Corresponde constitucionalmente al CNE garantizarle al pueblo venezolano transparencia y diligencia
Manuel Isidro Molina
El domingo 22 de febrero pasado, expresé en esta columna mi convicción firme sobre la conveniencia del referendo revocatorio presidencial, como “única opción viable” para el bien de nuestro país. Lo ratifico transcribiendo dos párrafos de aquel artículo:
“Hoy, el tema es si recaemos en un nuevo período de violencia fratricida, como tantas veces lo he advertido; o defendemos la paz de la República y nos afincamos en el camino de la convivencia civilizada y el desarrollo armónico de la nación, con sensatez política y responsabilidad histórica. Toda aventura violentista debe ser enfrentada y sofocada, venga de donde venga y sean quienes sean sus “dirigentes” reconocidos u ocultos tras bastidores, como suele ocurrir para después evadir cobardemente las consecuencias de sus irresponsables acometidas… El referendo revocatorio es la única opción viable, no para simplemente ‘salir de Maduro’, sino también para restablecer la legitimidad política indispensable en la nación, sea cual fuere el resultado, ¡pa’ que se acabe la vaina!”.
Ya en marcha con la recolección de firmas promovida por la Mesa de Unidad Democrática (MUD), ahora corresponde analizar su pertinencia y posibilidades, brevemente:
1.- Hay que dejar sentado que el Consejo Nacional Electoral, institucionalmente, no puede permitirse la torpeza e indignidad de torpedear el referendo revocatorio presidencial solicitado. A sus rectoras y rector, junto con todos sus funcionarios a nivel nacional, corresponde constitucionalmente garantizarle al pueblo venezolano transparencia y diligencia, profesionalismo y decencia en su alta función pública. Será la máxima contribución a la paz de la República, garantizar la expresión política del soberano, cuya decisión histórica no puede ser interferida por ningún factor en pugna ni por maniobrillas de quienes tiran las piedras y ponen caras de circunstancia.
2.- La nación toda debe asumir democráticamente el decideratum popular, cualquiera sea su resultado, quédese el presidente Nicolás Maduro o salga del máximo cargo ejecutivo nacional.
3.- El Poder Ejecutivo Nacional debe cesar su práctica ventajista de abuso de poder y coacción, para centrarse en su legítima defensa ante el pueblo, en contra de los argumentos e intenciones de los factores políticos partidarios de la salida del actual Presidente de la República.
4.- No menos importante, la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) debe cumplir su rol de apoyo y resguardo a los dispositivos del CNE, y de garantía del orden público y la seguridad de los ciudadanos. Independientemente de los criterios personales de los oficiales y demás integrantes de sus componentes, institucionalmente la FANB no está para opinar ni participar en el gran debate nacional que nos espera.
5.- El pueblo venezolano no debe caer en la animosidad violentista y extremista de quienes promoverán la defensa o motivación de sus respectivas parcialidades bipartidistas en confrontación excluyente, polarizada e irresponsable. Tampoco es que se nos va la vida si sale o se queda el presidente Maduro, como no es seguro que el resultado del referendo arroje una y otra opción. Ya en 2004 tuvimos una experiencia con el presidente Hugo Chávez, cuyos oponentes cantaron “fraude” irresponsablemente. Así como el gobierno debe estar presto a reconocer otra derrota estratégica, si ocurriera finalmente, espero que la dirigencia de la MUD y los factores fácticos de poder que la respaldan aquí y desde el exterior, tengan suficiente sentido histórico como para no incendiar nuevamente el país, en caso de no lograr su objetivo.
La Constitución vigente es generosa en cuanto a participación ciudadana y poder constituyente de nuestro pueblo, y el referendo revocatorio de los elegidos es uno de los mejores mecanismos de control de los gobernantes y otros dignatarios electos por el voto popular. Venezuela es el único país del mundo entero, con esa previsión constitucional. No hagamos una morisqueta de tan alta evolución democrática.
“Vox populi, vox Dei”. Y así será este año, entre nosotros. Lo que ocurra será en paz, por decisión popular inobjetable. Nadie, bajo ningún argumento o creencia, tiene derecho a fracturar, incendiar o ensangrentar la República. Merecemos un país distinto al fraguado por el bipartidismo del siglo XXI, y lo lograremos independientemente del resultado del referendo revocatorio presidencial.
El Confesionario
- CONDENO CON LA MAYOR FIRMEZA el vil asesinato de la joven Lucía Suanez, locutora y productora de Radio Minera de Tumeremo, estado Bolívar, supuestamente a manos de mafias de la zona del oro, que ella había denunciado. La investigación penal debe llegar hasta sus sicarios y quienes los contrataron para ese horrendo crimen. Mi solidaridad a sus familiares y amigos.
- UN GIGANTE “MERCADO NEGRO” es hoy la economía venezolana, y su impacto es terrible para el pueblo, el comercio y la industria. Un caos que el gobierno parece no ver ni comprender.
- “HAY HAMBRE, SEÑOR” me dijo una mujer atribulada por la escasez de alimentos subsidiados o regulados, los precios especulativos y el criminal “bachaqueo” que ha llevado el cartón de huevos a Bs. 2.500 y el kilo de leche en polvo a Bs. 3.000 descaradamente en el mercado de Coche, en Caracas.
- ¿ASÍ ES QUE SE GOBIERNA? “La planta Balmorca de alimentos para animales, ubicada en Barcelona (Anz), expropiada a Purina, es 60% propiedad del gobierno y 40% del sector privado: en el mes de abril, lleva cuatro aumentos de precios… INGEAGRO (Aragua) vende las semillas a precios astronómicos: 100 gramos de tomate Bs. 37.000 y 100 gramos de pimentón Bs. 220.000… No se consigue Emicina, Lepecid, Diminaceno, Ivermectina ni medicinas ni vacunas para mascotas”.
- EL PROFESOR VLADIMIR AGUILAR CASTRO me envió una muy grata y exigente invitación, que acepté gustosamente:
“En mi condición de Coordinador del Centro de Estudios Políticos y Sociales de América Latina (CEPSAL) y del Doctorado en Estudios Políticos de La Universidad de Los Andes, hemos pensado un conjunto de jornadas que nos permitan ir abriendo caminos y conseguir las luces necesarias para salir de esta hora aciaga en la cual nos encontramos.
“Somos de la idea que ni del lado del gobierno ni de la oposición, existe una verdadera razón de Estado ni democrática que nos permita superar la coyuntura actual. En virtud de su perseverancia para con las salidas democráticas en nuestro país, deseamos iniciar un debate con su presencia, en el que nos pueda honrar con una ponencia sobre la situación actual de Venezuela. Usted estará acompañado por el académico Reinaldo Rojas quien también disertará sobre un tema de actualidad nacional. Demás está decirle que tenemos la intención de publicar las ponencias en unos cuadernillos de aniversario de nuestro Centro.
“La actividad está prevista para el día viernes 3 de junio de 9 de la mañana hasta las 12 del mediodía. Cada ponente tendrá un tiempo de 45 minutos para luego abrir el debate con los asistentes”.
- AGRADECIDO PARTICIARÉ EN TAN IMPORTANTE EVENTO con la mira puesta en los caminos de paz, unión y entendimiento para la reconstrucción moral de la República. Convencido soy de que hay caminos posibles y armónicos para superar social, política, económica y éticamente la actual crisis, nuevo rumbo en el cual la Universidad venezolana puede catalizar un vuelco significativo, útil, certero y equilibrado.
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