Lo que hicieron con la tumba del Maestro Rómulo Gallegos, es repetir la historia del desmantelamiento de Venezuela.
Félix B. Sucre
«La revolución roja rojita tiene sus propios íconos, el escritor Gallegos no es uno de ellos«
En estos 22 años de presunta revolución ha sido profanada una Nación, por lo que no tiene nada de extraño que una tumba escape a tales fechorías de los propios o extraños de esos cementerios, dónde los actos delictivos están a la orden del día. Por lo que no debe producir ninguna sorpresa lo que han han hecho con esa tumba.
El autor de Doña Barbara, Sobre la Misma Tierra, La Trepadora, Pobre Negro, Canaima El Forastero, como lo fue el Ilustre Maestro Rómulo Gallegos, no podía escapar a la satrapia generada por los accionarlos del PSUV y aliados, quienes prefieren silenciarse como si de esa manera estarían exonerandose de las acciones delictivas de sus socios de travesía. Ellos, el PPT, el MEP, PCV, UPV, Podemos, Tupamaros, son parte de las acciones vandálicas y criminales de los amos del poder, quienes no se pueden justificar ni tampoco escudar en que nada tienen que ver con lo que hacen los que están en Miraflores.
La alcahuetería es parte de la responsabilidad. El desfalco a Venezuela es parte de su responsabilidad. La corrupción que comenzó con el Plan Bolívar 2000 es parte de su responsabilidad. El desastre de Pedeval es también su responsabilidad. La corrupción de PDVSA es parte de su responsablidad. Los Empresarios de Maletines que se llevaron más de 23 millones de dólares es parte de su responssbilidad.
Son muchos los temas que tenemos en un país desvalijado por una revolución de alcahuetes que pretenden dar clase de moral política, cuando se han aliado a la peor escoria que hay en Venezuela, representada en el PSUV, partido que dejó a AD, Copei, el MAS como meros roba gallinas. Por lo que no tenemos escapatoria.
Lo que hicieron con la tumba del maestro Rómulo Gallegos, es repetir la historia del desmantelamiento de Venezuela. Los afectos tenían que haberle hecho, por ejemplo, en el Cementerio del Este, un lugar para el Maestro Gallegos, bien que se lo ha merecido. Sin embargo, tal vez esa idea no pasó por la mente de Henry Ramos Allup o Luis Aquiles Moreno, porque Bernabé Gutiérrez no tuvo tiempo de sugerirla, ya que estaba ocupado en la conspiración para convertirse en secretario general nacional, como sueño de «un indio de La Urbana», así no tuviera los credenciales políticos para codearse con la crema de la intelectualidad política venezolana.
¿Eso todavía existe?
En muchos de ellos que pretenden hacer opinión pública, buscando diferenciarse de los que están en el poder y hablan de dólares, encontramos discursos seudociudadanos, sin la debida fortaleza para escribir algo que nos permita recogerlo en algún texto de referencia para las futuras generaciones, las que tienen derecho a saber que Venezuela fue gobernada por unos saqueadores que tuvieron aliados con complejos de revolucionarios, cuando en realidad eran la misma vaina.
La memoria histórica de Venezuela ha comenzado a partir del 4 de Febrero de 1992 con la intentona golpista de Hugo Chávez, quien después se convirtió en el supremo comandante de corrupción, el mayor logro de un presunto revolucionario que tuvo, y tiene, de aliados a personas que enfrentaron a los adecos y copeyanos hasta con las armas, para ser hoy cómplice de tanta fechorías que da asco.
De ellos no hemos escuchado decir nada de lo que pasa en Miraflores. En muchos casos su discurso de circunscribe a las sanciones gringa, como si los males del país vienen de allí. «Lástima que no sea verdad tanta belleza». El saqueo es lo que tiene jodido a Venezuela. PDVSA es el mayor ejemplo. Si no pregúntenle a los militares. Vayan al Arco Minero de Bolívar y Amazonas para que vean o sepan lo que hacen, incluso, los aliados de Nicolás Maduro, como son los ELN y la FARC, que andan por Puerto Ayacucho o San Fernando de Apure como Pedro por su casa. No obstante, en las caras de jóvenes militares hemos visto la impotencia, tal como la siente la familia de Teotiste de Gallego, cuando no hay como hacer justicia. Venezuela, el expais del que nos habló el profesor Agustín Blanco Muñoz, está llegando a su final.
Cómo irán a hacer cuando, en un momento que toda esta vaina cambie, con el mamotreto que tienen en el llamado cuartel de la montaña. Seguro que los Chávez lo van a mantener porque para eso tienen bastante dinero.