«Ya está totalmente arreglado, es un proceso que está siendo supervisado por una árbitro totalmente parcializado y no va a ser observado por ningún actor internacional serio, la OEA no reconoce ese proceso y la Unión Europea ya dijo, claramente, que no vendría
Enrique Meléndez
Cipriano Heredia, dirigente de Voluntad Popular, admite que la detención del periodista Roland Carreño, constituye una retaliación por parte del régimen de Nicolás Maduro; como consecuencia de la fuga de Leopoldo López
“Evidentemente, estamos bajo los efectos de los que los amigos del Foro Penal llaman la puerta giratoria; mediante la cual mientras unos salen, otros entran a la cárcel”, asegura el también profesor universitario.
¿Fue una fuga lo del Leopoldo López o un acuerdo diplomático entre España y Venezuela; tratándose de un personaje muy incómodo, en su condición de asilado en la embajada española?
-El propio Leopoldo López en la rueda de prensa, que dio el martes de esta semana desde Madrid aclaró ese asunto de manera muy contundente: no hubo negociación con Nicolás Maduro, en general, y no la hubo tampoco con respecto a su salida de la casa del embajador, su posterior escapada hacia Colombia y, finalmente, al Reino de España.
-Como Leopoldo lo contó, esa fue una decisión muy personal que él tomó; después de haber evaluado las circunstancias y de haberse hecho la pregunta en dónde era más útil; tomando en cuenta la situación concreta, que estamos viviendo, y la situación que se veía con respecto al cambio de embajador de España en Venezuela; de modo que esa pregunta se la respondió él mismo; cuando llegó a la conclusión de que le resultaba más útil estar afuera; moverse a sus anchas; poder declarar; poder motorizar; poder desplegar muchas acciones.
-Representar al gobierno del presidente Juan Guaidó y al equipo, del cual él forma parte, y por eso con la ayuda, solamente, de cinco personas; como él lo dijo, que nadie sabe quiénes son; pues logró salir de la residencia del embajador, y, por último, marchar al exterior. Así que no hubo ninguna negociación con el régimen.
-El régimen lo que quería era volver a capturar de nuevo a Leopoldo López; que no se nos olvide, pasó los últimos siete años de su vida privado de su libertad; de diversas maneras: casi cuatro años en Ramo Verde; un año y medio en su casa y un año y medio en la residencia del embajador de España. Las tres son formas de estar preso; de modos distintos, pero privado de su libertad, al fin y al cabo.
» El régimen es experto en sembrar armas, dinero, e inventar argumentos para detener y desprestigiar a la gente»
¿Cuál será la hoja de ruta que seguirá a continuación Leopoldo López?
-Leopoldo seguirá siendo el comisionado del presidente Juan Guaidó para asuntos del gobierno interino, y en función de tal cargo; pues, evidentemente, le corresponderá representar al gobierno legítimo de Venezuela en diversas actividades y eventos. Por supuesto, eso lo hará en la medida en que se mueva en el campo de la política internacional, en coordinación con el comisionado para asuntos exteriores del gobierno, que es Julio Borges; pero, evidentemente, Leopoldo es un líder con mucha fuerza; se trata de un líder importante. Viene de ser un preso de conciencia por más de 7 años; en el cual todo el mundo tenía la mirada puesta y, bueno, por supuesto, Leopoldo está llamado a cumplir tareas y a hacerse sentir en el exterior por la importancia que tiene su liderazgo y su cargo.
¿Es una retaliación, como dice Leopoldo López, la detención de Roland Carreño, con motivo de su fuga?
-Evidentemente, estamos bajo los efectos de los que los amigos del Foro Penal llaman “la puerta giratoria”; mediante la cual mientras unos salen, otros entran a la cárcel. Por ejemplo, hace poco salieron varios presos políticos, entre los más destacados, Juan Requesens, Gilber Caro, Roberto Marero, etcétera. Pero, por otro lado, está entrando, por ejemplo, Roland Carreño.
-En su caso, el régimen le sembró unas armas, además de un dinero, según ellos; en ese sentido, lo vinculan con unos supuestos actos terroristas, etcétera; que, por supuesto, no tienen nada que ver con la actividad política que despliega Roland Carreño; que es un activista de Voluntad Popular, y que tiene la tarea concreta de ser el coordinador operativo del partido.
-En lo que sí está apuntado Roland Carreño es en la organización del partido; en la organización de la Consulta Popular; en la organización de la militancia; en los preparativos de la movilización; para lo cual nos preparamos en función de esa consulta; que es una consulta que está en la Constitución; prevista en el artículo 70, y a la cual tenemos absoluto derecho todos los venezolanos y que, además, ha sido producto de un enorme consenso dentro de las fuerzas democráticas; ya que lo apoyan más de 37 partidos y más de 100 ONG´s de la sociedad civil.
