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José Elías Torres: “Trabajadores sufrimos una catástrofe”

Jose Elias Torres

“El Carnet de la Patria y las cajas CLAP fueron implementadas para administrar la pobreza y ejercer control”, afirma el secretario general encargado de la CTV


Carlos Díaz

Desde 2016, la Confederación de los Trabajadores de Venezuela (CTV) alertó, mediante un documento titulado “De la catástrofe a la prosperidad”, sobre la gravedad de la amenaza que se cernía en lo laboral y social debido a las políticas económicas del gobierno, afirma José Elías Torres, secretario general encargado de la CTV, en entrevista con La Razón.

“La forma testaruda de implementar ese modelo económico nos trajo a la catástrofe que hoy sufrimos los venezolanos”, reitera. “Nos dimos cuenta entonces que la política central consistía en empobrecer cada vez más la gente, paralizar el aparato productivo y hacer que la gente dependiera más del gobierno y, por tanto, poder ejercer mayor control”, agrega.

Acota que frente a este panorama, la posibilidad de solucionar el deterioro económico se aleja. “El Carnet de la Patria y las cajas CLAP fueron implementadas para administrar la pobreza y ejercer control, y tampoco es socialismo sino parte de un gobierno autoritario que busca la manera de continuar en el poder a toda costa”, afirma.

«En las Inspectorías del Trabajo hay militares tomando decisiones laborales, y en todos
los ministerios ha habido jefaturas de personal dirigidos también por militares»

¿Qué ha hecho o dejado de hacer la dirigencia sindical oficialista y opositora para defender los derechos de los trabajadores en medio de la presente crisis?

– No olvidemos las primeras metas del presidente Chávez al llegar al poder era acabar al movimiento sindical de forma radical. Tampoco olvidemos cuando lanzó a Aristóbulo Istúriz a la presidencia de la CTV con la promesa de pulverizarla. Luego procedieron a crear paralelismos con casi 7 mil sindicatos y otras centrales como Únete y la Central Socialista Bolivariana, que no son más que aparatos serviles al régimen que no defienden a los trabajadores que, por ejemplo, son despedidos por expresar su opinión política.

Qué opina de la dirigencia sindical que milita en milicias y, además, ostenta camionetotas de lujo?

– Eso forma parte de la composición que hay a lo interno de las organizaciones que son afines al sector oficial, y el movimiento sindical no escapa de ello. Es una descomposición ética y moral que se ve en muchos sectores, y del cual, repito, el movimiento sindical no escapa. Inclusive, se sienten orgullosos de que los nombren parte de milicias militares y con rangos tales como tenientes, y esto es algo inexplicable e incomprensible en cualquier país del mundo.

VIOLAN LAS LIBERTADES SINDICALES

¿Esos lujos de los dirigentes sindicales es rechazado por los trabajadores?

– Esa desfachatez es rechazada por los trabajadores, y esa actitud del sindicalismo oficialista demuestra el nivel de militarización que ha habido en las relaciones laborales. Vemos, por ejemplo, que en las Inspectorías del Trabajo hay una serie de militares tomando decisiones laborales, y en todos los ministerios ha habido jefaturas de personal dirigidos también por militares. No se trata de que no tengan la capacidad sino que el gobierno lo está haciendo para tener mayor control, como una manera de intimidar a los trabajadores, y así evitar los reclamos de hechos que están sucediendo en los diferentes entes oficiales. Esto es abuso de poder y, además, la gran mayoría de la clase trabajadora está saliendo a la calle para reaccionar a esta situación tan crítica y difícil.

¿Cuáles son los principales derechos laborales conculcados durante los recientes años?

– Con la aprobación de la última Ley Orgánica del Trabajo tuvimos un retroceso porque se eliminó una serie de beneficios, y lo más grave es que fueron incluidos artículos con el propósito de ejercer mayor control sobre el movimiento sindical. Esto chocó abiertamente con el Convenio 87 de la OIT, uno de los artículos que más defiende esa organización y la cual está relacionado con las libertades sindicales, y el cual ha sido violado abiertamente por el gobierno al colocar controles como la actualización anual de la data de las organizaciones sindicales. Esto ha sido una violación abierta y que la hemos venido denunciando.

TRABAS DEL CNE

¿Todavía existe la CTV?, ¿es un cascarón vacío?

– En ese tipo de discusión no tenemos ningún tipo de complejos. En un lapso de tres meses, entre febrero y abril del año pasado, se produjo la muerte lamentable de cuatro compañeros emblemáticos del movimiento sindical: Manuel Cova, Pablo Castro, Ramón Petit y Jesús Ramírez. Por ello, varios suplentes tuvimos que asumir a la dirección. La CTV fue vista antes como una organización que marcaba pauta frente a los demás entes de poder, y que podía levantar el teléfono para exigirle a un ministro o gobernador. Luego de haber llegado este gobierno, que se propuso acabar con el movimiento sindical, entonces en forma táctica la CTV bajó sus directrices para las organizaciones de base y las cuales se encuentran en más contacto con los trabajadores. El objetivo, entonces, es fortalecer al movimiento sindical desde las bases hacia las cúpulas.

