Los derrotaremos eligiendo a María Corina Machado como la candidata-jefe de la oposición.
Jesús Antonio Petit Da Costa
1.- El próximo domingo 22 se efectuará la elección primaria en la cual será electo el candidato presidencial de la oposición. Es el objeto explícito según la convocatoria.
Pero en realidad las circunstancias harán a la postre que sea la elección del jefe de la oposición que asumirá como tal el encargo de dirigir el contragolpe constitucional, ordenado por la Constitución (Artículo 250/1961 y 333/1999) contra el Golpe de Estado de Maduro en virtud del cual usurpa la Presidencia de la República y somete a su voluntad a todos los poderes públicos ejerciendo su narco-tiranía sobre el pueblo venezolano.
El primer paso del contragolpe constitucional será el cese de la usurpación que consiste en la salida de Maduro del cargo que usurpa.
2.- La preparación del contragolpe constitucional comenzó con una operación de engaño y sorpresa para confundir al enemigo.
El engaño consistió en hacerles creer a Maduro y sus socios colaboracionistas que los llamados radicales seguiríamos absteniéndonos en la elección presidencial. Los colaboracionistas habían pervertido a la abstención, a la cual se sumaban para luego negociarla con Maduro. Cobraban a cambio de que la abstención fuera pasiva, nunca militante como primer paso para la insurrección.
3.- Confiados Maduro y sus socios colaboracionistas pactaron repetir el teatro que habían practicado con éxito cuando no había abstención, montando la elección presidencial como un carnaval electoral participando los colaboracionistas como la comparsa que le daba imagen de competencia, a cambio de la recompensa cuantiosa que les ha servido para vivir como viven a todo lujo disfrutando además de gobernaciones y alcaldías. Esta vez el teatro electorero estaría pagado con los 3.500 millones de dólares retenidos por Estados Unidos que ellos convinieron de mutuo acuerdo en pedirlos para atender la crisis humanitaria, que así llaman a sus bolsillos.
La sorpresa fue que, abierta la competencia para la candidatura presidencial, se inscribió María Corina, con el apoyo de Ledezma, y también Andrés Velásquez. Esta sorpresa dada por los opositores auténticos trastornó los planes de Maduro y los colaboracionistas, que ahora se ven en peligro de ser derrotados y barridos por el contragolpe constitucional. Ha sido una sorpresa semejante a la que dio Páez a los realistas en la batalla de Vuelvan Caras en la cual simuló huir y logrado el engaño le gritó a sus lanceros: “devuélvanse, carajos, y carguen contra el enemigo.”
3.- La participación de los opositores auténticos ha convertido a la primaria en una batalla contra los colaboracionistas, avanzada de Maduro, derrotados los cuales quedará abierto el camino para enfrentar directa y frontalmente al usurpador y su banda con todo el pueblo en su contra actuando como Ejército Civil.
4.- Convertida la primaria en una competencia era lógico aprovechar la campaña electoral para efectuar la leva o reclutamiento del ejército civil para el contragolpe constitucional. Fue lo que se hizo acertadamente viajando a todo el país.
El objetivo de la campaña electoral está cumplido en mi opinión: movilización general, leva o reclutamiento y organización del Ejército Civil que es el pueblo, y elevación del clima emocional resucitando la fe en la victoria por la confianza en el líder.
5.- El próximo domingo 22 libraremos la primera batalla, que será contra los colaboracionistas que son las bandas con disfraz de oposición que trabajan para Maduro. Los acompañarán los infiltrados. Aún así los derrotaremos eligiendo a María Corina Machado como la candidata-jefe de la oposición.
6.- Al derrotar a los colaboracionistas Maduro quedará sin escudo civil protector. Con esta ventaja que no teníamos hasta ahora, podremos ir con la moral en alto a la batalla final con la cual ejecutaremos el contragolpe constitucional.
A ganar la primaria, primera batalla contra Maduro.