El diputado por Bolívar, Américo De Grazia (Causa R), cree que intentan colar, en un proceso electoral a medias, a escondidas, “a sus propios bacalaos”
Edgardo Agüero S.
El diputado de la Causa R por el estado Bolívar, Américo De Grazia, no está de acuerdo con que las elecciones primarias de la Mesa de la Unidad, pautadas para el próximo 17 de mayo, sean parciales. Exige que todos los candidatos de todos los circuitos nazcan de la voluntad del pueblo y no de las decisiones que tomen los cogollos de los partidos que integran la coalición opositora.
¿La propuesta política de la Causa R de adelantar las elecciones presidenciales en el marco de las parlamentarias, se inscribe dentro del espíritu del acuerdo para la transición promulgado por Antonio Ledezma, María Corina Machado y Leopoldo López?
— Yo creo que vamos exactamente en la misma dirección. Este país no aguanta un gobierno de Maduro hasta el 2019, y nosotros estamos en la obligación de proponer una salida democrática, constitucional, pacífica y electoral. El adelanto de las elecciones es una de ellas, pero pudiéramos estudiar cualquier otra alternativa. La idea es que tengamos una estrategia común en función de un propósito y un objetivo común. La MUD todavía puede dar la cara por los venezolanos y está perfectamente a tiempo de rectificar y ponerse al frente del tsunami que está viviendo Venezuela para surfearlo con éxito. Eso será si acompañamos al pueblo, si nos ponemos a sus espaldas no vamos a tener sintonía y, ojo, los pueblos buscarán otras alternativas distintas. No estoy hablando de la Causa R, que no es otra cosa que un instrumento más, estoy hablando del pueblo llano, la gente siempre va a buscar un camino y una salida. Ahí está la historia. Ojalá y esa salida la podamos construir nosotros desde la MUD. Si no la podemos construir desde la MUD, otros la construirán.
¿Coinciden ustedes con la señora María Corina Machado cuando señala que el CNE impuso la fecha para las elecciones primarias de manera extemporánea y atropellada con el objetivo de cambiar la agenda de movilización nacional y ponerlos a discutir candidaturas para una elección que aún no tiene fecha?
— Totalmente. Todo esto obedece a una estrategia del régimen para jugar a desmovilizar al pueblo venezolano e introducirnos en la agenda electoralista. Eso, lamentablemente, es una realidad. Por eso cuando nosotros afirmábamos hacer unas elecciones primarias incluíamos la lista e incluíamos los circuitos. Es decir, hacerlo de carácter general, de manera que la misma se desarrollara en medio de la protesta y el voto, con el objeto de movilizar, entusiasmar y enganchar al pueblo venezolano con nuestra propia política, y no jugar al estancamiento, a la inercia, ni al electoralismo, y así hacerle el juego al gobierno. Tenemos que desarrollar nuestra propia estrategia, no la estrategia del régimen.
Usted señaló en algún momento que con esta estrategia de no celebrar primarias en todas las circunscripciones la coalición opositora se arriesga a una derrota para estos comicios parlamentarios. ¿En qué basa ese criterio?
— Nosotros tenemos más de cinco años diciendo que somos mayoría en Venezuela. ¿Qué ocurrirá cuando se confronten los dos resultados electorales: el resultado de una elección parcial en algunos circuitos por parte de la MUD, versus el resultado de unas primarias del Psuv en todo el país? Obviamente, bajo esa óptica el Psuv obtendría más votos, toda vez que las primarias de ellos son a nivel nacional, en todo el país, en todos los circuitos, mientras que las nuestras no son en todos los circuitos. Nosotros vamos a obtener 300 o 500 mil votos en total mientras que el Psuv obtendrá un millón de votos. Ya ahí tendríamos una derrota política bajo el brazo, porque cuando se contrasten los números tendríamos que salir a explicarle al país por qué la MUD tiene menos votos. Obviamente, el que explica en política pierde.
¿Algunos sectores rechazan este acuerdo porque se estarían imponiendo las cúpulas conformadas por los mismos políticos de siempre. ¿Cree usted que esto es así? ¿Se estaría imponiendo un acuerdo entre cogollos partidistas en la MUD?
— Lamentablemente nosotros nos hemos visto en la obligación de señalar eso, toda vez que en la MUD el debate se impuso. Por eso no se habla de consenso sino de imposición. La imposición del cogollo para colar en un proceso electoral a medias, a escondidas, asus propios bacalaos. Mira, en Venezuela, en los circuitos, en los municipios, en las regiones, cada quien se conoce y todos saben quién es quién, y por supuesto tendrían la libertad de hacerlo mediante unas primarias con la mayor transparencia posible, dándosele un carácter movilizador a esas primarias y no este de acuerdo de cogollos para satisfacer cúpulas de partidos. Eso, en este momento, aquí y ahora, porque esta no es cualquier circunstancia que estamos viviendo y requiere de una estrategia cónsona con la exigencia que se nos presenta.
