El 20 de enero de 2021, salvo milagro judicial, será el demócrata Joe Biden quien asuma la presidencia de EEUU
Jesús Silva R.
Especialmente desde finales de 2018 y bajo la influencia del partido Voluntad Popular (Leopoldo López), el gobierno estadounidense decidió revocar masivamente la “visa americana” a “chavistas” tanto los que fueran funcionarios públicos como aquellos que no lo fueran pero que tuviesen “nexos” con el “régimen” de Nicolás Maduro.
El Presidente Donald Trump le compró la mentira a la derecha radical venezolana leopoldera: la masiva revocatoria de las visas gringas iba a desmoralizar a miles de chavistas y esas masas se sumarían a la fanaticada de Juan Guaidó, a quien ya lo estaban preparando para autoproclamarse Presidente interino de Venezuela en el inicio de 2019.
El plan que le vendieron al imperio yanqui fracasó, ni los chavistas con visas revocadas brincaron la talanquera para convertirse en opositores, ni Guaidó logró apoyo de la FANB ni estallido social para sustituir a Maduro en la presidencia efectiva del país.
Lo que sí ocurrió fue que Guaidó se desgastó políticamente como una caricatura de Twitter, un político virtual de las redes sociales, y decenas de grupos opositores lo fueron abandonando, inclusive repudiando. Sobre todo al verlo recibir millones de dólares de Washington para supuestamente luchar por la libertad de la República Bolivariana.
Es un acto de discriminación masiva que no puede ser encubierto con el pretexto de que eran corruptos».
Otros millones de billetes verdes también le cayeron del robo de Citgo y Monomeros. Ni un centavo de lo percibido lo compartió con sus compañeros opositores y eso generó rencores insalvables, tan grandes que muchos prefirieron “pactar” con el gobierno de Maduro y facilitar la intervención judicial de varios partidos de la derecha para tener elecciones parlamentarias bien bonitas como las previstas el 06-12-20.
Tristemente EEUU, una de las cunas del derecho constitucional en el mundo académico, quedó mal visto, porque revocar visas a personas por su ideología se parece mucho al Apartheid de Sudáfrica. Es un acto de discriminación masiva que no puede ser encubierto con el pretexto de que eran corruptos pues esos chavistas no eran funcionarios públicos manejando dinero del Estado, ni cabe la mentira de “violadores de derechos humanos” pues los afectados no eran policías ni militares.
Se violó la Declaración Universal de Derechos Humanos y la propiedad Constitución de EEUU con semejante agresión.
La sabiduría popular dice que cuando buscas apoyo de la gente por la vía del maltrato y la intimidación, más bien te ganas el repudio. Así pasó con la política “trumpista leopoldera” de masiva revocación de visa americana a chavistas, les salió el tiro por la culata.
La intolerante política exterior de Trump hacia Venezuela fue una de las razones que lo convirtió en un #one-term president”.
Tan distinto que fue Obama, que más bien promovía con su embajada en Caracas que los chavistas sacáramos la codiciada estampa del águila en nuestros bolivarianos pasaportes. Que fuésemos a ver a Micky Mouse y al “ta barato” en los mayamis para así ganar simpatía o por lo menos tolerancia y ánimo de diálogo entre EEUU y Venezuela.
Incluso al difamado abogado chavista madurista lo galardonaron con diploma y viaje a Washington para ver la toma de posesión de Trump, vale decir, una premiación académica por ser doctor en derecho constitucional y hablar perfecto inglés. Nunca por cambiar de bando, pues quien suscribe sigue siendo socialista.
Ocurre que la intolerante política exterior de Trump hacia Venezuela fue una de las razones que lo convirtió en un #one-term president”, o sea, un presidente de un sólo mandato; ya que el 20 de enero de 2021, salvo milagro judicial, será el demócrata Joe Biden quien asuma la presidencia de EEUU. Entonces cabe preguntarse: is Biden gonna give visas back to chavistas? (¿le devolverá Biden las visas a los chavistas?)
jesusmanuelsilva.blogspot.com
@Jesus_Silva_R
(1979) Padre. Doctor en Derecho Constitucional. Primer izquierdista elegido IVLP por USA en 2017. Abogado penalista. Profesor UCV (TSJ SC Expediente 15-1131). English teacher. Autos del libro «Memorias Políticas», UNESR 2013.