Evo Morales será presidente de Bolvia por cinco años más. Reelecto por tercera vez con más de 60% de los votos, gobernará Bolivia hasta 2020 y aspira a quedarse con dos tercios del Parlamento.
“Esta victoria es un triunfo de los anti imperialistas y anti colonialistas”, dijo Morales a miles de seguidores desde el balcón del palacio presidencial. Se esperaba que el presidente de Bolivia fuera reelecto con un gran margen gracias a las promesas, que hizo durante su campaña, de consolidar las reformas socialistas que han ido aumentando el poder del Estado sobre la explotación de la industria del gas.
Encuestas a boca de urna proclamaban a Evo como ganador de la primera vuelta con más de 60% de los votos. Una victoria aplastante sobre su rival más cercano, Samuel Doria Media, que capitalizó apenas 24%
La prudencia en el gasto público boliviano, pese a la bonanza del gas, y la inversión en programas de bienestar, en infraestructura y en la construcción de escuelas fueron claves. El pueblo boliviano, que ha pasado por muchos períodos de inestabilidad política, dio su apoyo al dirigente de 54 años.
Los resultados electorales dan a Morales la fortaleza para continuar con su propuesta de socialismo indígena, bajo el que ha nacionalizado industrias clave como la del petróleo y el gas para financiar programas de bienestar e invertir en nuevas carreteras y escuelas. Su abrumadora victoria sepulta la esperanza de los votantes de oposición de cambiar de gobierno y aumenta las divisiones entre los grupos que le adversan, explica el medio británico The Guardian.
Durante la administración de Evo, el número de bolivianos viviendo en la pobreza extrema ha disminuido a cada una de cinco personas, es decir, más de un tercio de la población en 2006. Sin embargo, Bolivia sigue siendo uno de los países más pobres de América.
Pese a su popularidad ya Morales ha dicho que no repetirá un mandato más, por lo que no se lanzará a las elecciones de 2019.
En total unos seis millones de bolivianos estaban convocados a las urnas en las elecciones generales del domingo para elegir presidente y renovar la Asamblea Plurinacional (el Parlamento), conformada por 36 senadores y 130 diputados nacionales.
Además de Doria Medina, a Morales se le enfrentaban el exmandatario Jorge «Tuto» Quiroga (2001-2002), el ex alcalde de La Paz Juan del Granado y el líder indígena amazónico Fernando Vargas.
Durante la jornada, los observadores de la Organización de Estados Americanos (OEA), encabezada por el ex presidente de Guatemala, Álvaro Colom, informaron que el proceso se desarrolló con normalidad.
Una de las sorpresas de la noche, de confirmarse los sondeos a boca de urna, es que Evo Morales fue el candidato más votado en una región en la que en elecciones anteriores el presidente ha tenido una fuerte oposición: Santa Cruz. Según esos sondeos, Morales ganó en ocho de las nueve regiones del país -todas menos la amazónica Beni-, según reseña BBC Mundo.
Uno de los primeros en saludarlo ha sido el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro: «Evo Gran Victoria de la Patria Suramericana, desde Venezuela te damos un Abrazo de Felicitaciones¡Sigamos Venciendo!!», escribió en su perfil de la red social Twitter en un mensaje que acompañó con una foto de Morales abrazado al fallecido mandatario venezolano Hugo Chávez.