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España solicita al dictador Daniel Ortega que “juegue limpio” y libere a opositores

Los comicios de Nicaragua están previstos a realizarse en noviembre y el dictador Ortega aspira a ser reelegido nuevamente.

El presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, exige al dictador de Nicaragua, Daniel Ortega, que “juegue limpio” y proceda a liberar a los dirigentes opositores que han sido arrestados durante las recientes semanas.

“Me gustaría dirigirme personalmente y directamente al presidente Ortega: que juego limpio, que libere a los opositores y que concurra, en juego limpio y en buena lid, a ese proceso electoral”, expresa Sánchez

La preocupación por la situación política del país centroamericano fue expresada por el mandatario español durante una conferencia de prensa que ofreció luego de una reunión bilateral sostenida con el presidente de Costa Rica, Carlos Alvarado. Este viernes concluye una visita de dos días de Sánchez a Costa Rica.

Sánchez destaca que la posición de España con respecto a la situación en Nicaragua es similar al de la Unión Europea a partir de una firme defensa de los derechos, las libertades y los valores democráticos.

“Vemos con muchísima preocupación lo que está ocurriendo en Nicaragua que, por cierto, no es nuevo, lo hemos venido arrastrando desde hace unos años”, añade.

Hasta la presente fecha, cuatro precandidatos a la Presidencia de Nicaragua permanecen bajo arresto: Cristiana Chamorro, Arturo Cruz, Félix Maradiaga y Juan Sebastián Chamorro García.

Vale resaltar que estas personas han recibido la visita de efectivos de la Policía de Nicaragua, la cual ha sido señalada de estar bajo la dirección de Francisco Díaz, quien es consuego del dictador Daniel Ortega.

Otras personas arrestadas durante las recientes semanas y bajo acusación de diversos delitos son el extitular del Consejo Superior de la Empresa Privada (Cosep) José Adán Aguerri, al exvicecanciller José Pallais, la activista opositora Violeta Granera y a dos excolaboradores de una ONG.

Los comicios de Nicaragua están previstos a realizarse en noviembre y el dictador Ortega aspira a ser reelegido nuevamente.

Por su parte, la dictadura venezolana expresa su rechazo ante la nueva arremetida injerencista de Estados Unidos contra el pueblo y las instituciones de Nicaragua, al dictar medidas coercitivas unilaterales contra cuatro altos funcionarios.

“Esta nueva expresión de soberbia imperialista constituye una clara manifestación de desprecio hacia el Derecho Internacional, con el objetivo de evitar que el Estado nicaragüense tome decisiones soberanas para garantizar la paz y la estabilidad de ese hermano país”, indica.

La dictadura venezolana no se ha pronunciado con respecto a los precandidatos y demás personas detenidas por la Policía de Nicaragua durante las recientes semanas.