Se investiga si la desgracia pudo ocurrir por transportar gasolina de contrabando dentro del transporte escolar
Un terrible accidente dejó 32 niños muertos que quedaron atrapados en un autobús que explotó en el departamento de Magdalena, una localidad a 700 km al norte de Bogotá.
Según destacan los medios locales, los niños acababan de salir de una iglesia evangélica que se encontraba en el centro de la localidad y a la que asistían los domingos. El transporte se dirigía a las casas de los niños pero a pocas cuadras de la comunidad religiosa el bus explotó en llamas sin posibilidad de recibir ningún tipo de ayuda.
Se desconocen la causas del incendio. Una de las hipótesis que manejan las autoridades es que se produjo un corto circuito en el vehículo y se especula que el conductor llevaba recipientes de gasolina. Práctica común en esta zona de Colombia donde se comercializa combustible de contrabando en envases de plástico.
El conductor, que no poseía licencia de conducir, huyó del lugar, pero fue capturado cinco horas luego de la tragedia.
Al menos 17 niños fueron atendidos de emergencia en centros de salud cercanos al lugar del accidente, pero debido a la complejidad de las quemaduras se trasladaron a clínicas para poder tratar los casos.
Los cuerpos de los 32 niños fueron trasladados a Barranquilla, para comenzar el proceso de identificación, que tardaría por lo menos 4 días.
El gobierno colombiano anunció hacerse cargo de todos los gastos fúnebres y con la recuperación de los niños hospitalizados.