El rechazo de la propuesta de oleoducto Keystone XL de TransCanada Corp que hiciera el presidente Barack Obama podría dar un aire a la maltrecha economía venezolana
Venezuela, con las mayores reservas de petróleo del mundo, produce un crudo pesado similar —en consistencia— al que proviene de las arenas petrolíferas de Canadá. Su economía se basa en gran medida en el envío de ese crudo a las mismas refinerías del Golfo de Estados Unidos que Keystone iba a suplir, y podría verse bastante beneficiada con la decisión que tomara el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, de rechazar la construcción de un oleoducto que llevaría crudo desde Alberta (Canadá) hasta el Golfo de Estados Unidos.
Venezuela enfrenta a una crisis económica por la caída del precio del crudo. Este mismo desplome ha causado diferencias en el seno de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), de la que Venezuela es miembro, pues Arabia Saudita continúa bombeando crudo desde su subsuelo a un ritmo sin precedentes y se niega a pactar para buscar una subida de los precios del crudo.
«El beneficiario número uno de todo esto será Venezuela y otros proveedores del petróleo pesado que se envía a la Costa del Golfo en camiones cisterna», dijo a Bloomberg el vicepresidente de IHS Energy Inc. Jim Burkhard por e-mail.
«Venezuela se enfrenta a lo que podría llegar a ser el mayor shock externo de su historia«, explican en una nota del pasado 4 de noviembre los analistas de Bank of America Merrill Lynch Global Research Francisco Rodríguez y Jane Brauer.
La nación ha reaccionado a la crisis a través de una combinación de recortes de importación y el agotamiento de los activos. Se espera que pueda frenar aún más las importaciones, explicaron los analistas.
Ingresos del Petróleo
Venezuela es más dependiente que nunca de los ingresos del petróleo, que representa el 95% de sus ingresos por exportaciones y casi la mitad de los ingresos del gobierno, según el Ministerio de Relaciones Exteriores del país.
El ministro de Petróleo de Venezuela, Eulogio Del Pino, dijo el mes pasado que el país exportaba alrededor de 2,4 millones de barriles diarios. De ese total, 1,3 millones están destinados para China y la India. En agosto, Venezuela envió un estimado de 935.000 barriles por día de petróleo a los EE.UU., de acuerdo con datos de la EIA.
El proyecto de Keystone XL, rechazado este viernes por Obama, habría abarcado 1.897 kilómetros desde Alberta (Canadá) para conectar con una red de ductos existente a las refinerías del Golfo, y pasaría por tres estados Montana, Dakota del Norte y Nebraska.
Obama, basándose en una evaluación del Departamento de Estado, dijo que el proyecto no está en el interés nacional de Estados Unidos y que «no haría una contribución significativa a largo plazo para la economía nacional.» Además explicó que no bajaría el precio de la gasolina nacional y no reforzaría la seguridad energética.
«Esta decisión deja en ridículo las denuncias de que Obama comanda una guerra económica contra Venezuela«, dijo Carlos Rossi, presidente de EnergyNomics, una firma de consultoría con sede en Caracas, en una entrevista telefónica, al tiempo que añadió que «si Obama quisiera librar una guerra económica contra Venezuela, aprobar la construcción de ese oleoducto habría sido una excelente manera de hacerlo».