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El gobierno cubano, que presiden Miguel Díaz Canel y Raúl Castro Ruz, emitió un comunicado asegurando que no tiene relación alguna con el caso del capo de los negocios de los alimentos subsidiados y del oro, Álex Saab.
El pronunciamiento de la Habana responde a una información que se divulgó en Cabo Verde y que da cuenta de una supuesta intención de Cuba, Rusia, Irán y otros países afines a Venezuela de ejercer presión para frenar el envío del magnate colombiano a Estados Unidos, en donde es requerido por dos cortes federales bajo cargos de lavado y corrupción ligados al régimen de Nicolás Maduro.
“Cuba negó cualquier tipo de involucramiento”, reportó el canal caboverdiano RTC al hacer referirse al comunicado diplomático.
De esa manera, La Habana toma distancia del caso que involucra a su aliado, Nicolás Maduro, quien ha brindado todas las medidas política y diplomáticas para preoteger a Saab y regresarlo a Venezuela, alegando que es «un diplomático en funciones», mientras Estados Unidos alega que se trata del testaferro de Maduro, de su esposa Cilia Flores y de los hijos de ambos.
En otro orden de ideas, se conoció que el Buró Federal de Investigaciones (FBI por sus siglas en inglés) le sigue la pista a la modelo Camila Fabbri, pareja del magnaate, quien estaría en Venezuela bajo la protección del régimen madurista.
