Se desconocen los términos, alcance, condiciones y monto de la operación de compra venta
El gobierno de Nicolás Maduro negocia a espaldas del país la privatización de SIDOR, vale decir una operación de compra venta con la empresa Jindal Steel & Power (JSP) de la India y, como opción alternativa, un contrato de operación que incluye también a la empresa Ferrominera del Orinoco (FMO), denunció Carlos Ramírez dirigente del movimiento obrero sindical Unidad en la Coincidencia, acompañado de Luis Alfonzo coordinador de Lazos Guayana, plataforma unitaria de la sociedad civil en el estado Bolívar.
«No somos opuestos a la apertura económica, ni participamos de las ideas dogmáticas estatistas, estamos conscientes de la bancarrota financiera del Estado venezolano y, consecuentemente, de la imposibilidad de asumir ahora la inversión millonaria que supone recuperar, adecuar y relanzar a las Industrias Básicas de Guayana, cuya decadencia y paupérrima producción en los últimos 14 años ha ocurrido bajo la responsabilidad del gobierno de Maduro, pero rechazamos categóricamente cualquier negociación que afecte los intereses de la Nación», agregó enfáticamente el declarante.
Ramírez fustigó que «Desde abril del 2022, cuando el presidente de la empresa JSP, Naven Jindal, visitó a SIDOR, acompañado por el ministro del Poder Popular de Industrias y Producción Nacional, hasta la presente fecha, la presencia consuetudinaria de representantes y técnicos de la empresa India en SIDOR es tal que parece indicar la inminencia de un acuerdo; es decir, de un negocio a puertas cerradas, de modo nada transparente que pudiera afectar el interés nacional».
«Ni los altos ejecutivos de SIDOR y Ferrominera Orinoco (FMO), ni los técnicos de estas empresas ni menos aún los trabajadores y la opinión pública, están debidamente informados sobre los términos, alcance, condiciones y monto de la supuesta operación de compra venta ni del eventual contrato de operación a las mencionadas plantas industriales», afirmó tajantemente el técnico siderúrgico.
«Alertamos al país en general y especialmente a los trabajadores del Sector Hierro y Acero, sobre el riesgo inminente que corre el derecho al trabajo, de concretarse esa clandestina negociación entre Maduro y la Jindal Steel & Power, colocando en supremo riesgo el destino de los pasivos laborales que el evasivo Patrono Estado adeuda a los trabajadores», adicionó Ramírez.
«No es una idea alarmista, es una preocupación fundamentada en hechos reales e inobjetables», agregó el acucioso dirigente social de Guayana Luis Alfonzo.
Como qué: «la República está en default con el sistema financiero internacional y el ingreso nacional ha caído abruptamente en el último lustro, que el pago de la nómina de las Empresas Básicas se cancela con el Presupuesto Nacional debido a que todas están en bancarrota como efecto directo de la incompetencia y corrupción generalizada del gobierno».
Igualmente «que el régimen ha definido una política laboral contraria a la Constitución Nacional y la Ley Orgánica del Trabajo, las Trabajadoras y Trabajadores, (LOTTT), como el caso del Memorándum 2792 y el Instructivo ONAPRE y, para colmo, es internacionalmente conocida la «cultura laboral” de la empresa JSP, de corte esclavista».
«En efecto, para Jindal Steel & Power la seguridad social no es un derecho humano, es una ficción y, por ende, los derechos laborales consagrados en la Carta Magna y en la LOTTT, les importa un comino, como igual lo hace el gobierno de Maduro», concluyó Luis Alfonzo en tono polémico e incisivo.