Los dos mosquitos que trasmiten la enfermedad son Haemagogus y Sabethes. Venezuela tenía varios años sin reportes de casos hasta esta semana
La Organización Mundial de la Salud (OMS) informó esta semana sobre un brote de fiebre amarilla en Venezuela, luego de haberse confirmado siete casos a través de pruebas de laboratorio realizadas a finales de septiembre.
La OMS indicó que lo más urgente es aumentar la cobertura de vacunación en la población que vive en zonas amazónicas y que está expuesta a dos mosquitos que trasmiten la enfermedad (Haemagogus y Sabethes).
En tal sentido, el presidente de la Sociedad Venezolana de Infectología, Manuel Figuera, afirma que la cobertura de vacunación de fiebre amarilla está entre 50 % y 60 %. Al respecto, urgió que se aumente la vigilancia epidemiológica en zonas de mayor riesgo.
“La fiebre amarilla es una infección viral que es transmitida por varios tipos de mosquitos. Puede ocasionar una infección severa en el 20 y 30 % de las personas, inclusive ocasiona la muerte en algunos casos por problemas hepáticos y renales”, explica.
Señala que esta enfermedad se puede prevenir con las vacunas. Añade que afectaba a todo el continente americano y actualmente se encuentra controlada. “En América solo persisten algunos focos, sobre todo en animales primates de la Amazonia”.
Señala que Venezuela tenía muchos años sin reportes de casos hasta la advertencia de la Organización Panamericana de la Salud del hallazgo de siete nuevos casos en la localidad de Carapal, municipio Maturín. Indica que ninguna de las personas fallecieron pero tampoco estaban vacunadas.
“Es la vacunación el modo de controlar este problema. Todas las personas que viven en zonas selváticas y rurales deben estar vacunadas. Las vacunas son de un virus atenuado y no debe colocarse en personas inmunosuprimidas, ni embarazadas, ni menores de un año. Esta vacuna genera protección de por vida”, agrega.