La muerte de Floyd generó una ola de protestas, no solo en Estados Unidos sino en el resto del mundo, contra el racismo y la brutalidad policial. El caso de Floyd y hasta su rostro se convirtieron en emblemas de lucha contra estos flagelos.
Un jurado popular en Estado Unidos declaró culpable al exagente policial del estado de Mineápolis, Derek Chauvin, por haber causado la muerte del ciudadano afroamericano George Floyd el 25 de mayo de 2020.
Este proceso judicial mantuvo en vilo a toda la población estadounidense durante varios meses, que temió la repetición de protestas de comunidades afroamericanas ante un posible resultado adverso en el tribunal.
El jurado determinó de manera unánime la responsabilidad del exagente policial de tres cargos formulados en su contra, y los cuales se centraban en haber efectuado la asfixia a Floyd durante un procedimiento policial.
Chauvin es acusado de haber aprisionado su rodilla en el cuello de la víctima durante nueve minutos. El video y fotografías de este ataque le dieron la vuelta al mundo y produjo olas de protestas en la nación estadounidense.
La muerte de Floyd generó una ola de protestas, no solo en Estados Unidos sino en el resto del mundo, contra el racismo y la brutalidad policial. El caso de Floyd y hasta su rostro se convirtieron en emblemas de lucha contra estos flagelos.
Expertos en materia legal han destacado que en Estados Unidos son excepcionales las ocasiones en las cuales el sistema de justicia condena por asesinato a los agentes de los cuerpos policiales.