El vicepresidente de la Fundación Fondo Nacional de Transporte Urbano venezolano (Fontur), Eloy Sulbarán, informó hoy que existen ocho estaciones de servicio en esta capital habilitadas para surtir gasolina al transporte público.
“Estamos atendiendo a todo el transporte público del municipio Libertador, suministrando el combustible en perfecto orden para que el pueblo tenga el servicio al día”, agregó ante la cadena Venezolana de Televisión.
Los responsables de la ejecución de planes y programas sobre transporte público, quienes se asumen como “comprometidos con el presidente venezolano Nicolás Maduro”, agregaron que mantienen un registro de todos y cada uno de los transportistas en el país.
Sulbarán agregó que los conductores están desplegados en las estaciones de servicio del país, “este despliegue nos permite agilizar y verificar que los transportistas surten el combustible, y ser garantes que se les preste el servicio”.
En contraste, de acuerdo al diario El Universal, desde el lunes, las colas para echar gasolina a los autos privados “no han dejado de existir y cada vez son más largas”. Algunos conductores han decidido quedarse hasta más de un día en la fila para llenar sus tanques.
Según nos reportan usuarios y transportistas del área metropolitana, el régimen está priorizando a Caracas (municipio Libertador) en la distribución de la gasolina subsidiada. El que quiera gasolina barata váyase a las bombas de Catia, allí tiene más chance.
Las filas han sido constantes desde que el 1 de junio se habilitaron 200 estaciones de gasolina con precios de 50 centavos de dólar por cada litro. Vehículos particulares pueden acceder a gasolina subsidiada con un límite de 120 litros. El combustible subsidiado tiene un costo de cinco mil bolívares (0.050 centavos de dólar) por cada litro.