El asesinato de Kluiverth Roa revela la inhumanidad que poco a poco se apodera de nuestra sociedad
Domingo Alberto Rangel M.
El 24 de febrero, Kluiverth Roa, adolescente de 14 años fue asesinado durante de unas protestas aderezadas con encapuchados, policías, piedras, perdigones, cauchos quemados y evidentemente balas, en las inmediaciones de la Universidad Católica del Táchira. El saldo de ese día incluyó la muerte de Kluiverth y 6 policías heridos, 2 polinacionales y 4 de la gobernación. A mil kilómetros el día siguiente en el municipio Chacao de Caracas otros jóvenes escenificaron el intento de linchamiento de un GNB, como represalia “por la muerte del Táchira”. El señalado como asesino de Kluiverth es un policía nacional, de 23 años de edad quien tiene un hijo de 3. INHUMANIDAD: El sangriento hecho revela la inhumanidad que poco a poco se apodera de nuestra sociedad sin que nadie aparentemente exhiba una solución a corto plazo. El niño, después que inexplicablemente estaba en la zona de refriega, porque la ley no permite menores en este tipo de actividades políticas, huyó de su presunto asesino en medio de un tira y dame entre encapuchados y policías. Intentó entrar a una casa y le cerraron la puerta en las narices, según un diario que cita una testigo del horrendo asesinato. Luego el infortunado Kluiverth recibió un tiro por la espalda y cuando los agresores o sus compañeros, intentaron socorrer al niño, pero según el Director de Seguridad Ciudadana del estado Táchira, eso fue imposible porque los encapuchados lo impidieron lanzando morteros y bombas molotov. MUCHO CIRCO: Entre el momento de la herida mortal y el de la entrada al Hospital Central de San Cristobal se tardó 5 veces el tiempo estimado para ese recorrido. Una vez conocida la noticia es de suponer que los jefes de la polarización han debido lamentar el hecho y ofrecer alguna solución para que tanta inhumanidad no se repita. No lo hicieron y en su defecto seguro que llamaron a los encargados de convocarles la prensa para anunciar una rueda a fin de “protestar por la muerte del niño”. Los jefes de la oposición y también los del gobierno demostraron una vez más el porqué carecen de credibilidad: Dedicaron sus esfuerzos a denostar contra el adversario en otra muestra del mediocre “quítate tú para ponerme yo”. Una oposición fofa, que día a día elabora análisis forenses del cuerpo yacente de esta o aquella institución y punto. Quizás dio muestras de alegría ante la tragedia del niño muerto porque la semana que estaba “caliche”, fastidiosa, entre ruedas de prensa del Presidente; y las esperadas respuestas de una oposición cada vez más payasa, cínica y farsante, no daba para salir en la TV. En un escenario de circo no era entonces de extrañar que ante este asesinato inútil y vil, la respuesta de quienes presuntamente han de remediar los males actuales, era conocida: Circo, circo y más circo. ¿POLICÍAS O MALANDROS?: Es de suponer que una clase política que busque remediar los problemas, exponga siquiera una solución y deje de lloriquear ante las cámaras de la TV o culpar al Imperio o a Uribe Vélez. Si el país tuviera un liderato a la altura quizás Nicolás o el ciudadano Chúo, como representante digamos legal de Gobierno y de la MUD, han podido dar un diagnóstico de la situación, con soluciones para este problema específico. No lo hicieron ni lo harán y en tal situación es obligante hacer el trabajo que los gemelos polarizados no hacen, ni harán. A ver, ¿alguien entre los muchos alcaldes, gobernadores o Ministros de Justicia, Paz y otras boberías, que hay y ha habido, ha señalado, una sola vez, que las actuales policías están penetradas y desde hace mucho tiempo por el hampa? ¿Nadie se ha dado cuenta de que la pinta, el habla y las acciones de no pocos policías, sean estos municipales, regionales o nacionales, rojos, rojitos o escuálidos, es igual, y lamentablemente corresponde al identikit de los delincuentes? Por allí –y por el problema que le creó al mundo, la guerra a las drogas-, será posible encontrar solución a este asunto de la inclinación a la violencia que muestran parte de los policías venezolanos que tanta muerte inútil viene causando. La violencia de encapuchados y otros irresponsables que azuzados por políticos poco patriotas, empujan a diario hacia una guerra civil que una vez comenzada nos va a arruinar aún más de lo que lo ha hecho el estatismo socialista y terminarla costará mucho. Ojo, que en Colombia acuerdan altos al fuego y en Venezuela, los podemos avivar. OPOSICIÓN PRET A PORTER: A la Reina española no se le habría ocurrido pedirle al cacique Guaicaipuro que no atacará a sus huestes. Sin embargo antes Hugo, y ahora Nicolás, protestan a su tiempo porque no tienen una “oposición de altura”. A la medida, “Pret a Porter” para decirlo en el idioma de la elegancia que ahora exhiben impúdicos boliburgueses y politicastros recientemente enriquecidos como nunca se vio en nuestra historia. ¿Qué quieren? Será que son gafos o así nos creen… si el PSUV tiene la mejor oposición que jamás soñaron.
