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SE BUSCA / 1 AÑO DESAPARECIDO

Desde el pasado 20 de marzo de 2023 se encuentra desaparecido el exvicepresidente Tareck Zaidan El Aissami Maddah y se desconoce su paradero. El Departamento de Justicia de Estados Unidos ofrece una recompensa de 10 millones de dólares a quien aporte información que haga posible su captura y quince millones por su jefe inmediato, Nicolás Maduro Moros.

Hernán Lugo-Galicia

Se cumple un año de la “desaparición” del ex “superministro” Tareck Zaidan El Aissami Maddah.  Su paradero es el “secreto mejor guardado” del chavismo.  

Se indican hasta cinco lugares del mundo donde estaría, pero no hay pruebas, como fotos o vídeos. Fuentes militares aseguran que está en una residencia en Fuerte Tiuna y que su salud ha empeorado a consecuencia de un cáncer. Lo raro: No hay reportes de su ingreso al Hospital Militar o alguna clínica en Caracas.  En 2018, Tareck El Aissami era percibido como el “sustituto natural” de Nicolás Maduro.  A principios de 2023, fue execrado del régimen por la corrupción en Pdvsa y que implicó la pérdida de más de 20 millardos de dólares del erario de Venezuela; y a un año de su baja del trono está desaparecido y se tejen una serie de versiones sobre su paradero por el mundo. En redes lo ubican en Rusia; otros, en Turquía; en Cuba, sin que existan pruebas, como fotos o vídeos. La última aparición fue en el primer trimestre de 2023, a través de un vídeo que lo muestra haciendo ejercicio en una casa, que estaría en Caracas. 

¿A dónde está el ex “superministro”?  Desde Fuerte Tiuna aseguran que el merideño está “a resguardo” en una vivienda de este complejo militar, que tiene un sótano, y cuenta con la vigilancia permanente de la Policía Militar.  TEA no sale; ni saldrá del país porque Miraflores teme que se entregue a EEUU. Empero, el portal CroniVe, Crónica Policial, habla de un acuerdo, promovido por un empresario de Aragua, para que se le permita irse a alguna nación árabe, con la promesa de permanecer fuera de la opinión pública, sin contactos con prensa o gobiernos a los que el chavismo considera “enemigos de la revolución”.  

El dato: En la elaboración de este trabajo, se trató de contactar al empresario, pero no se logró, razón por la cual, no se le menciona.  

El “Cártel de los Sapos” 

¿Por qué cayó en desgracia?   

La razón principal de su caída en desgracia con Nicolás Maduro, no sólo guarda relación con el robo millonario, dado que el gobierno necesita recursos para la campaña presidencial, sino con un hecho muy poco comentado: El Aissami, por órdenes de HCHF, se convirtió en “un espía” que pasaba información a Estados Unidos y así, a su vez, sacaba datos para Miraflores. Sin embargo, Maduro recibió un informe que alertaba sobre el eventual hecho que el merideño, de padres sirios, usaría los contactos con la inteligencia norteamericana para desplazar al inquilino y a Diosdado Cabello y “entregarlos como premios de consolación” por su perdón y salida de la lista de sancionados y de cooperantes con el narcotráfico.  

“La preocupación mayor de Maduro era que El Aissami participaba en una operación, con apoyo económico, para hacerse del poder, aunque, en un aparte del informe, se advertía que huiría a Estados Unidos y allí se sumaría a otros exfuncionarios que aportaron pruebas contra el entorno presidencial”, indicó una fuente militar.  

Ya Maduro había sentido el golpe de la detención del general Clíver Alcalá en Colombia y la extradición a EEUU y su conversión de testigo en su contra. Alcalá también tuvo la venia del barinés para relacionarse con el narcotráfico y así “inundar a EEUU” de drogas y doblegar a la juventud norteamericana. Ahora, será condenado por este delito en los próximos días. 

En 2019, se sumó a esta lista el ex jefe de la inteligencia militar (DGCIM), general Cristhofer Figuera. Y, en otrora, el ex ministro Rafael Isea y una lista de chavistas que han visto en la delación un salvoconducto en EEUU.  

A estos funcionarios se les tildó de ser parte del “Cartel de los Sapos”, por parte del chavismo, por lo que la detención de El Aissami en 2023 frustró sus planes de ser el líder de la revolución o de entregarse a lo que llaman “imperialismo”, indican voceros del extinto Polo Patriótico. En días recientes, el nombre de TEA salió otra vez porque se detectó que un ex funcionario de la Gobernación de Aragua, Walter Rodríguez Pérez, que trabajó en el despacho cuando era el mandatario regional, fue vinculado al secuestro y el asesinato del primer teniente Ronald Ojeda.  ¿Estaría detrás El Aissami de la operación en Chile cuando en Caracas aseguran que carece de poder?. ¿Quiénes controlan la DGCIM? ¿No son los aliados de Maduro?  

