Que 3.500.000 profesionales universitarios, que están contra Maduro y su narcotiranía comunista, no hayan asumido el liderazgo del país en estos años ha sido el mayor desperdicio de recursos humanos de nuestra historia.
Jesús Antonio Petit Da Costa
Que este enorme desperdicio de recursos humanos continúe porque ellos no se han decidido a dar este paso transcendental para su futuro, para el de su familia y, desde luego, para Venezuela, es inexplicable.
Por ello yo he convocado a estos 3.500.000 profesionales universitarios a que asuman el liderazgo del país, comenzando por su familia organizándola como su partido.
He explicado cómo hacerlo: constituir a la familia nuclear (padres-hijos) como célula familiar, a la cual sumarle las células de la familia consanguínea (abuelos, nietos, hermanos, sobrinos, tíos, primos) y de la familia por afinidad (suegros, cuñados, etc.) formando la red familiar, enlazándose luego con otras redes familares de compadres y amigos. Al hacerlo los profesionales universitarios se convertirán en una fuerza político-social que será influyente para derrocar a Maduro y su narcotiranía comunista y luego para determinar el sistema político-económico-social que lo sucederá, impidiendo que sean los politiqueros de siempre que han hecho de la política un negocio para su lucro personal.
Si los 3.500.000 profesionales universitario se convierten así en fuerza político-social determinante, no continuarán Maduro y su narcotiranía comunista, ni habrá regreso al pasado ni prolongación del negociado politiquero de estos veinte años. Sucederá que Venezuela se incorporará a la modernidad, la cual se llama: sociedad post-industrial o sociedad del conocimiento, la que se define así: “es la sociedad en la cual la creación, difusión y utilización de la información y del conocimiento son el factor más importante de la producción. En una sociedad así, la tierra, volumen de trabajo y capital físico o financiero no son tan importantes como los activos de conocimiento; es decir, el capital intelectual.”
Ingresar a esta sociedad, cuyo único impedimento es Maduro y su narcotiranía comunista, significará: 1) Que el profesional universitario pasará a ser, por sus conocimientos, el centro de la producción nacional, en la empresa o como autónomo o emprendedor; 2) Que el profesional universitario tendrá la mayor oportunidad de riqueza con su inventiva, como lo prueba que, a pesar de la parálisis económica mundial por la pandemia, los dueños de las tecnológicas se han enriquecido a la enésima potencia. 3) Que, en consecuencia, los profesionales universitarios serán la clase dirigente del país, como es lógico en la sociedad del conocimiento. Y como tal clase dirigente podrán enrumbar a Venezuela a la prosperidad y a su pueblo al bienestar.
Profesional universitario: esta debe ser tu meta política.
petitdacosta@gmail.com 25-08-20