Mientras la sociedad rusa da los primeros pasos para salir del confinamiento, el Kremlin también quiere recuperar el tiempo perdido en sus planes políticos.
Después de fijar nueva fecha para el desfile militar de la Victoria, el 24 de junio, el lunes volvió a la agenda del presidente ruso, Vladimir Putin, la reforma constitucional que le permitirá seguir al frente de Rusia hasta el año 2036.
La votación, que estaba prevista para el 22 de abril y se aplazó por el coronavirus, se celebrará el próximo 1 de julio, según anunció el propio Putin. Ese día será miércoles, pero será declarado festivo, ha explicado el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov.
La fecha del 1 de julio, una semana después de la parada militar para festejar el 75 aniversario de la victoria contra la Alemania de Hitler, fue propuesta por la presidenta de la Comisión Electoral Central, Ella Pamfílova, durante una reunión por videoconferencia del grupo de trabajo sobre la reforma.
Una enmienda coloca el contador de mandatos de Putin a cero, pero no para los siguientes presidentes
Putin estuvo de acuerdo en lo “idóneo” de la fecha. Recordó que la fecha del 22 de abril se aplazó “en base a la principal prioridad: preservar la vida y la salud de nuestros ciudadanos”. Pero aseguró que ahora la situación epidemiológica ha cambiado.
Con anterioridad se había propuesto que esta votación se celebrara el 24 de junio, coincidiendo con el desfile militar. El mandatario ruso justificó que se celebrara el mismo día por la consideración de “sagrado” que tiene el aniversario de la Victoria en Rusia, que se celebra el 9 de mayo, y para no mezclar ambos asuntos.
Aunque la emergencia sanitaria va descendiendo en Rusia, y sobre todo en Moscú, epicentro aquí de la pandemia, las consecuencias que está dejando no son muy halagüeñas para el poder ruso. Entre otras cosas, la popularidad del propio Putin va a la baja. Según el Centro Levada, su aceptación ha llegado al 59 %, aunque según el Centro de la Opinión Pública (VTsIOM) se mantiene en el 67%.
La pandemia rebaja la popularidad de Putin y golpea la economía, que este año descenderá un 5 %
La herida económica es otra preocupación. El coronavirus metió un bocado del 12 % al PIB ruso. El Gobierno cree que este año la caída será el 5 %, la mayor caída desde la crisis de 2009, cuando el descenso llegó al 7,8%.
El desempleo ha superado los dos millones de personas, advirtió el lunes en el Consejo de la Federación (Senado) el ministro de Trabajo y Seguridad Social, Antón Kotiakov. El defensor de los empresarios, Borís Titov, asegura que el 67 % del pequeño y mediano empresario se ha visto afectado.
El Gobierno ha elaborado un plan para restablecer los daños de esta pandemia en un año y medio, según publica el financiero RBK. De este modo, quiere que a finales de 2021 el crecimiento sea del 2,5 % y estable.
Si está en el Kremlin hasta 2036, Putin superará a Stalin, pero no a Iván el Terrible ni a Pedro el Grande
”A medida que mejore la situación con esta pandemia, volveremos a la normalidad”, prometió Putin. Pero él no quiere esperar mucho para resolver la reforma constitucional, que él mismo lanzó en enero.
Según aprobaron ya el Parlamento ruso y las asambleas regionales, con el visto bueno del Tribunal Constitucional, una de las enmiendas se ha hecho especialmente para Putin. La propuso formalmente la diputada y exastronauta Valentina Tereshkova y consiste en colocar el contador de mandatos presidenciales de Putin a cero. De ese modo, no se tendrá en cuenta que en 2024 se cumplen los dos mandatos consecutivos como máximo que marca la actual redacción de la Constitución.
Ese año podrá volver a presentarse y, como una reforma anterior fijó en seis los años en el poder del presidente, podrá estar en el poder hasta el 2036. Eso es más tiempo del que estuvo Stalin al frente de la Unión Soviética. En la historia rusa sólo le superarían Iván el Terrible, con medio siglo en el poder, y Pedro el Grande, que estuvo 43 años en el trono.
En Moscú ya se puede pasear: por turnos, tres días a la semana y a menos de dos kilómetros de casa
El contador sí volverá a contar con los presidentes que sean elegidos después.
Tanto el desfile militar como la votación pueden provocar concentraciones de población que hagan temer un rebrote de la infección. Pero las autoridades rusas creen que es seguro. Anna Popova, responsable de la agencia de salud pública Rospotrebnadzor, ha dicho que el día 1 de julio es adecuado para que los rusos den el visto bueno a la reforma de la Constitución.
Rusia lleva dos semanas por debajo de los 10.000 nuevos contagios detectados. Moscú, el epicentro de la pandemia, registra menos de 5.000 en ese tiempo y ya lleva una semana en torno a los 2.000. Este martes, concretamente, se han contabilizado 2.286.
El número total de muertos es de 5.037.
Con estos datos, Moscú y otras regiones han empezado el desconfinamiento de la población. En la capital esta semana ha comenzado a abrir el pequeño comercio y sus habitantes pueden pasear libremente tres días a la semana por turnos entre las nueve de la mañana y las nueve de la noche en un radio de dos kilómetros respecto a su casa.
Via-Gonzalo Aragonés – Diario la Vanguardia