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Maxim Ross: El gobierno tiene una errónea política antiinflacionaria

Maxim Ross

«La política actual de aumento de salarios termina aumentando también la inflación, en detrimento del trabajador», asegura el economista Maxim Ross


Enrique Meléndez

A juicio del economista Maxim Ross la situación de los trabajadores, en medio de la celebración de este 1 de mayo, es bastante precaria ya que no han tenido aumentos de sueldos compatibles con la inflación de los dos últimos años. “Los trabajadores venezolanos sufren del mismo mal del resto de la población venezolana, que es el mal de la escasez o del desabastecimiento”, agrega el experto Ross.

¿En qué situación se encuentra este 1 de mayo el trabajador venezolano?

— En los dos últimos años la inflación se ha disparado casi tres veces y los salarios no han aumentado sino en menos de 50%. Quiere decir que los trabajadores hoy en día tienen una remuneración peor que la que tenían hace tres años, porque le ha sido imposible mantener la capacidad de compra, eso por un lado.

Por el otro, los trabajadores venezolanos sufren del mismo mal del resto de la población venezolana que es el mal de la escasez o del desabastecimiento. Esto significa que los trabajadores no consiguen harina, no consiguen leche, no consiguen carne y están expuestos a este problema de la escasez.

Lo más importante, quizás, es que estamos celebrando un 1 de mayo sin una central sindical lo suficientemente poderosa, amplia, representativa, para poder discutir cara a cara con el gobierno y con las empresas privadas sus reivindicaciones sociales. La destrucción de la CTV, seguida de la desaparición de casi todas las centrales sindicales del resto del país, ha hecho que el movimiento laboral venezolano no tenga capacidad de reacción frente a las políticas del gobierno y de la empresa privada.

[quote_right]»El Fonden fue un fondo de gastos que se utilizó estrictamente para fines políticos»[/quote_right]Hay economistas que consideran que lo más conveniente no es aumentar los salarios en este momento, aun cuando el poder de compra del trabajador se ha disminuido. ¿Usted qué piensa?

— No queda más remedio que hacerlo, porque el gobierno tiene una errónea política antiinflacionaria, no ha logrado resolver el problema de la inflación; tampoco ha logrado resolver el problema de la escasez y lo peor todavía es que estamos este año, al igual que el pasado, en una situación de contracción económica que hace que los trabajadores ni siquiera por la vía del empleo puedan obtener mejoras en los salarios.

De manera que la última instancia que queda es la de aumentar los salarios y, por supuesto, se trata de una política reactiva, no se trata de una política proactiva, como tampoco sana, porque en la medida en que se aumenten los salarios sin que haya crecimiento de la economía, sin que haya crecimiento en la productividad, los salarios terminan aumentando la inflación y generando un círculo perverso inflación-salario, que siempre se va a perjudicar al trabajador, porque nunca se va a poder aumentar el salario mínimo al mismo nivel de la inflación.

¿Usted cree que el gobierno tomará las medidas adecuadas, habida cuenta de los alarmantes niveles de escasez a que se ha llegado, consecuencia de la política de los controles, o seguirá enfrentado a una supuesta guerra económica?

— Yo creo que el gobierno no está enfrentado a ninguna guerra económica. La tesis de la guerra económica es una propaganda política, porque usted no puede culpar a la empresa privada de ser causa de la inflación, del desempleo, de la escasez, cuando el gran problema de estos desajustes provienen de políticas públicas.

¿Cuáles políticas públicas? Por un lado, la incapacidad que tuvo el anterior y este actual gobierno de generar un ahorro lo suficientemente grande para amortiguar el impacto de la caída de los precios del petróleo, que es la razón por la cual el país tiene la escasez de divisas que afronta y, luego, si el gobierno no es capaz de generar políticas públicas de crecimiento económico, estamos en la misma situación que hemos tenido en los últimos años.

[quote_center]»Todo el dinero que el gobierno recibe es para pagar la deuda externa»[/quote_center]

¿Eso le da la razón a quienes dicen que los fondos, como el Fonden, no son fondos de ahorro, sino de gastos?

— Absolutamente. El Fonden fue un fondo de gastos que se utilizó estrictamente para fines políticos, sobre todo en las elecciones de 2012 y 2013, al punto que en este momento la sociedad venezolana no conoce los destinos ni conoce los recursos que allí se aplicaron.

Un fondo de ahorro es una cosa muy distinta, como lo han creado otros países petroleros. El ejemplo más significativo en el mundo es el caso de Noruega… Pero es que si se hace un inventario de todos los países petroleros, tú encuentras que todos tienen fondos de ahorro que permiten ser utilizados cuando llega la época de las vacas flacas, cuando llega la caída de los precios del petróleo.

¿Qué es lo que ha pasado en Venezuela? Que el anterior y el actual gobierno despilfarraron todos los dólares que le entraron a la economía, principalmente para fines electorales. El país se quedó sin dinero, sin dólares, y esa es la razón principal por la cual tenemos escasez en Venezuela.

Por otro lado, si usted tiene una política de precios, de fiscalización, de acoso a la empresa privada que es la que produce; bueno, tiene el peor de los mundos: menos producción, más dinero en la calle, más liquidez, más bolívares y tenemos el fenómeno inflacionario y el fenómeno de la escasez.

