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Bodegones y casinos #Opinión #DomingoAlbertoRangel

El ex ministro, ahora dado de baja del oficialismo y retirado a sus clases en la LUZ, critica la economía que llama “de bodegones” porque con esas medidas el PIB no crece

Domingo Alberto Rangel

Un amigo economista, laureado en el extranjero, por un trabajo donde planteaba que “sin envidia no hay socialismo” en estos días me llamó para señalar como envidioso otro economista que siendo ministro de Finanzas de Hugo Chávez fue quien sentó las bases para la hiperinflación que vino después.

El motivo de la llamada fue que el ex ministro, ahora dado de baja del oficialismo y retirado a sus clases en la LUZ, critica la economía que llama “de bodegones” porque con esas medidas el PIB no crece.

Ese ex ministro descubrió dos cosas: su docta ignorancia que ahora pretende patentar el agua tibia, y cómo dijo mi amigo, la envidia que siempre es difícil de esconder: en este caso contra los bodegones.

Pero a la vez dejó ver el ex ministro una tercera pata chueca: que sin vivir en Miami donde todo se banaliza, desde Maracaibo también se puede transcurrir el tiempo soñando como el adicto su dosis, un pasado que no volverá. A ver.

Responderle al ex ministro y a toda una pléyade de financistas e intermediarios con enchufes en las multinacionales, que anuncian la recuperación para 2 o 3 años»

Pensar que esta Venezuela, destrozada tras décadas de estatismo democrático y cristiano, tras 20 años de socialismo disparatado, y 4 o 5 años de sanciones, podrá volver a ser como fuimos durante 3 generaciones, es ser más ingenuo que un creyente que le prenda velas a San Guaidó.

Responderle al ex ministro y a toda una pléyade de financistas e intermediarios con enchufes en las multinacionales, que anuncian la recuperación para 2 o 3 años, después de la caída del gobierno, implica que definan a cual época quieren volver.

¿A la de Pérez Jiménez?

¿A la del primer Carlos Andrés Pérez?

¿O a la del Hugo Chávez que vendía petróleo a 100 dólares el barril y entregaba casas con aire acondicionado y neveras llenas?

Entre los emigrantes y no importa si son 6 o 5 millones, nuestro país perdió gran parte de lo mejor, fueran neurocirujanos, o prostitutos y prostitutas, pasando por mecánicos y gerentes»

Bajo cualquiera de las hipótesis cabe y a riesgo de que la estupidez me vuelva a llamar “chavista”, a guisa de insulto, advertir que no solo es imposible esa meta deseable, sino que también antes de cambiar de gobierno… hay que sacar de juego a la oposición.

Entre los emigrantes y no importa si son 6 o 5 millones, nuestro país perdió gran parte de lo mejor, fueran neurocirujanos, o prostitutos y prostitutas, pasando por mecánicos y gerentes.

Con esa gente no se puede contar porque difícilmente volverá.

Tampoco volverán los créditos de multinacionales no solo porque el gobierno venezolano tiene una bien ganada fama de “mala paga”, sino porque occidente tras varias décadas de vagancia, se ve enfrentado a múltiples problemas, que ya no puede resolver “a realazos”. Uno de ellos nuestro país y su economía.

Así que debemos arar con los bueyes que tenemos y esa es la razón por la cual lo que tenemos para incrementar el PIB son agricultores andinos»

Nuestra industria petrolera y es bueno recordarlo a los populistas del quiosquito de periódicos, se construyó tras largos años, y con los ahorros de yanquis, británicos y holandeses.

No fue el empresariado venezolano quien erigió lo que tras la nacionalización fue Pdvsa.

Y a ese occidente casado con la inflación que en USA no se había vivido, y en Europa casi desde el ascenso de Hitler, no le sobran recursos para invertirlos en Venezuela a pesar de lo que cacarean demagogos y populistas. Amén que el petróleo ya no es el producto más importante del planeta.

Así que debemos arar con los bueyes que tenemos y esa es la razón por la cual lo que tenemos para incrementar el PIB son agricultores andinos, ganaderos del llano, amen de empresarios con bodegones y casinos.

Quienes se mueven alrededor de ese tipo de importaciones con los bodegones a diferencia de los agricultores andinos no suelen reinvertir en el país lo ganado»

Y es triste que tras 60 años desde que Rómulo Betancourt recordaba que “el capital si tiene patria”, tras 20 años de una extraña revolución donde los jefazos que se dan de baja huyen a Miami, cargados de dólares, en medio de la mayor recesión del país, la sociedad por falta de un verdadero movimiento nacionalista y de oposición, regrese al bodegón y al Día de la Secretaria.

A esta altura y para terminar advierto que no suelo entrar en los bodegones y más bien compro donde es más barato, pero no por eso le tendría envidia a sus propietarios y clientes que son pocos en realidad, pero generalmente quienes se mueven alrededor de ese tipo de importaciones a diferencia de los agricultores andinos no suelen reinvertir en el país lo ganado.

Y así no crece el PIB: para lograr el bienestar perdido, la sociedad, el gobierno, y sobre todo la oposición, tenemos que cambiar.

Al gobierno ganándole algún día el poder porque es un imposible que cambie mucho, y a la oposición sustituyéndola por otra más seria, patriota y menos ladrona.

@DomingoAlbertoR

EL AUTOR es ingeniero civil, consultor, asesor y dirigente político. Premio Nacional de Periodismo 2019, mención Opinión.

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