Más importante que el cambio de gobierno sería el cambio de mentalidad
Domingo Alberto Rangel I AL REVÉS Y AL DERECHO
Una noticia desapercibida en el mar de información con origen en Ucrania me pone al día acerca de los cambios que se están dando en el mundo. Y no se trata del hundimiento de la nave insignia de la marina rusa… lo cual en una guerra siempre puede ocurrir.
El nombre Viktor Medvedchuk probablemente no nos dice nada a los venezolanos… tan alejados de ese conflicto… como han de estar los habitantes de Norcorea… de nuestros padecimientos venezolanos.
El titular mencionaba ese nombre como un amigo del presidente Putin… al que el Presidente de Ucrania ofreció intercambiar por niños prisioneros de guerra.
Bien: Viktor Medvedchuk es el jefe de un partido pro ruso… en Ucrania… y cómo corresponde en una guerra… se le detuvo antes de comenzar las acciones… por traidor.
Este enchufado Medvedchuk aprovechó el comienzo de la guerra para escaparse… pero luego fue detenido a pesar de vestir uniforme militar ucraniano… y ahora ofrecen cambiarlo por niños presos.
El punto es que en la empobrecida Ucrania de antes de esta guerra… donde todos los mandatarios han robado… incluso el actual… ¡a Viktor Medvedchuk se le estima poseedor de un capital de 19. 000 millones de dólares!
Una considerable suma si la comparamos con los pírricos 6. 000 millones de dólares que las revistas especializadas le asignan al venezolano más rico.
Si uno de ocioso pero buscando datos para comparar… mete orejas y ojos… en las publicaciones donde con seriedad hacen futurología y estiman las grandes fortunas… caemos en cuenta al menos de 2 asuntos.
El primero que la nueva Edad Media a la que poco a poco están llevando al mundo… sobre todo al Occidente cristiano… no solo acabó con la clase media, motor del capitalismo burgués, a la que han dejado sin ahorros… sino que paradójicamente entre tanto empobrecimiento y carestía… “milagrosamente” hizo crecer los capitales de los ricos.
Sobre todo de los recién llegados al club… como en mi país serían boliburgueses… bolichicos… y enchufados.
En nuestra otrora orgullosa Venezuela era cuesta arriba que ricos del vecindario rivalizaran digamos que con Cisneros o Mendoza –hablo de los capitales de antes que el narcotráfico tomara los bancos por asalto y los políticos dejaran los pruritos decentes que aún les quedaban-. Ahora hay un guatemalteco mucho más rico que cualquier venezolano.
Pero eso era en la Venezuela rica y se acabó: las habladurías nuestras asignan a familiares de Presidentes… fortunas inexistentes que las revistas especializadas y serias… no repiten.
Y ahora enlazo el nivel de los robos del camarada Viktor Medvedchuk… con las necesidades… no de Ucrania… sino nuestras.
Muchos piensan que reconstruir a Venezuela -¿?- es cosa fácil y rápida… basta que salga el Presidente del poder… según dicen unos… o que nos quiten las sanciones… replican otros… soñadores y nefelibatas todos.
La verdad y se impone dejar el lenguaje del populismo… es otra: si nuestros ladrones e incluso los ricos de cuna cuyas familias llevan generaciones trabajando… no pueden rivalizar en materia de capital con el sinvergüenza y muy posiblemente ladrón de Viktor Medvedchuk… igualmente y aplicando la vieja “regla de tres” llegaremos a ver que difícilmente… salvo para capitales golondrina… conseguiríamos reunir desde fuera… parte del dineral que se requiere para remediar lo destruido en estos años.
Esas reflexiones nos deberían llevar a rechazar enfrentamientos inútiles como los que propugnan el uso de frases tan manidas como “prohibido olvidar”… “a todo 11 le sigue su 13” o “ni un paso atrás” que se la he escuchado a jóvenes chavistas sin saber de dónde viene la propuesta,
Bien: más importante que el cambio de gobierno sería el cambio de mentalidad comenzando por dejar de escribir y hablar como si fuesen miembros de Al Qaeda a punto de inmolarse… o de enemigos con los que no se admite tomar un café.
Otra: peinar la burocracia para hacerla eficiente… en la nueva mentalidad mejor 200 policías bien pagados y bien entrenados… que 400 matraqueros.
Y en materia de impuestos… tras los millones de venezolanos que están afuera habrá que legalizar el “borrón y cuenta nueva”… para que todos paguen impuestos… y quien no lo haga que corra con las consecuencias.
Para eso Nicolás Maduro tiene que entender que su gobierno ha sido laxo con los corruptos… así como también que es muy mal ejemplo que un ladrón como el interino… ande libre denostando de nuestro país.
Reparar Venezuela es labor nuestra… pero para llevarla a cabo todos tenemos que cumplir un rol… caso contrario antes de morir veremos disminuida la heredad territorial que nos dejaron españoles y libertadores.
@DomingoAlbertoR