Este año tenemos la misma situación que confrontamos el año pasado con respecto a los compromisos de honrar la deuda pública. ¿Usted cree que este año el gobierno va a preferir de nuevo asumir un default comercial, antes que financiero, como se dijo el año pasado?

— El servicio de la deuda va a estar en el orden de los 12 mil millones de dólares, de los cuales ya se canceló en marzo un bono importante de 700 millones de dólares, creo. Se pagaron unos intereses, y ahora vienen unos vencimientos en el resto del año, pero, claro, lo que sucede es que, dada la escasez de divisas, no se hizo el ahorro suficiente para los momentos malos. Todo el dinero que el gobierno recibe es para pagar la deuda externa.

Por consecuencia, no se cancela la deuda comercial. Ese término de default comercial a mí no me convence mucho, pero vamos a aceptarlo. Hay default con los viajeros, hay un default con las remesas al exterior, con los pensionados, con las empresas. Pdvsa no le cancela a sus trabajadores, de modo que lo que está sucediendo es que esa escasez de divisas la está pagando la economía venezolana, la está pagando la empresa venezolana y la está pagando la población venezolana.

[quote_left]»Despilfarraron todos los dólares que le entraron a la economía, principalmente para fines electorales[/quote_left]Se estima que el recorte que se ha aplicado a los dólares de los viajeros y al cupo electrónico permitirá tener un ahorro de unos 2,7 millardos de dólares; no obstante, esto se traducirá en un enorme costo político para el gobierno. ¿Está usted de acuerdo?

— Yo creo que sí, pero, primero déjame aclararte que yo no estoy de acuerdo con eso de un ahorro de 2 mil 800 millones de dólares. El monto total utilizado el año pasado y el año antepasado para viajeros, tarjetas de crédito, efectivo, no superó los 4 o 5 mil millones de dólares. Entonces, pensar que se van a ahorrar casi 3 mil millones de dólares, sobre un monto de 4 mil millones, yo creo que no tiene ningún sentido. El ahorro va a ser mucho menor.

No sé si tiene un costo político elevado, porque se trata de una medida claramente dirigida a la clase media, sobre todo a la clase media alta, que es la que más vuela hacia los EEUU, teniendo presente que es el país que tiene mayor cercanía con Venezuela. Entonces, es más bien una intención política contra los venezolanos que viajan hacia los EEUU, y no creo que eso le genere al gobierno un altísimo costo político, porque esa es una gente que no es afecta al gobierno.

Probablemente, lo que puede pasar también es que las personas que eran afectas al gobierno, que estaban mirando hacia EEUU con una buena suma, incluidos aquellos que utilizan la tarjeta para fines nada sanos, como los raspacupos, y ese tipo de cosas, se van a ver perjudicados con el efecto que se está logrando.

De modo que sí, no es mucho ahorro, y sí tiene un costo político, lo cual me parece esta una medida inapropiada, tomada por el gobierno.

[quote_center]»La política actual de aumento de salarios termina aumentando también la inflación, en detrimento del trabajador»[/quote_center]

¿En qué consiste la ingeniería financiera, por medio de la cual empeñó o está por empeñar una cierta cantidad de oro al Citibank?

— Una ingeniería financiera es cualquier operación que se le ocurra a una persona o un gobierno. En este caso hay varias maneras de interpretar esto, en el sentido de que el oro puede ser puesto en garantía, algo que ya Venezuela hizo en la década de 1990 cuando se presentó el problema de la deuda, y se hizo la conversión de la misma de corto a largo plazo. Se hizo la operación de garantía con oro, lo cual permitió la emisión de aquella famosa operación conocida como la de los bonos Brady, que constituyó una operación acordada con el Tesoro de EEUU.

Puede ser puesta como garantía el oro en el Citibank y ese banco con esa garantía le prestaría a Venezuela una cantidad. Hay varias maneras de hacerlo.

La otra es vender el oro sencilla y llanamente. Ofrecer en venta el oro y captar ese dinero en efectivo. Quizás eso no se hace, porque comporta una connotación política, psicológica, el hecho de vender el oro y, claro, lo más sensato es ingresar esa cantidad dinero que hay allí en oro como préstamo.

Tercero, puede ser utilizado como eso que llaman “swap”: yo te envío oro a tu sede en Washington y en contrapartida recibes un monto de préstamo equivalente, que se deposita en una cuenta. Son varias las maneras, pero lo importante de la ingeniería financiera es que no es otra, sino que el gobierno no tiene el dinero suficiente para mantener la economía venezolana funcionando correcta y apropiadamente.


¿Dónde está el dinero?

 ¿Algunos personeros están “raspando la olla”?

— Sí, raspar la olla es acabar con todos los recursos del BCV. Usted ve que las reservas internacionales de Venezuela no han crecido en los últimos cinco o seis años, a pesar de que los recursos petroleros fueron inmensos, una cantidad equivalente a los 90 mil millones de dólares. No incrementamos reservas internacionales, porque los recursos fueron al Fonden; el Fonden los gastó, los convirtió en bolívares. Nadie conoce donde fueron aplicados los fondos y, por consecuencia, nos encontramos en la situación que padecemos hoy.