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Un tema que pica y se extiende/Foto Cortesía
Omar Estacio Z
El Tribunal Supremo de Justicia, TSJ, acaba de condenar al portal de noticias, “La Patilla”, a pagarle a Diosdado Cabello, una mil millonada de bolívares “soberanos”. “ABC” de España, había publicado reportaje que recogía las confesiones de un subalterno de Cabello. “La Patilla” lo reprodujo y ¡zas! el TSJ consideró que el llamado “segundo de a bordo” de la Robolución tenía derecho a ser resarcido, moralmente.
A ver, a ver, revisamos la página del TSJ en la red. Tomemos, la sentencia 15-362, del 9/8/16, Sala Civil. Se trató del caso de un niño que perdió el ojo izquierdo a causa de la negligencia de su colegio, al impartirle clases prácticas de química.
La indemnización por daño moral a favor del jovencito, ascendió a 5.649 Unidades Tributarias, UT. La misma Sala en otra sentencia, la 000813 del 8/12/16, le otorgó resarcimiento moral a la víctima de lesiones gravísimas por accidente de tránsito, el equivalente a 21.468 UT, mientras que a un trabajador discapacitado total, por accidente laboral, la Sala en cuestión por sentencia, 000697, del 12/11/15, le fijó indemnización por ese mismo concepto moral, montante a UT 6.666.
El resarcimiento moral a favor de Cabello, para nuestro asombro, fue fijado en la bicoca de UT 1.777.777. Lo que quiere decir, que el patrimonio moral del suciodicho bolivariano vale 314 veces más, que el ojo de un estudiante. 82 veces más, que el dolor de cualquier lesionado gravísimo en accidente de tránsito y 266 veces más, que la incapacidad vitalicia, de un obrero.
Con lo que le pague “La Patilla”, Cabello ha prometido, levantar dos escuelas. “Vale un ojo de la cara”, decíamos los caraqueños de otro tiempo, para expresar lo más costoso. Ahora no. Nos lo han más puesto fácil a los venezolanos. Que a nadie se le ocurra sacarle un ojo al señor, Diosdado, el pobre. Suficiente sacarle sus trapos al Sol. Su ya maltrecha reputación quedará más maltrecha. Pero, según el propio afectado y el TSJ, es nuestra única posibilidad para recuperar el Hospital de Niños. O para reconstruir Venezuela. Que quien tenga algo que decir que lo diga, que para luego puede ser tarde.
@omarestacio
