Es preferible un jonronero con anfetaminas a un político trono de resentimiento y de fruición por meterle mano a la Tesorería Pública
O.E
Alex Cabrera, máximo jonronero en la historia de la Liga Venezolana de Béisbol Profesional, Lvbp, no tiene contrato para el próximo torneo. Cabrera había sido suspendido tras violar, supuestamente, las normas antidopaje, pero acudió a los tribunales y logró fallo exculpatorio. Ahora ningún equipo lo quiere.
Un típico caso de “bola negra”, en cuenta del excelente rendimiento del atleta la temporada pasada.
Muy ético a primera vista. Lo que ocurre es que todos los días vemos el doping con café, tabaco, alcohol o con deporte-espectáculo. El yuppie antes de apostar en la NY stock exchange se da sus pases de cocaína.
Los llamados niños “de la patria” carburan con “pegaloca” para sobrellevar la miseria extrema en que los tiene sumidos la satrapía bolivariana.
La Fifa y el COI agregaron y seguirán agregando masa “muscular”, mediante intravenosas de dinero negro, con sus jeringuillas, llámense Joseph Batter, Infantino o Thomas Bach.
Es la misma urgencia o evasión de sacar algo más de nosotros mismos.
La Lvbp considera que se ultraja el deporte cuando se consumen estimulantes. Pero uno cree que el abuso de esteroides anabolizantes, no es sino un subproducto del deporte-show.
A los hinchas de la Vinotinto los pinchan con marketing para sobrellevar las sucesivas derrotas. Se droga un jonronero, pero antes ya se ha dopado la propia Lvbp con dólares preferenciales.
No hay divisas para comida, medicinas, repuestos industriales, sin embargo, días atrás, el señor Prieto Párraga, presidente de dicha asociación, se sintió con derecho a exigir, y de manera pública, varios millones de moneda dura a tasa prioritaria para la temporada 2016-2017.
El beisbol es el opio del Pueblo, habrá pensado. En todo caso, siempre será preferible un circuito peloteril o un short-stop “puyado” con estimulantes, químicos o monetarios, a un político con una voladora de resentimiento.
La Revolución Forajida es un fumadero intoxicado de abuso de poder y furor de Mesalina por saquear la Tesorería.
Dicho lo anterior, más comprensión para Alex Cabrera, los dólares preferenciales de Prieto Párraga y ¡strike three!