Un club anacrónico, sin conexión con los nuevos tiempos, de refugiados en un pasado superado
Gustavo Luis Carrera
No es un asunto de lenguaje sino de concepto. La anteposición de una letra origina un sentido absolutamente diferenciado del anterior. El diccionario es tajante al respecto.
Alinear es poner en línea recta, ordenar en una fila sin desvío; situarse una persona, grupo, gobierno o estado en una posición ideológica que conforma un bloque.
Alienar es enajenar, someter a alguien a una dependencia de uso o de pensamiento; hacerse dependiente de una idea o de un sistema de vida.
PAÍSES NO ALINEADOS. Cuando se comenzó a hablar de países no alineados, en la década del 60, el panorama político mundial presentaba dos grandes bloques, uno comandado por la Unión Soviética y otro por los Estados Unidos.
Un país euroasiático y un país americano asumían el papel de líderes en función de sistemas políticos opuestos: el comunismo y el capitalismo.
Ambos fungían de hegemonías imperialistas: en el caso comunista, de la URSS, a través del dominio político, económico y militar, con ocupación territorial, aherrojando países vecinos y creando las llamadas «democracias populares», así como imponiéndose en territorios tan distantes como Cuba; en el caso capitalista, de Estados Unidos, por medio de la influencia directa en la economía y la política de diversas naciones a nivel mundial, con dominio efectivo.
Situación que se mantuvo a lo largo de la llamada Guerra Fría. En ese contexto, países que se consideraban fuera de los dos bloques, se declararon países no alineados, es decir fuera del ámbito de ambos imperialismos.
PAÍSES ALIENADOS. En la actualidad, una vez desaparecida la Unión Soviética, no tiene sentido hablar de países no alineados, ya no existe tal categoría.
En todo caso, se trataría de países opuestos al poder global representado por Estados Unidos; pero ya no serían no alineados, sino alineados contra una potencia.
¿Cómo podrían ser países no alineados aquellos sometidos a reyes, a dictadores, a ayatolas y otras especies de mandones y déspotas?
¿Cómo es posible calificar de no alineados a Corea del Norte, a China, a Vietnam, a Bielorrusia, a Cuba, a Zimbawe, a Irán; todos alineados con el despotismo, con la tiranía, con la teocracia, con el seudosocialismo, con el personalismo monárquico y dinástico?
Y eso sólo para citar algunos ejemplos. Por ello, ahora, en propiedad, se trata de países alienados, sometidos a un patrón de pensamiento y de conducta fuera de época.
CLUB ANACRÓNICO. A fin de cuentas, los llamados Países No Alineados pasaron a ser un club anacrónico, sin conexión con los nuevos tiempos, refugiados en un pasado superado, animados por la oportunidad de reunirse para disfrutar turísticamente y repetir los mismos aburridos discursos de tantos años atrás, sin consecuencias tangibles.
Se trata de mantener activa una bandera, una apariencia, un cobertizo político. Y punto.
VÁLVULA: “Los países no alineados de otro tiempo pasaron a ser países alienados por un patrón de conducta y por una retórica fuera de época.
Constituyen una triste amalgama de regímenes democráticos con dictaduras, autocracias, monarquías, teocracias y seudosocialismos, en nombre de una supuesta posición independiente; pero en realidad orientados por un antimperialismo nominal, que sólo reacciona contra Estados Unidos, y pretende no ver los imperialismos que agrupa y solapa”.
