el gobierno, y no ha empezado todavía a producir.
-Por otra parte, también han cerrado empresas decidas a la manufactura, y las únicas que medio se mantienen son las empresas Polar, y eso que ahora ha venido a suceder el caso, violatorio del artículo 148 de la Ley del Trabajo; de que están suspendiendo trabajadores, en especial, en Alimentos Polar, cuya operatividad se ha reducido a 10%; mientras que Cervecería Carabobo redujo su nómina de más de 300 trabajadores a 70. Las plantas de yogur se paralizan cada quince días. En cuanto a las agencias de Polar, apenas queda de la de Guacara.
-De tal manera que nosotros nos hemos convertido en un cementerio de empresas, por lo que el número de desempleados es inmenso; además de los trabajadores que están suspendidos, y quienes, por lo demás, cobran apenas el 60% de su sueldo; por lo que se van al mercado informal, al rebusque con el bachaqueo.
-En cuanto a las empresas dedicadas a la elaboración de productos de higiene y limpieza; Palmolive desapareció, una empresa que tenía más de 3 mil trabajadores. Si nos vamos a los lados de Guacara: Papeles Venezolanos, una de las pocas empresas que quedan operativas, no obstante también ha tenido que suspender a más de 500 trabajadores. La única que más o menos se mantiene es Diana, y eso que es del gobierno. En La Lucha acaban de suspender a 500 trabajadores. Alucasa, paralizada. En el ramo de la pequeña y mediana empresa también se ha venido observando una disminución de las unidades productivas.
-De modo que estamos frente a una verdadera catástrofe laboral. Aquí se perdió incluso la motivación laboral de los trabajadores; producto de que los salarios no alcanzan ni siquiera para comprar un cartón de huevos y un kilo de queso. Es verdad que la empresa privada paga un poco más que la empresa del Estado, pero no es el ingreso suficiente como para mantener a una familia. Es por esa razón que tú ves a los trabajadores de Carabobo desmotivados.
-A esto habría que agregar los problemas que hay en día con el alza continua de los pasajes y, entre tanto, aquellas empresas que tenían comedores, y donde daban hasta tres comidas, hoy en día si acaso dan una. Se trata de una situación desastrosa, lo que estamos viviendo en Venezuela; pero, en especial, el estado Carabobo ha sido el más perjudicado en estos tiempos.
¿Acaso la dirigencia sindical maneja cifras relativas a la cantidad de trabajadores que han ido a la calle?
-No las tenemos en concreto. Pero te puedo hablar, de que por ejemplo en el área de la Cocacola tiene diez mil trabajadores suspendidos a nivel nacional. Polar, que era la empresa que más empleo generaba en el país, tenía 33 mil trabajadores; apenas le quedan 14 mil. Las empresas automotrices tenían cada una más de 3 mil trabajadores.
-Esos eran empleos directos; también tienes que tomar en cuenta los empleos indirectos. Se trata de un tema delicado; porque el otro día el presidente Nicolás Maduro dijo que se estaban produciendo, diariamente, unos 200 vehículos; lo cual es mentira, porque aquí, te repito, las empresas automotrices desaparecieron. Ni siquiera las empresas autopartes, que eran las que también generaban empleo, están operativas.
¿Qué pasó con la sinergia que se operaba entre el parque industrial de Carabobo y las empresas básicas de Guayana?
-Esa alianza industrial ya no existe; porque, por ejemplo, en el caso de las empresas, que se dedicaban a hacer las chapas para las botellas de cerveza y refrescos, tuvieron que cerrar, porque ya no están recibiendo las láminas de hojalata, con las que las fabricaban; aunque subsiste la empresa Domínguez & Compañía dedicada a la producción de los envases para enlatados.
-Había una empresa, que se dedicaba a la fabricación de rines; también desapareció por falta de insumos. Aparte de que hoy en día las cosas van de mal en peor.
Se está manejando la idea, de que el gobierno pudiera comenzar a pagar los salarios en petros. ¿El movimiento sindical admitiría tal forma de remuneración?
-El gobierno anda con este tema, de lo que es la moneda virtual, por la influencia del mundo; donde ya es una realidad, la tecnología Blockchain; pero aquí en Venezuela el petro no ha logrado obtener la confianza, que se requiere para convertirse en una criptomoneda de uso corriente. Por eso el gobierno trata de imponerla, y nosotros hemos decidido que, en materia de discusión de la contratación colectiva, nosotros apelaremos al valor de la unidad tributaria.
-Nosotros consideramos que por esta vía nosotros nos garantizamos un respaldo a nuestros salarios. Lo que yo creo que no es tan fácil tampoco; porque recuerda que nosotros tampoco estamos solos: hay un patrón; que va a buscar su defensa; pues nuestra intención no se basa en hacer quebrar a las empresas. Yo me imagino que a nivel de la administración pública es posible que los salarios los cancelen en petros, y es por eso que nosotros consideramos que la mejor forma de garantizar la protección de nuestros salarios, es estimarlos de acuerdo a unidades tributarias.
-Porque tú, en las condiciones en las que estamos, discutes una convención colectiva hoy, y mañana ya ese nuevo salario, que se acordó, no vale nada.
¿Cómo se prepara el movimiento sindical para los eventos que vienen, sobre todo, este año, que ha comenzado muy turbulento?
-Nosotros este año vamos a tratar de legitimarnos, para mantenernos firmes. Queremos decirle al país, que nosotros nos estamos organizando, para llevar representantes a la Asamblea Nacional; ya que no tenemos representantes allí. En ese sentido, nosotros vamos a comenzar a hablar con los partidos políticos.
-Nosotros no queremos propiciar divisiones. Pero consideramos que el sector de los trabajadores debe tener una representación en nuestro parlamento. Ya sabemos que no tenemos quién nos defienda, y por eso nosotros estamos recorriendo al país, en función de ese propósito.