El gobierno del presidente Alberto Fernández apuesta por el diálogo inclusivo en Venezuela, que no favorezca a un sector en particular. Asimismo, apoya la realización de elecciones aceptadas por la mayoría y bajo control internacional.
Argentina anuncia este martes que se retira formalmente del Grupo de Lima, creado en 2017 para acompañar las acciones de la oposición venezolana, por considerar que este foro internacional “no ha conducido a nada” en la pretensión de aislar al gobierno de Nicolás Maduro.
La medida de la administración del presidente Alberto Fernández es interpretada por los expertos como un gesto de su gobierno de respaldo y acercamiento a Venezuela. A su vez, está rompiendo con la política aislacionista que impulsó el anterior presidente de la nación, Mauricio Macri.
La nueva decisión de Argentina es divulgada a través de un comunicado de la Cancillería. En el texto también se expresa que el gobierno de Fernández apuesta por el diálogo inclusivo que no favorezca a un sector en particular. Asimismo, apoya la realización de elecciones aceptadas por la mayoría y bajo control internacional.
La Cancillería agrega que el mandatario Nicolás Maduro tiene en sus manos la responsabilidad para hacer que el proceso de diálogo sea productivo e incluya a la oposición, así como también a actores sociales de la vida venezolana tales como la Iglesia católica, los empresarios y las ONG.
“En un contexto en el que la pandemia ha hecho estragos en la región, las sanciones y bloqueos impuestos a Venezuela y a sus autoridades, así como los intentos de desestabilización ocurridos en 2020, no han hecho más que agravar la situación de su población y, en particular, la de sus sectores más vulnerables”, se destaca en el texto.
En tal sentido, el documento concluye con la reiteración de que el gobierno sureño continuará sosteniendo su compromiso con la estabilidad en la región. “Argentina buscará encaminar soluciones pacíficas, democráticas y respetuosas de la soberanía y de los asuntos internos de cada Estado”, resalta.
Vale recordar que en octubre de 2020, Argentina se negó a suscribir el acuerdo del Grupo de Lima donde rechazaba las elecciones parlamentarias convocadas por Maduro, a través del Consejo Nacional Electoral, y ratificaba su respaldo al gobierno interino de Juan Guaidó.
En esa oportunidad, el gobierno de Alberto Fernández fue claro en su posición al indicar que no reconocería como Presidente a alguien que nunca tuvo el ejercicio efectivo de la Presidencia de la República de Venezuela.
Por su parte, la embajadora del gobierno interino de Juan Guaidó en Buenos Aires, Elisa Trotta Gamus, se pronuncia en la tarde de este miércoles, a través de un hilo de tuits en Twitter, frente a la decisión de Argentina de abandonar el Grupo de Lima:
“Lamentamos la decisión del Gobierno argentino de abandonar el Grupo de Lima, que desde el 2017 ha sido fundamental para denunciar las graves violaciones a los DD.HH. en Venezuela, y para trabajar en la única solución real, que es recuperar la democracia en nuestro país”, escribió en la red social.
Añade que los venezolanos estamos luchando contra una dictadura que ha asesinado a decenas de miles de personas por represión, operativos parapoliciales, hambre, falta de medicinas y más. “Nosotros también deseamos gritar ‘nunca más’, y para lograrlo necesitamos toda la ayuda posible”, indica.
Acota que la comunidad internacional sabe que las sanciones no son las causantes de la crisis que padecen los venezolanos. “El único culpable de la emergencia humanitaria compleja es Maduro y sus crímenes de lesa humanidad. ¡No hay bloqueo, hay dictadura!”, escribe.
“Seguimos apostando al trabajo conjunto de todas las naciones hermanas para lograr la solución en nuestro país, incluyendo a Argentina que históricamente ha sido un aliado de Venezuela y de la causa democrática. El pueblo venezolano necesita y merece justicia y libertad”, concluye.