Seis guardias nacionales están detenidos desde hace un mes por haber participado en “la masacre de los galleros”, en Barinitas, pero aún no los presentan en tribunales. El diputado Adolfo Superlano denuncia que en la entidad opera un grupo de funcionarios que extorsiona, secuestra, tortura y asesina
Patricia Marcano
Al menos desde hace dos años, según la información que maneja el diputado de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), Adolfo Superlano, un grupo de funcionarios activos de la Guardia Nacional Bolivariana junto a personal civil está actuando como banda delictiva en el estado Barinas.
Superlano visitó La Razón para denunciar esta situación porque los uniformados han ido escalando en los delitos que cometen. “Se está institucionalizando un comando de la muerte, se está institucionalizando a través de los cuerpos policiales un comando de sicariato y eso va a trastocar a la sociedad, sobre todo al estado Barinas”, señaló el parlamentario de la Asamblea Nacional.
un viernes, hace dos meses, a la 1 de la tarde se llevaron detenidas a cinco personas, cuatro hombres y una mujer
Relató que un grupo de guardias nacionales se han dedicado a extorsionar a comerciantes, vendedores de repuestos, dueños de farmacias, productores, carniceros, “a todo el mundo”.
“Ese es un pote que le entregan a un general. Yo venía denunciando a Annel Brito Rangel como extorsionador. Él tiene un expediente voluminoso en actos delictivos, que lo tiene la Guardia Nacional, pero como él es el brazo ejecutor del comandante de la Guardia Nacional no ha pasado nada”. “Él opera con guardias nacionales y con funcionarios de civil, exfuncionarios públicos”, agregó.
El comandante al cual se refiere es el general José Jesús Hernández Perales, comandante de la zona 33 de ese componente militar, precisa el diputado en una carta enviada por él y los otros cuatro parlamentarios electos en el estado Barinas, a la fiscal general Luisa Ortega Díaz el 20 de abril.
“Masacre de los galleros”
El diputado Adolfo Superlano asegura que este grupo comenzó a operar extorsionando a la población de Barinitas, instalando alcabalas en la localidad. Ahora estarían involucrados también en “secuestros, tortura y asesinatos”.
Lo asevera porque hace dos meses ocurrió un hecho que según investigaciones policiales y de la Fiscalía, más los testimonios de testigos, vincula a seis uniformados con un ajusticiamiento de cinco hombres.
«El informe que nos da el Cicpc habla de una masacre»
Brito Rangel y su grupo- indica Superlano- se enteraron de que un grupo de jóvenes, cuidadores de gallos en una granja propiedad de un mayor de la Guardia Nacional, habían reunido 10 millones de bolívares para apostar en una pelea de gallos.
“Les mandaron al comando civil, pero como ese comando no pudo les mandaron al comando de la guardia. Eso fue un viernes, hace dos meses. A la 1 de la tarde se llevaron detenidas a cinco personas, cuatro hombres y una mujer”, detalla.
La mujer era la mamá de uno de los hombres pero no reveló el nexo familiar y la dejan libre el viernes en la noche; los cinco fueron llevados al Desur (Destacamento de Seguridad Urbana) de Barinitas, donde además funciona el liceo militar, precisa Superlano.
“Suponemos que torturaron a algunos para que dijeran dónde estaba el dinero. Se les fue la mano y tuvieron que matarlos”. El diputado relata que tres de los muchachos aparecieron asesinados el sábado en la madrugada en el cementerio de Barinitas y el cuarto joven, llamado Daniel Torres, aparece el domingo en el sector Cobalongo, en la vía entre Altamira de Cáceres y Calderas.
«es más grave que la de Tumeremo porque aquí hay una flagrancia de cuerpos policiales, en este caso de la Guardia Nacional”
A Torres, explica el parlamentario, lo sacaron del Desur con vida y lo trasladaron al destacamento de la GNB en Altamira de Cáceres, “para desviar la atención”, pues su familia se activó en su búsqueda y comenzó a presionar. Su cadáver fue hallado junto al de otro hombre (un muchacho con antecedentes de robo que fue detenido en una alcabala instalada en la vía hacia Calderas).
Superlano explica que las autopsias confirman que a unos los mataron primero y a otros después, que los cuerpos tenían impactos de bala a quemarropa y signos de tortura. En el caso de Torres y el otro hombre, ambos tenían las manos atadas y algunos dedos mutilados.
“El general Hernández salió ese domingo diciendo que fue una confrontación. El informe que nos da el Cicpc habla de una masacre, que nosotros hemos llamado ‘la masacre de los galleros’, que incluso es más grave que la de Tumeremo porque aquí hay una flagrancia de cuerpos policiales, en este caso de la Guardia Nacional”, asegura el diputado de Barinas.
Impunidad y amenazas
Superlano explicó a La Razón que tras los hechos comenzó a investigar el caso y solicitó la presencia de un fiscal especial desde Caracas.
