El proceso de recuperación debería ser más rápido que con una operación convencional. El paciente deberá pasar tres meses con un cuello ortopédico
Médicos del hospital de la Universidad de Pekín lograron implantar con éxito una vértebra en la espina dorsal de un adolescente de 12 años que padecía de un tumor maligno.
Los especialistas sustituyeron la vértebra enferma por otra fabricada en polvo de titanio usando una impresora 3D. La operación duró cinco horas, reseña el diario El Nacional.
Esta vértebra impresa tiene poros para que el hueso y el tejido puedan crecer dentro de la vértebra para fijarla en forma natural.
No es la primera vez que se usa una impresora 3D para crear un implante a medida, ya que fueron probadas antes para realizar reemplazos de cráneos y de mandíbulas.