El Papa Francisco mantiene el debate entre los fieles conservadores y los reformistas. Esta semana lo encendió con el perdón del aborto
Manuel Alegria
Jorge Mario Bergoglio, el Papa Francisco, se ha referido a distintos hechos cuestionados por la Iglesia católica durante su mandato que apenas lleva 2 años y medio. El divorcio, la homosexualidad y el aborto han confrontado a la feligresía y mostrado signos de tolerancia dentro de la religión.
“El perdón de Dios no se puede negar a todo el que se haya arrepentido”, expresó el pasado 6 de agosto el Papa Francisco en medio de una audiencia general.
Uno de los primeros pronunciamientos polémicos de Su Santidad ocurrió hace dos años, en el mes de julio, durante su primera visita a Latinoamérica.
“Si una persona es gay y busca al Señor y tiene buena voluntad, ¿Quién soy yo para juzgarlo?”, expresó en esa oportunidad durante una rueda de prensa en Brasil, antes despegar al Vaticano.
A partir de ese momento se abrió una discusión en la Iglesia católica acerca de su postura ante las personas homosexuales.
Es por ello que en su Instrumentum Laboris (un documento preparatorio del Sínodo de octubre de este año) indica que tanto hombres como mujeres homosexuales deben ser acogidos con “respeto y delicadeza”, sin embargo considera que no existe fundamento para asimilar analogías entre uniones heterosexuales y homosexuales.
El Papa Francisco mantiene el debate en el catolicismo entre los fieles conservadores y los reformistas. El mes pasado tocó la situación de los divorciados que han vuelto a tener parejas, asegurando que estos no están excomulgados de la sagrada comunión, sino que forman parte siempre de la Iglesia.
El Papa afirma que dejar a estas personas fuera de la hermandad católica es desatender a los hijos pequeños que quedarían fuera de una educación cristiana.
“¿Cómo pedirles a estos padres educar a los hijos en la vida cristiana si están alejados de la vida de la comunidad?”. “La Iglesia no tiene las puertas cerradas a nadie”, dijo en aquella oportunidad.
Además, resalta que en algunas ocasiones la separación de las parejas es inevitable y hasta necesaria, sobre todo cuando existe la violencia doméstica en una relación.
A pesar de esto, aconseja unirse por la vía del matrimonio:
Queridos jóvenes, no tengan miedo del matrimonio: Cristo acompaña con su gracia a los esposos que permanecen unidos a él.
— Papa Francisco (@Pontifex_es) julio 28, 2015
Ahora, el aborto
El 1º de septiembre el Papa Francisco volvió a sorprender a sus feligreses. Esta vez anunció el perdón para todas las mujeres que hayan cometido “el pecado del aborto”, como antesala a la celebración del Jubileo de la Misericordia 2015-2016. Para la Iglesia católica, el Año jubilar es un lapso en el que se conceden indulgencias o gracias espirituales a los fieles.
El máximo representante de la Iglesia católica decidió conceder a todos los sacerdotes para el Año jubilar (empieza el 8 de diciembre de este año y termina el 20 de noviembre del próximo) la facultad de absolver el pecado “a quienes lo han practicado y arrepentido de corazón”.
El mensaje del Papa fue hecho público por medio de una carta dirigida al Monseñor Rino Fisichella, presidente del Consejo Pontificio para la Nueva Evangelización.
“Sé que es un drama existencial y moral. He encontrado a muchas mujeres que llevaban en su corazón una cicatriz por esa elección sufrida y dolorosa. Lo sucedido es profundamente injusto. Sin embargo, sólo el hecho de comprenderlo en su verdad puede consentir o perder la esperanza”, indicó su Santidad en la carta.
Desde su elección como el jefe del Vaticano, Francisco ha insistido en una congregación que no condene a los pecadores sino que sea similar a un hospital de campaña, que cura a sus heridos.
