Esto no se aguanta de lo bueno que está, se quejó el plumario de “Últimas Ficticias”, periódico gobiernero y chupamedias
O.E.
Hierve la sala de redacción de “Últimas Ficticias”. El diario del cuento, la fabulación, del ofrecimiento engañoso, del que se sabe, de antemano, que jamás se concretará.
— ¡Esto no se aguanta de lo bueno que está! –el que el habla es el plumario mayor, al que no se le agua el ojo para informar que la delincuencia ha disminuido, que el Güaire ya ha sido saneado, que los anaqueles están rebosantes de productos, que la Fiscalía y la Contraloría General de la República van a tener que cerrar, porque la única escasez que existe, en la bolivariana, es la de corruptos.
— Si las cosas son así, creo que ha llegado el momento de recibir mi ansiado ascenso, ¡pa’ gozá –se acercó al sabor, el Jefe de Embustes a Domicilio del rotativo.
El redactor del Departamento de Calumnias Rojas Rojitas, no quiso quedarse atrás:
— ¡Por mi parte, me conformo con unos dolarillos del Simadi I, Simadi II, porque no solo de palangre vive el hombre.
Pero fiesta sin aguafiestas, no es fiesta. Tanto jolgorio, tanta celebración, tanta autobomba, para comprobar el verdadero motivo del aumento de ejemplares “vendidos” del rotativo.
— Damas y caballeros –terció el gerente de tráfico (de influencias)- nuestra circulación no ha aumentado gracias a el ingenio de sus redactores, ni al fervor o la fidelidad de marca de nuestra lectoría, ni a las cobas por centímetro. La demanda por “Últimas Ficiticias” es a causa de la escasez de papel toalé. ¿Quién va a pelar ese boche de limpiarse el güirinei con un periódico, casi regalado, mentiroso compulsivo y que les brinda a los cada vez más numeroso contrarrevolucionarios comprobar que la venganza es dulce?
— ¡Eso es traición, saboteo, guerra económica, vilipendio! –protestó el más obsecuente- ¡Con seguridad se trata de un complot de Uribe, de la CIA, del Negro Obama, del Mossad! ¿Cómo podremos chupar medias, tranquilos, sin nervios, como manda la “Revolución”, si cada vez que coloquemos en primera plana los rostros de Nicolás, Diosdado, del Comandante Eterno y hasta de la Primera Combatienta, nos podrán acusar que lo hemos hecho con segundas o terceras intenciones, vale decir, para que los usen como papel toalé?
Total, que hasta a los editores jalabolas se le está poniendo difícil.