-Lo que pasa es que ya sabemos como funciona esto. El régimen es experto en montar ollas, en sembrar armas, dinero, e inventar argumentos; para detener y desprestigiar a la gente.
¿A usted no le parece que la convocatoria a esta consulta se hace en un momento muy extemporáneo; dada la apatía e indiferencia que hay en la sociedad venezolana? Si es un fracaso, ¿no redundará en el deterioro que ha venido sufriendo el liderazgo de Guaidó?
-La consulta es producto de un consenso; no se trata de una disposición de Juan Guaidó ni de Voluntad Popular a los demás y a los demás actores políticos. Todo lo contrario, la consulta es el resultado de un largo proceso de diálogos, intercambios entre los partidos y la sociedad civil; los partidos y los sectores organizados: gremios empresariales y sindicales, y está prevista la consulta como uno de los puntos, que forma parte del acuerdo unitario; que suscribieron más de 37 organizaciones hace ya casi tres meses.
-Así que la consulta, lejos de ser algo que está de espaldas a la gente y al consenso, es producto de un gran acuerdo político entre partidos, sociedad civil, gremios profesionales y sindicales, así como otros sectores organizados y es, además, una alternativa, para que haya un evento de participación masiva y ciudadana, alternativo al fraude electoral, que el régimen ha convocado, para el 6 de diciembre.
-Quiero decirte, además, que esa consulta responde, así como nuestro acompañamiento a diversas protestas sociales y sectoriales, que ha habido como la del 5 de octubre; cuando estuvimos acompañando a los maestros, y como la que va a haber el 4 de noviembre, en la cual también los vamos a acompañar, esta consulta responde a la demanda; que había en la opinión pública de que, si bien había apoyo para la postura principista de no participar en la farsa del 6 de diciembre; en la cual sólo están compareciendo algunos factores, que decidieron aliarse con el régimen; había una demanda de no quedarnos en la mera abstención; sino que teníamos que tener una agenda activa.
-Parte de esa agenda activa tiene que ver con la consulta, y ya tú vez: todo el movimiento que se ha generado en las últimas semanas; en torno al movimiento “Venezuela: esa su luz”; la juramentación del comando nacional; la juramentación de los comandos regionales y ahora estamos en la etapa de la habilitación de los comandos municipales; con lo cual, la dirigencia política democrática ha reencontrado el camino, con la organización y la movilización; luego de que el régimen lograse desmovilizar, no solamente a los partidos, sino también a toda la sociedad; con motivo de la pandemia, a la cual se le dio un uso bastante política, precisamente, para enfriar la calle y tratar de devolvernos a nuestras casas, sin que pasara mayor cosa.
-¡Pues están pasando cosas! Nos estamos volviendo a organizar y a movilizarnos; de modo que la Consulta Popular, entre otras cosas, será un gran ejercicio de organización y movilización, articulado entre todos los sectores democráticos del país.
¿Hasta qué punto impactó en Voluntad Popular la intervención por parte del gobierno, en el marco de la Operación Alacrán?
-Para nada, tan sólo tres diputados que fueron picados por esa Operación, y quienes desde enero están participando de esa farsa; al igual que lo están haciendo los miembros de la Mesita de la Casa Amarilla. Aunque no se pusieron de acuerdo entre ellos. Van divididos, pero desde mucho tiempo atrás ya se sabía que ellos iban a participar en la farsa de Maduro.
-Cuando uno oye a Maduro, acerca de lo que va a pasar en este proceso, que ya está totalmente arreglado, un proceso que está siendo supervisado por una árbitro totalmente parcializado; un proceso donde no hay condiciones; donde no hay garantías y donde es muy difícil hasta hacer campaña, por el tema de la pandemia y la crisis económica que atraviesa el país. Los resultados de este proceso ya están cantados.
-Es un proceso en el que el PSUV se va a hacer de la mayoría; además, aumentaron el número de diputados a 277; pero le va a dar una buena tajada, que ya, prácticamente, estaba arreglada a estos factores, que decidieron convalidar la farsa; por un lado, los factores que componen la Mesita; por otro lado los factores que fueron picados por el Alacrán; para simular que lo que salga de allí es un producto del ejercicio democrático; cuando ya sabemos que lo que va a salir de allí se trata de un gran engaño al pueblo venezolano; donde las cuotas ya están repartidas de antemano.
-Además, ese proceso no va a ser observado por ningún actor internacional serio. La OEA no reconoce ese proceso; la Unión Europea ya dijo, claramente, que no vendría a observar el proceso y, bueno, los que vienen son una serie de acompañantes; la inmensa mayoría de la izquierda latinoamericana; que ya han venido en otras ocasiones, y siempre dicen que los procesos venezolanos son maravillosos; que nunca pasa nada; que todo transcurre tranquilamente; que los resultados son absolutamente legítimos.
