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Lo conveniente es que el ente comicial reclame su autonomía; que cumpla con lo que tiene establecido la Constitución Bolivariana. De lo contrario, la abstención seguirá siendo la que siga imperando en Venezuela
Félix B. Sucre
CNP 8526
La democracia venezolana está metida en una encrucijada. De ella es responsabilidad la dirigencia en general, por lo que no se debe partir de la premisa de que los llamados radicales son los que deben responder por tal situación.
En verdad, para ser más claro, el oficialismo ha sido el que mucho tiene que ver, ya que ha ejercido control de la Asamblea Nacional, parlamento que ha legislado para favorecer a Miraflores, desde Hugo Chávez hasta Nicolás Maduro, quienes le restaron independencia a esos poderes, siendo el TSJ quien arrodilló al Consejo Nacional Electoral (CNE).
Decir lo contrario es negar la realidad. Por eso el CNE ha sido una oficina electoral del MVR y luego el PSUV; razón por la que hoy día no es un organismo de confianza para la gente, quienes se han dado cuenta de que todas las decisiones que han tomado han sido para favorecer al chavismo.
En este caso, hemos visto como se han lanzado contra la propia Constitución y las leyes; por ejemplo, inhabilitar a dirigentes sin un debido proceso, pero la Contraloría General ha actuado así, sin que haya existido una sentencia firme contra el acusado. Los rectores del CNE han acatado tales acciones, con lo que sumisamente acatan tales decisiones.
El otro caso es la acción de la Sala Constitucional, de la que han salido acciones contra organizaciones partidistas por mandato de Miraflores. Todo eso ha despertado rechazo por parte de los electores. No obstante, ahora que la actual AN eligió a los nuevos rectores, estos, si desean que las cosas cambien, tienen que reclamar su autonomía y cumplir lo que señala la Constitución Bolivariana al respecto. No se le pide más nada.
El CNE debe ser un árbitro potable para ser confiable; hacer que sus decisiones sean aceptadas por la dirigencia oficialista; también deben legalizar a las organizaciones partidistas que han cumplido con las normas y que puedan participar en cualquier proceso electoral en condiciones iguales a los partidos del llamado polo patriótico o los de la mesa de Casa Amarilla.
Si los rectores nuevos no asoman una acción que genere un mínimo de confianza, la democracia seguirá por el despeñadero, como pareciera ser lo que quiere Nicolás Maduro, el PSUV y el Alto Mando militar, sector que tiene mucho que ver con todo este proceso político.
Finalmente, debemos señalar que la abstención también tiene mucho que ver con las acciones y decisiones del ente comicial y los dirigentes políticos, razón por la cual lo conveniente es que el ente comicial reclame su autonomía; que cumpla con lo que tiene establecido la Constitución Bolivariana. De lo contrario, la abstención seguirá siendo la que siga imperando en Venezuela.
LA PERLA, LA CUANÁBANA EXCLUYE. En el municipio Libertador la dirigencia política opositora está conociendo el comportamiento de los dirigentes de AD, Menfri París; de Copei, José Castillo; de Soluciones, Jorge Torres; y, del MAS, Felipe González.
Desde hace semanas la plataforma democrática de Libertador se ha venido reuniendo con todos los factores políticos, incluyendo a los que no tienen tarjetas, pero ahora ha cambiado la situación, lo que pones en peligro la unidad. De esa conducta antiunitaria han sacado a la representante de Avanzada Progresista, Maribel Castillo, la que ha sido una dirigente comprometida con la unidad, mientras que otros hacen lo contrario.
EL IPCN RECLAMA. En conversación con el dirigente político José Ramón Zacarías, secretario general del movimiento Independientes por la Comunidad Nacional, pudimos conocer que tiene desde 2019 esperando que el ente comicial los autorice a participar en las elecciones, sin embargo, no ha sido posible que los escuchen.
“Hoy hablo también en nombre de otras organizaciones políticas que están en la misma situación que nosotros, sin que para ellos haya habido una explicación de parte de los rectores del CNE», expresó el dirigente. Para agregar que espera que los nuevos rectores no hagan lo mismo que los anteriores, sino que las organizaciones que están en la misma situación, sean liberados y que puedan participar en las próximas elecciones con sus propias tarjetas.
