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En varios escenarios se ha conocido que Nicolás Maduro no juega limpio
Félix B. Sucre
CNP 8526
En Casa Amarilla se sentían felices mientras compartían con los integrantes del gobierno de Nicolás Maduro en una especie de “piñata política”, en nombre de un país que no representan.
No tiene sentido que ahora muchos dirigentes de la Oposición Casa Amarilla anden lagrimeando por los resultados electorales obtenido en las elecciones parlamentarias del 6 de diciembre, convocada por el CNE nombrado por el Tribunal Supremo de Justicia. Dichas elecciones dejaron al desnudo a esa oposición.
Eso era de esperarse. Los únicos que no lo sabían eran ellos. O, por otro lado, lo sabían y quisieron hacerse los pendejos. No es tiempo de Hermanitas de la Caridad. Pero como entre el grupo de la referida oposición hay cristianos, quisieron jugar con el tahúr que ha jugado con “cartas marcadas” desde que habita los predios de Miraflores.
Al Psuv le salió bien el negocio con esa dirigencia que no supo motivar a los electores con sus propuestas»
En varios escenarios se ha conocido que Nicolás Maduro no juega limpio. Qué es un político mañoso y malamañoso en extremo, lo que debe ser visto como algo natural cuando se trata de conservar lo que debe conservar.
En este caso, él y la cúpula que lo acompaña, como es la del PSUV y las pequeñas franquicias que maman de la misma teta, como el MEP, PCV, UPV, ORA, Tupamaros, Podemos, entre otros, tienen que engañar a los que vengan a negociar con él, ya que -por otra parte- está obligado a ofrecer espejitos o cualquier otra baratija.
De hecho, hay que apuntar que le salió bien el negocio con esa dirigencia que ha quedado al descubierto; dirigencia que no supo motivar a los electores con sus propuestas.
Esta oposición, derrotada el 6D por el PSUV, no se pronunció enérgicamente en contra de la decisión de la Sala Constitucional»
Sin embargo, como algo trillado, muchos de eso políticos, como para darse ánimo, tal como el que va a pasar frente a un cementerio a medianoche, que bien Silva, canta, voltea la mirada a otra parte o se echa a correr. Obviamente, estos se han lanzado a criticar y maldecir a los que llamaron a la abstención, como si ellos no estaban también en su derecho de expresar una opinión.
La abstención fue una opinión válida, de peso. No obstante, algunos de la Oposición Casa Amarilla llegan al colmo de hablar paja al hacer cuestionamientos, incluso irrespetuosos contra el otro sector de la oposición, conocido como el G4, liderizado por el diputado Juan Guaidó, donde están integrantes de AD, PJ, VP, UNT, VV, partidos que fueron confiscados con el visto bueno de ellos.
Esta oposición, derrotada el 6D por el PSUV, no se pronunció enérgicamente en contra de la decisión de la Sala Constitucional, quien sin una razón de peso le entregó las organizaciones a estos personajes que ya todos conocemos.
Y que, además, sabemos que por lo que se mueven es por lo suyo, y es posible que se alegren si están jodiendo a los otros, sin pensar que “con la misma vara serán medidos”.
Todos estuvieron de acuerdo con elevar el número de diputados a la AN, decisión rechazada por el G4, OEA, CE y la ONU»
Pues bien, el 6D fueron medidos. No vengan ahora a echarle la culpa al CNE por la adjudicación de curules. En la Mesa de Casa Amarilla se hicieron los acuerdos entre las partes, sobre todo en materia electoral, donde el descaro fue cómplice, ya que se pasaron el artículo 186 por el forro.
Eso no lo hizo solo el PSUV, todos estuvieron de acuerdo con elevar el número de diputados a la Asamblea Nacional, decisión que fue rechazada por el G4, OEA, CE, ONU y por los países que reconocen a Juan Guaido’ como presidente provisional o interino. Pero la Oposición Casa Amarilla no le paró a eso.
Venezuela es un país sin relaciones, sin tratados. Solo los tiene cuando le conviene, de resto para nada sirve, entonces la Constitución Bolivariana no tiene razón de ser.
Maduro y sus aliados agradecen a quienes se encargaron de participar creyendo que tendrían diputados como arroz»
Es lo mismo que se pudiera decir de la oposición lloricona, la que no trata con plañideras para que no se sepa que por dentro llevan su dolor, ya que el muerto lo tienen allí es culpa de ellos mismos; no de Juan Guaidó ni de Donald Trump, quien tiene su propio lamento, mientras que Guaidó cuenta su propio tiempo político, el cual, aún con mejores puntos en los sondeos de opinión, aparte de una Consulta Popular que lo favorece, más que a los que participaron juntos en las parlamentarias, está obligado a tomar un camino políticamente correcto,
Aun cuando sobre él hay una amenaza de prisión hecha por Cilia Flores, la propia esposa del inquilino de Miraflores, quien, dicho sea, también quiere vengarse llevando a prisión a los parlamentarios del G4, lo que con seguridad alegrará mucho a la Oposición Casa Amarilla, la que no supo articular una alianza perfecta entre ellos para obtener una amplia mayoría a la Asamblea Nacional.
Por eso, hay que enfatizarlo, Nicolás Maduro, el PSUV y el Alto Mando Militar se lo agradece a Copei, MAS, Soluciones, Esperanza por el Cambio, Avanzada Progresista, Unión Progreso y Cambiemos, los que se encargaron de participar creyendo que tendrían diputados como arroz. “Chivo no come lloviendo”.
