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Los detectives que investigan la muerte del concejal Eliézer Otaiza determinaron que el ex director de la Disip se equivocó de ruta de regreso a casa la madrugada del sábado y se internó en un callejón sin salida del barrio La Palomera, donde fue sometido por “Los Menores”, una de las bandas más peligrosas del sector
Según la versión no oficial que hizo pública este jueves el periodista Víctor Escalona de Últimas Noticias, Otaiza se despidió de su asistente a de las 2:00 am y condujo por la carretera de Baruta hacia Tazón para ir a su casa cerca de Fuerte Tiuna, pero se extravió hacia La Ceiba, en La Palomera, donde fue atacado por la banda que minutos antes había sido sacada de una fiesta.
La agresión al concejal fue vista por los asistentes a la celebración, quienes aseguraron que lo golpearon salvajemente “porque era un policía”.
“Los Menores” se llevaron a Otaiza en su auto y lo mataron en Turgua. Una comisión de Polibaruta observó cuando regresaban a exceso de velocidad y quiso detenerlos, pero los sospechosos les dispararon.
Según la fuente, la banda chocó la camioneta y huyó hacia La Palomera. Polibaruta recuperó el auto y lo llevó a la Subdelegación Santa Mónica del Cicpc, donde determinaron que era de Otaiza. Los pesquisas iniciaron la búsqueda del concejal y lo hallaron el lunes, cuando el jefe de la División contra Homicidios del Cicpc lo identificó en la morgue de Bello Monte.
El único detenido es un vecino de La Palomera, de 21 años. El Cicpc busca a 10 sospechosos. Este miércoles el cuerpo de Otaiza fue sepultado en el Cementerio General del Sur.
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Sin embargo, en horas de la tarde el presidente de la República, Nicolás Maduro, anunció en la concentración oficialista por la celebración del día del Trabajador que el asesinato de Otaiza había sido planeado en Miami y que tenía pruebas, así lo reseña la web de El Nacional.
Acusó de ese asesinato a “sectores que tuvieron el poder mediático y económico en Venezuela, en el pasado”. Maduro además afirmó que el asesinato “fue ejecutado como un falso positivo para que fuera presentado ante la opinión pública como un hecho de violencia más, como se planifican los falsos positivos en nuestra hermana Colombia”.
“Tenían meses alentando el asesinato de Otaiza y de otro líder de la revolución, y lo prepararon para tratar de esconder las intenciones de sus autores intelectuales. No puedo abundar en detalles de la investigación pero lo que sí puedo denunciar hoy es que en la prensa de hoy un grupo de periodistas comienzan a regar una versión del asesinato de Otaiza, que cuadra perfectamente en la versión que montaron sus asesinos (…), tratando de asesinar moralmente ahora a Otaiza», así lo denunció.
