Hicieron multimillonarios negocios con la “revolución” chavista en el sector eléctrico nacional y se preparan para el regreso triunfal en una eventual “sexta república” de la actual oposición a Maduro
Noel Gómez Herrera
A través de “Derwick Associates”, empresa de maletín supuestamente dedicada a la construcción de plantas de generación eléctrica, de subestaciones, y centrales hidro y termo eléctricas, los llamados “bolichicos” obtuvieron colosales contratos con motivo de la emergencia eléctrica, declarada por el difunto Hugo Chávez en el año 2010.
Las cabezas visibles de “Derwick” son Leopoldo Alejandro Betancourt López, Pedro Trebbau López, Francisco Convit Guruceaga, Domingo Guzmán López, Francisco Dagostino Casado y Orlando Alvarado, chicos de la “alta sociedad” caraqueña con estrechos vínculos con la “revolución bolivariana”, de Miraflores hacia abajo, pasando por Pdvsa, Corpoelec y la CVG, entre otros.
Los principales contratos a los “bolichicos” fueron entregados durante la gestión del fallecido Alí Rodríguez Araque en el Ministerio de Energía Eléctrica y de sus viceministros Javier Alvarado y Nervis Villalobos, actualmente procesados en España por lavado de dinero proveniente de la corrupción.
Se estima que los tristemente célebres “bolichicos” recibieron contratos en el sector eléctrico por más de doscientos mil millones de dólares, la mayoría de ellos sufragados por Pdvsa y otros por la CVG.
Actuaron impunemente con abierta protección del “alto gobierno”. El dinero entregado a los “bolichicos” está regado en el mundo entero, especialmente en Europa y sus cabecillas disfrutan de una vida de inmensos lujos, mientras la pobreza, la oscuridad, el malestar y la hambruna embarga a buena parte de la población venezolana.
Actualmente mantienen estrechas relaciones con algunos sectores de la oposición en espera de nuevos contratos en una eventual “sexta república”. Hasta ahora no han sido investigados por los mecanismos contralores de la Asamblea Nacional, dominada mayoritariamente por la oposición.