La disponibilidad para viajar con vehículo desde Caracas hasta Margarita, en ferry, apenas duró 15 días y con ello las colas para comprar boletos se acabaron
Jacobo Villalobos
En las primeras dos semanas de haberse iniciado la venta de boletos en Conferry, para viajar de Caracas a Margarita por Navidad y Año Nuevo, los cupos para los vehículos se agotaron y con ellos la largas colas para adquirir pasajes también.
Mientras que en los primeros días (iniciaron las ventas de diciembre y enero el 18 de noviembre) frente a la oficina de Conferry de Plaza Venezuela se podían ver a cientos de personas haciendo cola para adquirir su pasaje a la isla, con clientes que comenzaban a llegar antes de las 6 am, actualmente el número de compradores se ha reducido hasta ser menos de cuatro personas por vez. ¿La causa? “Tenemos pasajes para todo el mes, pero si es con carro, no. Así no tenemos pasajes”, confirmó un taquillero.
Para el primero de diciembre ya se habían agotado, según se pudo conocer de manera extraoficial. Se intentó conocer la causa pero los encargados argumentaron que no podían contestar ninguna pregunta. “No tenemos autorización para dar ningún tipo de declaración. Cualquier pregunta tiene que ser directamente por el Ministerio”, dijo uno de los funcionarios de Conferry.
Usuarios consultados en el lugar recordaron que el atractivo del ferry es que permite trasladar el vehículo personal. “Con ello puedo ahorrar el transporte dentro de la isla. Del resto, no es ventajoso porque es lento y tedioso”, comentó Yurmaris Zanardo, usuaria frecuente de este servicio.
Más de uno llegaba a comprar y al recibir la información se iba con las manos vacías. Pocos compraban únicamente el boleto personal, el cual cuesta 1.760 bolívares.
Olga Almerida, otra de las consultadas, reclamó que las unidades no tengan la misma calidad que antes. «Están un poco deterioradas, ahora tardan más que antes en llegar y además los usuarios tampoco contribuyen».
Sobre la disponibilidad de boletos, así como de la condición de las embarcaciones, cantidad de flota, demanda de compradores y los cronogramas de viajes, La Razón intentó obtener información de mano de los encargados pero la respuesta fue siempre la misma: “No podemos dar declaraciones al respecto”.
