Un reportaje de investigación de la agencia AP analiza el fenómeno que sugiere que el Gobierno está inflando artificialmente su alcance en las redes sociales
Redacción La Razón
La popularidad del presidente Nicolás Maduro en la red social social Twitter es comparable a la del papa Francisco, por la cantidad de seguidores que tiene, a pesar de que los índices de su aprobación apenas llegan a 30%.
Un reportaje de investigación de la agencia Associated Press analiza el fenómeno que sugiere que el Gobierno está inflando artificialmente su alcance en los medios sociales.
Analistas independientes consultados por el medio dicen que el gobierno se beneficia del uso de cuentas falsas en las redes sociales.
Se trata de cuentas automatizadas conocidos como «bots», una abreviatura de robots, un fenómeno mundial que Twitter no ha podido controlar. Los programadores pueden crear estas cuentas ficticias en masa, pero Twitter sólo puede eliminarlas una por una.
En el pasado, Maduro se quejó de que Twitter había cerrado las cuentas de más de 6.000 seguidores suyos. La empresa declinó hacer comentarios al respecto para esta historia.
Entre otros poderosos e influyentes líderes, que se cree que emplean los «bots» en violación a las políticas de Twitter, se encuentran los líderes de Rusia, México y Turquía, así como los partidarios del grupo Estado Islámico.
Según reseña el artículo, el atractivo de Twitter es obvio para el Gobierno. La plataforma constituye un espacio fundamental para el intercambio de información independiente y de puntos de vista, en un país donde los medios de comunicación que han sido críticos del gobierno han ido desapareciendo.
Venezuela, además de ser una sociedad polarizada, es uno de los países más activos en Twitter. Su plataforma es ampliamente utilizada para discutir las noticias políticas más que cualquier otro país de América Latina, según el Pew Research Center, un instituto de investigación.
«Twitter es una de las pocas ventanas que tienen los disidentes», dijo Carolina Acosta-Alzuru, una académica de los medios de comunicación de la Universidad de Georgia, y oriunda de Venezuela. «Esa es otra esfera donde el gobierno está tratando de controlar el discurso. De eso se trata el juego de los ‘hashtags’- que te dé una falsa sensación de la mayoría».
El gobierno parece estar teniendo éxito
Mientras que los temas propuestos en Twitter por la oposición son el doble de populares que los del partido oficial, las principales tendencias del día, suelen ser propuestas por el gobierno y sus oponentes se quedan rezagados en un distante segundo lugar.
«…hay una alianza de ‘bots’ en la que muchas cuentas de Twitter retuitean los mensajes del gobierno»
En 2011, Hugo Chávez recabó apoyo para su nueva cuenta de Twitter comprometiéndose a entregar una casa al que fuera su seguidor número cuatro millones, que finalmente fue ganada por un estudiante universitario.
Hoy en día, el Partido Socialista ofrece a sus seguidores bajar una aplicación que le permite retuitear automáticamente cada tuit enviado por Maduro. El mandatario es la tercera figura pública más retuiteada del mundo, detrás del papa Francisco y el rey de Arabia Saudita, según la firma de relaciones públicas Burston Marsteller.
En un programa computacional escrito a petición de The Associated Press para rastrear a los ‘bots’, investigadores de la Universidad Estatal de Utah encontraron elementos típicos de los robots en cientos de cuentas de Twitter que replicaron los comentarios del gobierno venezolano: mensajes que rebotan con una velocidad tal que es imposible que hayan sido tecleados; mensajes repetidos y tuits que salen uno tras otro, con segundos de diferencia.
«Se puede concluir que hay una alianza de ‘bots’ en la que muchas cuentas de Twitter retuitean los mensajes del gobierno», dijo Kyumin Lee, profesor de la Universidad Estatal de Utah. «No es que (la gente) simplemente vuelva publicar el mismo contenido, exacto. Este no es un comportamiento humano, normal».
Entre los usuarios de las cuentas que replican estos mensajes de Maduro hay un grupo de cuentas bautizadas con los nombres de cada estado de Venezuela.
Las cuentas sospechosas también pueden rastrearse cuando envían tuits que no tienen sentido pero con un hashtag promovido por el gobierno. Decenas de presuntos robots cibernéticos repitieron varias veces por hora la etiqueta #ObamaYankeeGoHome en julio, meses después de que esa tendencia hubiera terminado.
Funcionarios del Ministerio de Comunicación se abstuvieron de dar declaraciones para esta investigación.
El Movimiento Revolucionario Tupamaro dice que el estado domina en Twitter porque tiene el respaldo del público. Ares Di Fazio, portavoz del movimiento, dijo que «la oposición trata de no deprimirse diciendo que somos robots. Pero la verdad es que somos humanos».
Los críticos del gobierno también parecen beneficiarse de la manipulación de los medios sociales. Al menos el 7% de los tuits del líder opositor Leopoldo López, quien se encuentra en la cárcel, han sido retuiteados utilizando plataformas automatizadas, según Philip Howard científico computacional de la Universidad de Washington.
Durante el último año, por ejemplo, el Ministro de Comunicación ha estado enviando mensajes de texto a un ejército de partidarios leales del gobierno, en los que les dice qué es lo que deben tuitear.
El hashtag del día también va a los trabajadores de los medios de comunicación estatales y es promovido por cuentas institucionales, incluyendo las cuentas de aeropuertos, bancos estatales, ministerios e incluso el Instituto Nacional de los Espacios Acuáticos.
No está claro quién maneja estas cuentas progubernamentales automatizadas, pero hay muchos indicios que apuntan en dirección del estado Aragua.
Los mensajes del joven gobernador del estado, Tareck El Aissami, y del Ministro de Salud son retuiteados y elogiados por una red de cuentas de personas que a menudo se presentan como mujeres escasamente vestidas, y sin biografías adjuntas, dos elementos típicos de los ‘bots’.
Esas cuentas robotizadas parecen haber bombardeado con mensajes al periodista Franz Von Bergen a principios de julio, después de que publicó un artículo sobre los esfuerzos del gobierno por influenciar las comunicaciones online.
Las cuentas le enviaron cientos de mensajes idénticos que promovían mayormente a celebridades y al gobierno de Aragua. Von Bergen, quien escribe para El Nacional, dijo que esos ataques dificultan su trabajo.