Presentó la denuncia en la comisión de Política Interior de la Asamblea Nacional, dirigida por Delsa Solórzano, y allí se designó una comisión especial para que viajara a la entidad, conformada por todos los diputados de Barinas: Julio César Reyes, Maribel Guédez, Andrés Eloy Camejo, Freddy Superlano y Adolfo Superlano.
«aquí hay un caso de lesa humanidad, aquí hay una masacre. No los han presentado para tratar de que el crimen quede impune»
Los diputados no fueron recibidos por el fiscal superior de Barinas pero sí pudieron hablar con el fiscal especial que llegó desde Caracas, quien visita el Desur para recabar información.
Allí un detenido logra entregarle un papel donde dice que sabe todo sobre ese caso de los galleros pero la GNB se da cuenta y lo golpean. “Le dicen que lo van a matar, pero el detenido logra llamar a su esposa y le cuenta todo, ella contacta al fiscal especial, quien regresa al Desur y saca al detenido de allí”.
Ese relato, más el de la mamá de uno de los asesinados (la señora que fue liberada y ahora está bajo protección), han sustentado la investigación y complementado las evidencias que dejaron en este caso, dice Superlano.
Por ello el fiscal especial (Oliver Uribe) emite una orden de aprehensión contra Darío Gómez (teniente de la GNB) y los sargentos Annel Brito Rangel, Marcos Bulmer Briceño, Evernio de Jesús Peña, Gustavo Méndez Abreu y José Duran Contreras. Los seis están detenidos en un comando de la GNB pero no han sido entregados a tribunales después de un mes de dictada la orden.
Además fueron removidos todos los guardias de los comandos y alcabalas de Barinitas. “Pero nosotros no estamos conformes con eso. Aquí hay un caso de lesa humanidad, aquí hay una masacre. No los han presentado para tratar de que el crimen quede impune y eso lo ha hecho el nuevo comandante de la Guardia Nacional”, denuncia el diputado de la MUD, quien además denuncia que en la entidad están tratando de vincular esos asesinatos con un enfrentamiento de una OLP (Operación para la Liberación del Pueblo), “pero los tipos no iban con ninguna orden judicial ni por ningún operativo preventivo judicial, iban por la plata de los galleros”, reiteró.
«hay evidencias y pruebas que nos llevan a un caso punible de asesinato en masa, con elementos graves como la extorsión, secuestro, tortura y asesinato»
Él junto a los otros cuatro parlamentarios de Barinas suscribieron una carta con los detalles del caso, dirigida a la fiscal general Luisa Ortega Díaz, solicitando que actúe en este caso para que no quede impune, que radiquen el juicio fuera de Barinas y cambien el lugar de reclusión de los procesados en la investigación.
“Que se ejecute la orden porque hay evidencias y pruebas que nos llevan a un caso punible de asesinato en masa, con elementos graves como la extorsión, secuestro, tortura y asesinato. Por eso también pedimos una purga de toda la Guardia Nacional en el estado Barinas”.
Tras la detención de los seis GNB el diputado Adolfo Superlano ha recibido amenazas telefónicas y advertencias. Por vías diferentes un coronel, un capitán y luego una persona anónima desde Curazao lo han contactado para decirle que tenga cuidado, “que ese Annel Brito Rangel es un asesino y están planificando echarte un vainón”, y que “van a simular un atraco para darte unos tiros porque ese tipo está molesto contigo”, denunció Superlano.
Por ello en la carta enviada a Ortega Díaz, y que también entregaron al Fiscal superior de Barinas, a algunos diputados de la AN y al Ministerio de la Defensa, solicitan protección para Adolfo Superlano y a su familia.
“Aquí no valen amenazas, intimidaciones ni chantajes. Lo que estamos pidiendo es justicia»
“Aquí no valen amenazas, intimidaciones ni chantajes. Los derechos humanos son la supremacía de la democracia así que no nos doblegamos. Esta es una lucha de todo el bloque parlamentario y creo que la Asamblea Nacional se tiene que pronunciar. Lo que estamos pidiendo es justicia”, expresó el diputado, quien además informó que piden la investigación de dos personas más, Fabián Grillo y Yimi Paredes, “operadores de Annel Brito Rangel”.
Los cinco hombres asesinados fueron Daniel Torres, Kevin José Carrasquero, Pedro Urbina, Alber Cardoza y Miguel Armando González. Uno de ellos era un joven de 18 años que fue ese día a la granja para trabajar por primera vez; su papá lo llevó en un taxi desde Barinas a Barinitas y terminó asesinado.
Su cadáver tenía impactos de bala en las manos y estas le estaban protegiendo el rostro. “Es un acto de crueldad, de barbarie, nadie puede estar de acuerdo con estos asesinatos”, expresó Superlano.