¿Por qué la CTV no ha realizado elecciones?

– Somos la única organización central que ha intentado realizar su proceso de elecciones, algo que ni siquiera ha intentado el oficialismo. Sin embargo, luego de cumplir todas las exigencias del Consejo Nacional Electoral (CNE) resulta que siempre nos ponen trabas. Nos encontramos entonces en el plazo número 8, que es cuando presentamos los listados y el CNE debe realizar las observaciones y certificarlos. No ha sido posible que el CNE certifique a los 208.000 trabajadores que están afiliados a las 36 federaciones y más de 300 sindicatos, y pasar así al siguiente paso. Somos el único movimiento sindical del país que tiene esta certificación, ninguno otro se ha atrevido a llegar a este paso.

«Si nos legitimamos a través de elecciones, ya no podrán decir que la central oficialista es la principal del país»

¿A qué atribuyen las trabas del organismo electoral?

– Si nos legitimamos a través de elecciones, no podrán decir entonces que la central oficialista es la principal del país. Ellos ni siquiera han intentado hacer elecciones.

Por ende, ¿Carlos Ortega sigue siendo presidente de la CTV?

– Desde que Carlos Ortega tuvo que salir obligatoriamente del país, decidimos mantenerlo en la presidencia porque, además, él no renunció. Luego asumió la representación el compañero Manuel Cova, quien falleció el año pasado, y debido a las circunstancias yo comencé a conducir la secretaría general. El compañero Ortega está pendiente de las cosas que suceden y conversamos permanentemente sobre algunas cosas.

SIN DIRECTRIZ POLÍTICA

¿Ha continuado la línea conspirativa desde la CTV y la cual se expresó en abril de 2002 cuando junto a Fedecámaras derrocó a Chávez?, ¿esa línea ha continuado, ahora con Maduro en la jefatura del Estado?

– Quiero aclarar que no se trató de una línea conspirativa. Fue desde el gobierno donde vino el ataque político contra la CTV cuando anunció que la iba a acabar, y la CTV lo que hizo fue protegerse, resguardarse y defenderse de aquella reacción. La derrota que le dio Carlos Ortega a Aristóbulo Istúriz molestó bastante al gobierno, y a partir de allí se afincaron más en nuestra contra. Hubo una movilización y el paro se hizo dentro de las normativas establecidas, y los resultados no fueron como se esperaba. Pero, línea conspirativa como tal no ha habido desde el punto de vista político. Desde 2005, aplicamos la conducta de ser más apegado a las directrices de carácter sindical tanto nacional como internacional. Hoy la ruta de la CTV es fortalecer el movimiento sindical y lucha social frente a este o cualquier otro gobierno que irrespete los derechos de los trabajadores.

¿Forman parte de la MUD?

– No somos miembros, ni pertenecemos a mesas de unidad, ni nada por el estilo. Pensamos que cumplen unas funciones, pero nosotros como miembros de la junta directiva no somos activistas de partidos políticos. La CTV no está plegada a la directriz de ningún partido ni organización de carácter político.

¿Fueron invitados al proceso de diálogo?

– No hemos sido invitados, ni consultados. Los trabajadores no tienen representación en esas comisiones. Nadie consultó a ninguna de las centrales, ni mucho menos a la CTV. Lo que estamos haciendo es buscar soluciones y respuesta a los grandes problemas porque la gente se está muriendo de hambre.

¿Ha calado en los trabajadores la posible opción electoral del empresario Lorenzo Mendoza?

– Estamos trabajando y enfocados en la búsqueda de soluciones para los trabajadores. Hay algunos compañeros sindicalistas que tienen su posición y solo le pedimos que no declaren a nombre de la CTV acerca de temas políticos. Muchos de ellos, en verdad, tienen que ubicarse: ser dirigentes sindicales o políticos. Es una cosa o la otra, o, por tanto, se producirá entonces un choque como hubo en el pasado.

«Maduro no es obrerista, es el que más ha violado los derechos de los trabajadores»

CARNET DE LA PATRIA ES CONTROL

¿Cuáles son los sectores de los trabajadores más afectados con la crisis económica?

– Debido a la situación económica todos los sectores se han visto afectados. Sin embargo, ha crecido la población de la economía informal, y la cual ha recibido a muchos profesionales y técnicos motivados por la necesidad de conseguir mejores ingresos que todos estos miserables salarios.

¿Cuántas convenciones colectivas están vencidas?

– El gobierno discute las que les conviene por razones mediáticas. El año pasado había más de 300 contratos colectivos que esperaban por ser discutidos. Hoy la crisis es tal que la convención colectiva, que es el torrente sanguíneo que le da vida a las organizaciones sindicales, pasó a un segundo plano. Debido a la escasez y carestía de los alimentos y las medicinas, los trabajadores ya no están pendientes de la contratación colectiva. Frente a un escenario de hiperinflación no hay contratación colectiva que valga, ya no es la principal herramienta de lucha de los trabajadores. Hay que buscar otro tipo de presión para equilibrar los ingresos y aliviar la situación de los trabajadores.

