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El cuerpo incorrupto de Carlo Acutis, joven italiano que falleció en octubre de 2006 a los 15 años de edad, asombra al mundo entero.
En febrero de este año, el papa Francisco aprobó los milagros atribuidos a Carlo y por tal motivo el próximo sábado 10 de octubre será beatificado por el Vaticano en la Basílica Superior de San Francisco de Asís, en Italia.
El milagro que completó el proceso de beatificación consistió en la curación de una anomalía congénita que estaba afectando a un niño de Brasil. Este hecho se produjo el 12 de octubre del año 2010 en la localidad de Campo Grande.
Esta curación se produjo en la capilla de Nuestra Señora de Aparecida, durante el momento de la bendición de las reliquias. El niño padecía de páncreas anular y fue llevado al lugar por su abuelo. El criterio aplicado por el Vaticano para declararlo beato es que esta enfermedad no es común y muy compleja para el tratamiento médico.
Carlo también es conocido como el Ciber Apóstol de la Eucaristía y el Patrono de Internet, por haber volcado su pasión por la informática en la elaboración de páginas web en Internet para promover la fe cristiana. A los 14 años realizó un documental para resaltar la importancia de la eucaristía y la lectura diaria de la Biblia. Diversas comunidades han señalado que Carlo podría convertirse así en el primer evangelizador que empleó las plataformas tecnológicas para difundir la palabra de Dios.
Llevó una vida muy intensa en lo espiritual y generoso en expresiones de solidaridad con los más necesitados. Afirmaba que el kit para hacerse santo estaba constituido por la eucaristía, la celebración de la comunión y la lectura diaria del rosario a la Virgen. Estas eran las principales enseñanzas que brindaba durante sus encuentros con los demás.
Vivió la fe religiosa en todos los aspectos de su vida
Carlo Acutis nació el 1 de mayo de 1991en Londres, Inglaterra. Sus padres, Andrea Acutis y Antonio Salzano, procedían de Milán, Italia, y se encontraban temporalmente en la ciudad londinesa por motivos laborales.
Recibió el sacramento bautismal el 18 de mayo de ese año en la parroquia Nuestra Señora de los Dolores, en la Calle Cirencester, al oeste de Londres. Posteriormente, el 8 de septiembre la familia decidió retornar a su hogar en Milán.
A los cuatro años de edad, inició el jardín de infancia de la escuela municipal de Parco Pagano. En 1997 comenzó los estudios de educación primaria en el Instituto Tommaseo de la congregación de las Hermanas de Santa Marcelina. Desde temprana edad, procuró vivir la fe religiosa en cada uno de los aspectos de su vida.
Al cumplir los siete años, recibió el sacramento de la comunión en el monasterio de las monjas Eremitas de San Ambrosio, en Perebo. Allí comenzó su amor por la eucaristía y a la cual él mismo se refirió como “mi autopista hacia el cielo”. El 24 de mayo de 2003, recibió el sacramento de la confirmación en la parroquia de Santa María Secreta.
Carlo asistía a diario a misa en su localidad, en donde rezaba el Santo Rosario y realiza un momento de oración ante Jesús Sacramentado. Era muy devoto de la Virgen María a quien consideraba como su confidente. Otros de sus modelos religiosos eran San Francisco, Santa Jacinta Marto, Santo Domingo Savio, San Luis Gonzaga y San Tarsicio.
En septiembre de 2005, inició sus estudios de bachillerato en el Instituto León XIII de los padres jesuitas. Durante la etapa de adolescencia, pasaba tiempo con su familia y amigos. De igual modo, ayudaba a personas sin hogar como voluntario en los comedores populares. También daba clases de catequismo a los niños y a los más necesitados.
Entre sus pasatiempos favoritos, estaba la informática y donde demostró gran genialidad de acuerdo a relatos de familiares y amigos. Este talento lo aprovechó para llevar a cabo la elaboración de sitios web en Internet que utilizó para difundir testimonios e ideas de fe religiosa.
A principios del año 2006, fue diagnosticado con leucemia, del tipo m3 y la cual es considerada una de las más agresivas. El 10 de octubre de ese año, Carlo pidió recibir el sacramento de la unción de los enfermos y la comunión con la certeza que fallecería. Ofreció su sufrimiento al papa Francisco y al pueblo católico. Al día siguiente, entró en estado de coma a raíz de una hemorragia cerebral causada por la enfermedad, la cual apenas se había manifestado cinco días antes. Murió el jueves 12 de octubre de 2006 en el hospital San Gerardo de Monza, Italia.
El 12 de octubre de 2012, se abrió oficialmente la causa de beatificación y canonización de Carlo Acutis. El Vaticano le concedió posteriormente el título de Siervo de Dios. El 5 de julio de 2018, el papa Francisco lo declaró Venerable. El próximo 10 de octubre de 2020 será beatificado en la Basílica Superior de San Francisco de Asís. Antes de saber de manifestarse su enfermedad, el joven había manifestado que en caso de morir quería ser sepultado en esta basílica.