-Eso tienen varios años diciéndolo, y ya sabemos lo que pasa en Venezuela desde el año 2016 para acá. Hasta el año 2015 siempre hubo muchas irregularidades; pero que, básicamente, eran ventajismos oficiales, en cuanto al manejo de recursos y uso de los medios de comunicación. También algo de coacción sobre los funcionarios públicos; abuso del voto asistido, y algunas marramuncias, que se llevaban a cabo en algunos centros de votación, con respecto a la hora del cierre; traslado de gente fuera del horario, etcétera.
-Pero desde el 2015 para acá; cuando perdieron abrumadoramente la Asamblea Nacional; a pesar de esas irregularidades, el nivel de fraude subió a un punto realmente superlativo e infranqueable, y se dieron estas cosas; como fue, por ejemplo, el robo del referéndum revocatorio; al cual teníamos derecho y que activamos, de acuerdo al artículo 72 de la Constitución; pero que nunca pudo concretarse; porque se lo robó el gobierno. No quiso hacerlo y, finalmente, puso a un tribunal regional a suspenderlo.
-La posposición inexplicable de las elecciones regionales; que debían ser en el 2016; que no fueron: no ocurrieron; luego se sacaron del sombrero una Asamblea Nacional Constituyente sobre unas bases comiciales, absolutamente, inconstitucionales; por último, se dio el proceso de las elecciones regionales, pero con un año de retraso, y donde pudimos observar todo tipo de trampas; tanto las viejas, como una serie de trampas nuevas que, realmente, elevaron el nivel de fraude a un punto, en el cual no se puede sortear.
-Estamos hablando de migración masiva de electores; estamos hablando de la operación carrusel; estamos hablando del uso del Carnet de la Patria como mecanismo, no sólo de identificación, sino también de coacción sobre los electores. Estamos hablando de la proliferación de centros de votación con una sola mesa; la instalación de mesas electorales dentro de los patios de los complejos de la Misión Vivienda, y en las puertas de los centros de votación los puntos rojos.
-Estamos hablando de un descaro absoluto por parte del Plan República, respecto de permitir que el PSUV haga lo que le dé la gana y, en cambio, coacciona a los partidos de la oposición. Estamos hablando del ejercicio de violencia contra nuestros testigos en las mesas, y contra los electores cuando iban a ser trasladados a los centros de votación, hacia donde fueron migrados, y estamos hablando de un largo etcétera; que pudimos ver con nuestros propios ojos, y sentir en nuestra propia carne en las elecciones regionales de 2017.
-Por eso, a partir de esas elecciones para acá, la oposición democrática más representativa; la que tiene la mayoría en la AN, ha decidido no volver a participar en farsas electorales; cuyos resultados están predeterminados; porque el nivel de fraude, la falta de condiciones y de garantías; la falta de observación internacional seria y el árbitro parcializado predeterminan esos resultados y eso es, simple y llanamente, inaceptable.
-Se buscó una solución con la negociación de República Dominicana en el 2018. No se lograron condiciones mínimas, para poder asistir, y no se asistió. Y últimamente también se estuvo buscando la posibilidad de designar un CNE desde la AN; que es a quien le corresponde, y una vez más el régimen pateó la mesa; decidió designarlo a través del Tribunal Supremo de Justicia que, a su vez, es ilegítimo, y, bueno, se trabó cualquier posibilidad de dar a Venezuela unas elecciones libres, justas y verificables.
-En ese planteamiento, de que Venezuela tiene una dictadura; de que necesita una transición hacia la democracia; que esa transición nos puede llevar a un puerto seguro, con motivo de la realización de unas elecciones justas y verificables, no solamente parlamentarias, sino también presidenciales; en ese planteamiento nos acompaña todo el mundo occidental o, al menos, la inmensa mayoría.
-Estoy hablando de América y de Europa y de hecho, los foros políticos, que la representan; como es, pongamos por caso, la OEA, la Unión Europea en sus diversos organismos; sobre todo, la Eurocámara, que se ha pronunciado varias veces sobre este tema, y esto tiene tanto consenso que hasta el Reino de España ha ido endureciendo su posición, y una de las cosas, para la que ha servido la llegada de Leopoldo López a España es para que el gobierno de ese país vaya decantando su posición, y ya tu viste que el último anuncio, que acaban de hacer.
-No van a enviar embajador a Venezuela; que ya no reconocen a Maduro como presidente, además de los resultados que ocurran el 6 de diciembre de este año en la farsa electoral, que convocó Maduro, si es que esa farsa llega a concretarse. Así que España se ha sumado a la postura mayoritaria e irreductible de la Unión Europea; que ha tenido en esto una posición muy firme; para no hablar de la OEA o de países, como EEUU, que han sido mucho más firmes, y han ido, incluso, mucho más lejos, en cuanto a las sanciones se refiere.