O al contrario: ¿Entonces, TEA aún tiene tentáculos o se trata de una especie rodada en Chile con aportes de la inteligencia venezolana para desviar la atención sobre la injerencia de la Inteligencia Militar junto a la delincuencia organizada?  La tesis no cuenta con aval en predios del chavismo que alegan que perdió poder y el control que tuvo del Sebin cuando estuvo en la Vicepresidencia de la República, entre 2017 y 2018. La que se impone es el silencio que impera sobre el exvicepresidente.  Aunque algunos señalaron que estaría muerto; es decir, que fue asesinado, pero a los investigadores les llama la atención que, hasta ahora, ningún familiar haya denunciado este hecho o reclamado su cuerpo, por lo que se descarta este suceso.  

En el PSUV dicen, a baja voz, que un cáncer lo mantiene debilitado. Lo raro del caso es que, ni en el Hospital Militar o clínica del país hay reporte de su ingreso.  

El destino de TEA figura entre los “mejores secretos guardados del Caribe” chavista, como el día verdadero de la muerte del barinés, el paradero de los 21 millardos de Pdvsa y la partida de nacimiento de Maduro, inexistente en Venezuela y en resguardo en Colombia. 

La Utopía de El Aissami 

Al graduarse de abogado en la ULA, y como su padre Carlos Raidan El Aissami, de origen sirio, tuvo participación en la intentona del 4-F de 1992, se incorporó al chavismo e hizo una carrera política, bajo la sombra de Adán Chávez, que fue su profesor, y del propio Hugo Chávez, porque se visualizaban como un sucesor al trono.  

En 2005, fue electo diputado a la Asamblea Nacional, junto a un grupo de andinos, a quienes en 2023 se les atribuyó la “trama de corrupción en Pdvsa” y adquisición de bienes en el interior y en la zona exclusiva Las Mercedes, en Caracas.  

La Fiscalía chavista detuvo e imputó a aliados del merideño; 40 personas civlles y militares, entre ellos sus paisanos: Hugbel Roa y Hugo Cabezas, ex diputados del PSUV, y el empresario Pedro Maldonado. TEA se salvó: el Ministerio Público no lo investigó, no lo imputó, no lo citó y el caso entró en archivo. 

“El chavista radical”, como se proclamó, ocupó cargos en el PSUV; fue designado ministro del Interior (2008-2012) y luego fue enviado a Aragua a sacar a Rafael Isea de la silla regional, donde permaneció dos períodos (entre 2012 y 2017). De allí, surgió su contribución a la revolución: La creación de grupos de choques contra las manifestaciones opositoras.  

Isea lo acusó de tener supuestas conexiones con el narcotráfico, una vez que llegó a EEUU y decidió declarar contra el chavismo. Por ello, en 2011, el Departamento de Seguridad, de Inmigración y la DEA anunciaron que investigan al merideño por narcotráfico.  

En 2017, es sancionado por EEUU, que ofrece en 2020 una recompensa por su captura y lo incluye en la lista de los 10 más buscados. No obstante, los señalamientos no hicieron mella y logró ganarse, primero, la confianza de Chávez y después la de Maduro. 

Entre 2017 y 2018, ocupó la Vicepresidencia; en 2018, el Ministerio de Industrias y Producción, de donde lo sacan y lo designan como titular de Petróleo, que desempeña entre 2020 y 2023. 

El 20 de marzo de 2023 renuncia, vía Twitter o X, al cargo, producto de la investigación por corrupción en Pdvsa, el manejo de criptomonedas y el favorecer a un grupo económico partidario de que Maduro dejara de gobernar por ser responsable de la crisis del país. Lo paradójico era que TEA era el “superministro del área económica”, y por lo tanto, responsable de este quiebre del país. 

Irónico o no, El Aissami encabezó en la ULA un movimiento juvenil, llamado Utopía: la concreción de un proyecto personal que se visualizaba como poderoso y resultó irrealizable. ¿Casualidad o causalidad?    

Este fue el último twettws de Ateck El Aissami, el 20 de marzo de 2023.

Este es el cartel de recompensa difundido por el Gobierno de Estados Unidos en todo el planeta:

TEA se desempeñó como vicepresidente de Venezuela del 4 de enero de 2017 al 14 de junio de 2018, del 14 de junio de 2017 al 20 de marzo de 2023 fue vicepresidente sectorial de economía y del 27 de abril de 2020 al 20 de marzo de 2023 fue ministro de petróleo. Del 27 de diciembre de 2012 al 4 de enero de 2017 fue gobernador del estado Aragua y del 8 de octubre de 2008 al13 de octubre de 2012 fue ministro de Relaciones Interiores, del difuntopresidente Chávez.

El autor es escritor y periodista venezolano, de larga trayectoria en medios impresos, actualmente exiliado en Estados Unidos.