Señalan que el sistema de salud ha sido destruido por el gobierno de Maduro
Enrique Meléndez
Omar González Moreno, dirigente nacional del partido político Vente Venezuela, asegura que Nicolás Maduro decreta la cuarentena radical en el país solo cuando le resulta conveniente para sus propios intereses.
Explica que cuando Maduro necesitaba hacer campaña electoral para la “farsa electoral” del 6 de diciembre, y aprovechando los días de Navidad, decretó plena movilización de los ciudadanos para distraer la atención.
“De acuerdo con la tesis del régimen el coronavirus cesó en diciembre y se reanudó en enero. Estas son simplemente las actuaciones de un régimen que le tiene sin cuidado la vida de los venezolanos y sus decisiones solo están movidas por sus intereses políticos”, afirma.
Añade que mientras la usurpación pretende desmovilizar política y socialmente a los venezolanos con los llamados a cuarentena, por el otro lado, permite actos masivos como el protagonizado por el alcalde de Guanta en Anzoátegui, Marcelo Galvis.
“Hablan de salud y de la lucha contra el Covid-19, y voltean la cara hacia otro lado, cuando uno de ellos protagoniza un espectáculo tan irresponsable como el llamado grito de Carnaval, donde se promovió la salida a la calle de miles de personas sin ninguna medida de bioseguridad. Así de hipócritas son”, explica.
González indica que la política de la cuarentena –como método para evitar la cadena de contagio del Covid-19– se ha transformado en una herramienta para desmovilizar y desarticular la lucha de millones de venezolanos que se oponen a Maduro y a su sistema de gobierno.
“Quienes queremos libertad para Venezuela, debemos entender cómo actúa y qué métodos emplea la usurpación. Es hora de dejar atrás las posiciones timoratas y asumir con responsabilidad y sobre todo seriedad la lucha por la liberación nacional y esto pasa con rectificar el camino y aplicar nuevas tácticas de acción política”.
González Moreno califica de indolencia “roja” el hecho del número de fallecidos por el coronavirus en la nación, y, en este sentido, denuncia que los índices fatales son responsabilidad de Nicolás Maduro y su pésima gestión en salud pública antes y durante la pandemia.
Se pregunta: “¿Por qué hay muertos? Fácil, porque nuestro sistema de salud estaba, y sigue estando, totalmente destruido; porque Maduro no se ocupó en invertir en mejorar y dotar de equipos de bioseguridad a los hospitales, porque no ha existido una política coherente más allá de falsas promesas y caprichosos decretos de aislamiento social”.
Precisa que los 300 trabajadores de la salud infectados por Covid-19 y fallecidos son producto de la indolencia de Miraflores que “nunca dotó adecuadamente de implementos de seguridad a los médicos, enfermeras y demás trabajadores de la salud venezolanos”.
Denuncia que para Maduro fue más importante comprar armas rusas y proteger a los médicos cubanos que a los profesionales de la salud, que sí lucharon –y siguen luchando– en la primera línea en los hospitales centinelas para salvarle la vida a miles de connacionales.
“Así medimos qué tanto le importan los venezolanos al régimen”, recalca.