Rafael Olivares Russián (a) Rafaelito es propietario del Grupo La Marea y los restaurantes White, uno de ellos funcionando en el viejo aeropuerto de La Carlota también conocido como Base Miranda, porque el Precursor sirve para todo.
Domingo Alberto Rangel
A destiempo, porque no ha llegado el Carnaval, la jauría de los hipócritas consiguió donde morder para lavarse sus propios pecados antes de la Cuaresma y llama la atención que gente tan corrida se “asombre” ante un hecho que es cotidiano en esta Venezuela.
Hecho que explica el cómo nuestro país ha dilapidado en varias ocasiones recursos que en otros lares sirvieron para levantar continentes enteros después de la guerra más sangrienta que conoce la humanidad.
A pesar de lo enojoso que resulta enterarse de los pormenores asociados al cumpleaños celebrado en el tepuy Kusari… no les haré coro a los cretinos e insinceros que reclaman a manera de indicio “el haber profanado las tierras de los hermanos pemones”… cuando no recuerdan fingidores que los tepuyes… los abandonados desde siempre tepuyes… son “Patrimonio Mundial Natural”… como si el mundo estuviera pendiente de las andanzas de una trulla de cabrones por las tierras de Guayana.
O cómo si esos twitteros quejones anduviesen en taparrabos o tuvieran que preparar la comida en medio de una nube de jejenes que más que dioses y demonios… habitan esos promontorios.
Sin embargo, aparte de condenar el hecho y pedir inútilmente cana para los organizadores y participantes, cabe hacer hincapié en que ese tipo de villanías no es nuevo Venezuela donde cada camada de nuevos enchufados… hace alarde de su capacidad de irresponsabilidad.
Por lo cual creo inútil exigir cárcel para esta chusma… porque, aparte que ser idiotas está en los genes de ciertas “élites”… es probable que los bicharracos (as) ya estén en Miami… o que pasado un tiempo “prudencial” no encuentren motivos para detenerlos… pero igual escribo.
Lo que si causa asombro viendo las fotos es la presencia de tanto vejestorio que pretende seguir en una adolescencia eterna… y que “sumadas sus edades tienen más años que el tepuy”… como me comentó burlona una alumna mía, adolescente, que no tiene esperanzas pero que si pudiera matarlos… lo haría.
Pero hay más porque la genealogía de esta plaga… y sobre todo sus acompañantes… revela cómo se ha avanzado en materia de descomposición moral durante estos años de revolución.
El cumpleañero me dicen que es hijo o nieto de Clodosvaldo Russian quien fue hasta su muerte Contralor General del chavismo.
Debo aclarar que Clodosvaldo fue un hombre decente… que conocía el oficio y que décadas antes… a comienzos del puntofijismo estando perseguido y acosado económicamente… pasó su luna de miel en nuestra casa familiar de Las Mercedes… que aún no habitábamos… y ese fue el regalo que DAR… mi padre le pudo dar.
Pero el hijo o nieto… propietario del Grupo La Marea y los restaurantes White… uno de ellos funcionando en el viejo aeropuerto de La Carlota también conocido como Base Miranda porque el Precursor sirve para todo… es otra cosa.
El punto no es siquiera el supuesto “daño” que este señor, Rafael Olivares Russián (a) Rafaelito, le hicieran al tepuy… o la cursilería de una élite corrupta… barrigona y pasada de kilos en un país donde muchos venezolanos no consiguen que llevar a la mesa de su familia… sino que esos nuevos enchufadillos… con quienes el gobierno pretende equilibrar la maltrecha economía: son peores que cualquier apostolado ladrón de pasados gobiernos.
Llevo tiempo señalando la falta de una aristocracia criolla capaz de empinarse y hablar fuerte ante los abusos del poder… y esta fiesta con cabrón de coturno como Osmel Souza… es uno.
Pongo el ejemplo de alguien que nació rica como (a) Titina Penzini… que con sus valiosos micros señalando una de las pocas fortalezas que nos queda tras casi 100 años bebiendo escocés… viajando como turistas en vez de ser migrantes como fueron todos los pueblos de esta Hispanoamérica… y me refiero a la sifrinerìa que al ser un valor bien se puede explotar… antes de dejar de ser simple oligarca para pasar al Olimpo de la aristocracia… prefirió ser chusma junto al mayor prostituyente de la juventud venezolana.
Y ese es el punto: un país hundido y no importa que tanto por el socialismo o las sanciones… que necesita volver a alzarse pero con valores duraderos… no lo hará jamás si los presuntos “inversores” son estos pillos que de la mano de vejestorios ignorantes e inmorales en varios idiomas… se saltan las leyes a sabiendas que no serán procesados.
Cuando el Poder Judicial yanqui funcionaba en la mayoría de los casos… a estos pillos un juez decente les habría aumentado las condenas… para dar ejemplo hacia el futuro.
¿Habrá un Fiscal o juez que se atreva?
@DomingoAlbertoR