¿A qué se debe que la oposición, como fuerza política, no logra capitalizar el momento negativo por el que atraviesa el gobierno?
— Ciertamente el gobierno nacional está atravesando por el mayor deslave político en su historia pero lamentablemente eso no lo está capitalizando la MUD, sencillamente porque no está en sintonía con su pueblo. Problemas generalizados a todo lo largo y ancho del país, por ejemplo, en materia de salud, de productividad, monetarios, de abastecimiento, en materia estudiantil, de conflictividad laboral o salarial, de presos políticos etcétera, pero lamentablemente la MUD está distraída viendo cómo acomoda a sus bacalaos dentro de una plancha para llevarlos a la Asamblea Nacional, o ver qué partido puede aruñar más votos y mayor porcentaje que el otro. No están pensando de cara a una estrategia para derrotar al régimen, lo que están es ocupados en ver cómo cada partido sale mejor posicionado que el otro, sumidos en una contienda electoral parcial conforme a los intereses y conforme a la misma mecánica diseñada por el régimen y no conforme a una estrategia diseñada para derrotar al régimen. Nosotros necesitamos una mayoría parlamentaria a nivel nacional y este camino que escogió la MUD no es el adecuado, no es el indicado, no es el correcto, porque nos coloca a espaldas de los más caros intereses del pueblo venezolano.
Cuando habla de una “crisis de credibilidad”, usted coincide con Eduardo Fernández cuando dice que la abrumadora mayoría de los venezolanos no se siente representado ni por el gobierno ni por la oposición. ¿A qué atribuye este fenómeno?
— Debo darle toda la razón al doctor Fernández. En la medida en que seamos menos asertivos en la política, menos audaces en el planteamiento de nuestra oferta electoral, social y política, en esa misma medida estamos condenados a no tener éxito, lo que es igual a decir fracaso. Por ahí va nuestra reflexión. Nosotros desde la Causa R estamos apostando a que la mesa democrática rectifique por amor de Dios, que entiendan de una buena vez la importancia del momento histórico que estamos viviendo, y que no se puede resolver este problema sino es con más y mejor democracia. No es tapando gallos como vamos a avanzar, sino todo lo contrario. Es exponiendo tus mejores hombres, los mejores hombres y mujeres de AD, que los tiene, los mejores hombres de Copei, de PJ, Voluntad Popular, en fin, no puede seguir siendo negociado desde arriba cuando la estrategia hoy nos indica que tiene que ser exactamente lo contrario. Se están fundamentando en lo que pasó hace cinco años atrás, cuando la realidad no era esta, el deslave político que vivía el gobierno no era este, el estado de la economía, la devaluación, el fracaso estrepitoso del gobierno no era este, el presidente no era el que hoy ocupa Miraflores, el Psuv no vivía la realidad que hoy vive, no existía la fractura que hoy muestra, no existía Marea Socialista en contra del gobierno, ni amplios sectores de su propio partido lo adversaban como hoy ocurre, no existía el descontento popular de hoy cuando más del 84% de venezolanos rechaza al señor Maduro. Eso no era lo que existía hace cinco años, cuando del lado opositor la voz cantante la llevaba Henrique Capriles. Hoy esa no es la realidad que nos ocupa cuando vemos a un Leopoldo López, a María Corina Machado, a Henry Falcón. Hace cinco años no teníamos los presos políticos que hoy tenemos, de la envergadura y de la talla de un alcalde mayor como lo es Antonio Ledezma. ¿A que quiero referirme con esto? A que el escenario cambió, la realidad cambió, no es la misma de hace cinco años, y es en función de esta realidad que debemos diseñar la estrategia. No puedo entender cómo unos políticos tan versados como el resto de partidos que conforman la MUD, no entiendan que la situación política hoy es totalmente distinta.
¿Es por esto que usted dice que la MUD no está en conexión histórica con los venezolanos?
—Los venezolanos andan a años luz de lo que anda la dirigencia política de la Mesa de la Unidad Democrática y, ojo, nosotros formamos parte de la MUD, y por eso nos preocupa y por eso nos duele. Nos duele que los nuestros, en este caso MUD, que es la llamada a liderar este proceso histórico, esté desencajada del momento que hoy se vive. Este es un momento que requiere mayor organización, requiere audacia, desafío, y sobremanera calle, requiere protesta y llamar en el marco de la protesta, no acallando, ni mandando a abandonar la calle. Lo ocurrido en San Cristóbal y lo ocurrido en San Diego, en Carabobo, son los mejores ejemplos que para poder ganar con la abrumadora mayoría con la que ganamos los dos últimos procesos en esas ciudades, obedeció a mezclar, alternar, a compaginar la protesta con el voto.