¿Qué pasa con los trabajadores de Pdvsa?

– Pdvsa no está produciendo lo suficiente para pagarle a los trabajadores y, por ende, ha caído su nivel de vida, hasta el punto de quedar igualado al resto de la sociedad. Creo que bajó en más de 100 %. Y en el sector del sector público esa caída ha sido en más del 200 % Todos hemos resultado empobrecidos y los incrementos salariales han intentado mantener el nivel de ingresos pero, igualmente, se ha producido ese empobrecimiento.

¿Se controla a los trabajadores a través del Carnet de la Patria?

– Es la medida más eficiente y eficaz para tener control sobre la población. Los trabajadores, que así lo deseen, se inscriban en el Carnet de la Patria y tener así la oportunidad de acceder a algunos alimentos y los bonos que está anunciando el gobierno. El gobierno lo planteó así: el que no tenga Carnet de la Patria no tiene derecho ni al agua. Más del 60 % de las personas y los trabajadores que tienen el Carnet lo hacen por la necesidad o por obligación.

DESCAPITALIZACIÓN DE CEREBROS

¿Maduro es un presidente obrerista?

– Eso es parte de su discurso para el sector que lo apoya, y el cual, afortunadamente, no es mayoritario. Debería tener mucho cuidado con ese calificativo porque ha sido el Presidente que más ha perseguido y violado los derechos de los trabajadores.

¿Por qué no vino este año la Comisión de Alto Nivel de la Organización Internacional del Trabajo (OIT)?

–  Una Comisión de Alto nivel de la OIT ha venido en dos ocasiones durante los últimos tres años para constatar las denuncias que se han venido haciendo, y ya vimos que recientemente el gobierno obstaculizó su arribo al país. Esto demuestra que el movimiento sindical, al igual que el empresarial, ha sido perseguido. No viene porque el gobierno intentó ponerle una agenda a su medida y no la que trae la OIT con su agenda

¿Qué opina de la diáspora laboral?

– La mayoría que está yendo son jóvenes profesionales, muy calificados. El país se está descapitalizando de cerebros. Para tratar de colaborar con ese fenómeno, hemos conversado con algunas centrales laborales en algunos países y estamos impulsando con Chile un convenio bilateral CTV-UNT, luego de conversaciones con su comité ejecutivo y mediante el compañero Víctor Moreno se firmó un convenio para una asistencia técnica y jurídica de orientación para los venezolanos que están llegando a ese país, y superen la situación penosa de gente que duerme en la calle y desempeñando trabajos miserables o pasando trabajo. Se lo planteamos a Fedecámaras y les pareció una idea excelente, y la esperanza de que regresen al país cuando mejoren las condiciones mejoren. También hemos conversado con la Iglesia, y estamos tratando tocarlo con Brasil y Ecuador.


“Seguimos dando la pelea”

José Elías Torres destaca que, la CTV agrupa al movimiento sindical independiente y con representación en los 24 estados. “La CTV y Codesa seguimos dando la pelea y haciendo denuncias a pesar de toda la presión junto a las acciones del gobierno para hacernos desaparecer”, afirma. “Hoy en día, el movimiento sindical ha ido tratando de compenetrarse y de rescatar la confianza en el sector de los trabajadores”, agrega.

¿Cómo se siente al asumir la encargaduría de la secretaría general?

– Ese ha sido un tema muy discutido en mi familia y con mis amigos. Esta función que no la busqué, yo vengo de la presidencia de la federación bancaria y en donde, por cierto, me siento orgulloso de mi gestión porque logré firmar el mejor contrato colectivo de la banca en toda su historia. También tuve la oportunidad de representar como diputado al estado Lara. Soy de quienes creen en las nuevas generaciones, y, bueno, de repente, se murieron cuatro compañeros. Este es un compromiso ético y moral, y de mucha importancia.

¿Cuántos años tiene de trayectoria en la lucha sindical?

– Comencé en el Banco Industrial de Venezuela en el año 1973, cuando apenas tenía 19 años. Me nombraron entonces delegado sindical porque hablé mucho en una reunión. Soy contador pero nunca pensé que iba a seguir en esta carrera, y me atrapó, y voy cumplir 40 años de trabajo. Tengo 65 años de edad. Esta es también una de las profesiones más ingratas porque hemos visto a compañeros que tuvieron cargos de primera línea en el movimiento sindical y hoy tenemos que ayudarlos para pagar la luz de la casa o para comprar una canilla.

¿Quiénes fueron sus maestros en la lucha sindical?

– Aquí en la CTV hubo gente como José Beltrán Vallejo, un hombre a quien respeté mucho, un dirigente de primera línea. También respeto mucho a Federico Ramírez León, un hombre de quien aprendí mucho y quien supo retirarse a tiempo, y da muchos consejos, él me dijo: “Me alegra que estés tú, porque te conozco. Pero acuérdate de algo: el movimiento sindical hoy en día no lo puedes manejar como lo hicimos en el pasado porque tenemos otras realidades”.