Manuel Antonio Guzman Gomez
Su profunda sabiduría intelectual de Andrés Eloy, se expresó de mil maneras como bardo inmejorable, político intachable, diplomático insigne, escritor y ferviente militante de la causa independentista, libertaria y democrática
M.A. Guzmán Gómez I VERDADES
Hace 67 años se nos fue el inimitable compatriota y fecundo poeta universal Andrés Eloy Blanco, de una nobleza e inteligencia sabia con talento excepcional e inigualable y quien, a decir de nuestro gran y genial Aquiles Nazoa, «por humorista fue el parlamentario más brillante del siglo XX».
La profunda sabiduría intelectual de Andrés Eloy, expresada de mil maneras como bardo inmejorable, político intachable, diplomático insigne, escritor, ferviente militante de la causa independentista, libertaria y democrática, distinguía «su noble condición humana e idealismo de otro tiempo», todo lo cual le costó cárceles, confinamientos y exilio perezjimenista en la ciudad de Méjico, donde encontró la muerte en un absurdo accidente de tránsito – nunca aclarado – el 21 de mayo de 1955. El 6 de junio de ese mismo año – 16 días después – se realiza el sepelio de sus inmortales restos en Caracas «bajo estrictas medidas de seguridad dictatorial…!Que’ ironía !..vigilar a un hombre fallecido, bueno y generoso…cuya bonhomía destacaba por su sencillez, afabilidad, bondad y honradez a toda prueba.
De su nutrida y vasta producción literaria público, a la muerte del otro dictador Juan Vicente Gómez, «Carta a Juan Bimba«, personaje popular con el característico sombrero de cogollo, alpargatas y un bollo de pan en el bolsillo que luego tomó AD como emblema partidista usado en la campaña «entreguista» de Raúl Leoni (1964) e inmediatamente engavetado para siempre – nunca más se supo – y, de esa manera, el otrora «partido del pueblo» traiciona sus postulados e ideales socialistas democráticos a los que Andrés Eloy encarnó toda su vida ejemplar, con especial énfasis en su celebre «Píntame angelitos negros» de oposición a la inhumana discriminación racial que tomaba auge.
Prefirió’ la apátrida «AD al revés» aliarse y enlodarse hasta los tuétanos con la rancia derecha reaccionaria de Fedecámaras y la embajada norteña; nefasta decisión blindada y refrendada mediante el oprobioso Pacto de Punto Fijo. Con este monstruo del puntofijismo y sus gravísimas consecuencias infames para el país, la izquierda socialista, antifeudal, antiimperialista y democrática de nuestro poeta inmenso no tuvo nada que ver…fue un puntillazo al corazón celestial revolucionario de Andrés Eloy y su pueblo que tanto amó, como igual lo fue para los mártires de la resistencia Leonardo Ruiz Pineda, Alberto Carnevalli, Pinto Salinas y tantos otros que combatieron, hasta morir, la dictadura más sanguinaria padecida por los venezolanos, mientras «los jefes» combatían disfrutando en New York…
Otro Si : «De la CVG me encargo yo», sorpresiva pero grata y estupenda noticia dada por el presidente Maduro para que la corporación cumpla lo que dejó de hacer en sus ! 62 años !, es decir, su rol para lo cual se creó como «Rector del desarrollo Integral y armónico de la región Guayana» hacia la Venezuela no petrolera. Con Ciudad Bolívar, presidente, CVG tiene una enorme deuda social e iniciar su Rescate ahora con su oportuna decisión sería el mejor regalo en sus 258 que cumple este domingo 22…»Demorarse es fallar»…afirmaba con visión el presidente Hugo Chávez.
Vainitas en el postre
* Siendo Andrés Eloy presidente de la Asamblea Constituyente (1946), escuchaba a un diputado y dirigente sindical carupanero Augusto Malavé Villalba decir que el colega que le antecedió cometió un «errol», a lo que la chispa siempre encendida del poeta le interrumpió para observarle que «el único errol que se conoce es Errol Flynn», refiriéndose al célebre actor norteamericano, de origen australiano, muy de moda en esa época.
